Ocio y sociedad

Edgardo Mendoza, bajo el chorro

El periodista y abogado Edgardo Mendoza es el autor de ‘Tiro de chorro’, una columna de actualidad, llena de guiños y confidencias, publicada en diferentes medios de Valledupar, que fue consagrada en diciembre 2013 con el premio a la mejor columna por el Círculo de Periodistas de Valledupar.

En este encuentro, el columnista nos dio a conocer un poco de su ser, de sus encantos y desencantos, de su fino sentido del humor el cual hace que por muchos sea amado y por otros… no tanto.

Su reconocida columna se llama ‘Tiro de chorro’, ¿Por qué ese nombre?

Yo soy del departamento de La Guajira y los guajiros en su tiempo de cacería usaban una escopeta y con tiro de chorro hacían menos daño. Disparaban balas pequeñas, dejaban a algunos animales heridos pero otros se salvaban. ‘Tiro de chorro’ tiene esa condición: le pega a todo el mundo sin matar a nadie, esa es la gracia.

¿Bajo cuál chorro le gustaría estar?

Hay tantos chorros, pero a mí me gustaría estar en un chorro de tranquilidad, de paz, en un chorro de esperanza –uno tiene un poquito de alma de poeta–.

¿Y a cuál chorro no le gustaría acercarse?

Más que a un chorro, a mí no me gusta acercarme a personas que son negativas. Me gusta la gente que sueña, que sea capaz de mirar una hoja verde y otra más verde y otra menos verde. Que sepa distinguir los colores. Me gusta la gente sencilla, la gente humilde, la gente común y corriente.

Recordamos su sección ‘Limón y Miel’ presentada en un noticiero de televisión regional. ¿Qué tiene para usted sabor a limón?

La vida misma tiene sabor a limón, lo que pasa es que uno debe andar con un frasco de miel para ir untando cada ocasión. Cada día es un reto, es una confusión. Hay una frase que dice que Dios da la semilla a cada pájaro pero no se la lleva al nido. Entonces, en ese trascurrir de andar buscando felicidad –porque la gente hoy anda buscando felicidad, quiéranlo o no–, la vida tiene sus ratos de miel y sus ratos de limón, pero hay que recordar que el limón es ácido pero es curativo. Y la miel tiene gran cantidad de azúcar pero en exceso es malo.

Entre todos los personajes que ha entrevistado, ¿Cuál es el que más recuerda?

Hay mucha gente que recuerdo por su curiosidad, por su picardía. Daniel Samper Pizano es muy pícaro en sus respuestas. Alfredo Gutiérrez es un hombre que se deja entrevistar porque sabe de todo. Hay otra gente que es muy pesada, pero hay mucha que provoca preguntarle más. Y hay personas que responden con monosílabos.

¿Quiénes responden con monosílabos?

Hombe´, qué le digo... Son tantos que mejor no mencionamos ninguno. Vamos a dejarlos quietos.

¿Dónde está la línea entre el humor y la burla?

El humor es una cuestión natural, siempre se ha dicho que los payasos hacen reír y los humoristas hacen pensar y luego reír.

¿Algún personaje de los que ha mencionado en su columna le ha reclamado?

Todos los días me reclaman para bien o para mal. Las mujeres reclaman una cosa curiosa: la edad. Siempre me dicen que tienen menos edad de la que yo les pongo, eso me parece curioso, es la forma de mantener la juventud, de mantenerse siempre eternas. Fíjese que las mujeres no se dejan ver la cédula, botan los celulares pero casi nunca la cédula. Otros me reclaman por temas políticos, pero todo lo hago es para reír, yo me río de mí mismo cuando no tengo de quién reír.

¿Desde hace cuánto tiempo está dedicado al periodismo?

En el periodismo como tal, quizá unos 20 años. Lo que pasa es que perdí mucho tiempo -y digo que perdí en entrecomillas-, en ese periodismo de sólo vallenato. Cuando uno va leyendo muchos libros -soy medianamente buen lector-, uno va descubriendo que existen otros mundos, otras cosas, otra clase de literatura, otra clase de personas, que la vida no es sólo acordeón.

¿Qué prefiere, y por qué? ¿El cielo o el infierno?

Dicen que el cielo no existe, que el infierno tampoco. Sin embargo, en el Cesar el cielo manda, el cielo cobija, en el cielo nuestro hay que estar por circunstancias, pero bueno, el cielo siempre es mejor, siempre es poesía. El infierno es una cuestión casi mental.

¿Blanco o negro?

Me gusta más el azul. No soy de blanco o de negro. Me gusta el azul en todas sus tonalidades. Me encantan las cosas azules.

¿Dulce o amargo?

Agridulce como la vida

¿Soltería o matrimonio?

Odio el matrimonio. Siempre lo odié. Estuve casado pero nunca quise casarme. No porque me haya casado con una persona mala o buena gente. Es que a mí la palabra matrimonio nunca me gustó. Creo que uno de los fracasos en mi vida fue estar casado. Menos mal volví a ser libre. Divorciado. Volví a ser yo. Yo soy géminis y los géminis somos del aire y del fuego y de todas esas cosas.

¿Partidos políticos o partidos de fútbol?

Más bien políticos pero por la línea clásica del liberalismo. Pero el liberalismo no de trapo rojo sino de pensamiento liberal, que el estado actúe liberalmente, de pensamiento normal, de socialismo sin que eso sea violencia.

¿Cuántos libros ha leído?

Este año ya he leído ocho libros. Generalmente el promedio de nuestra lectura es muy bajito comparándolo con Europa. Al mes, leo al menos cinco libros.

¿Cuántos kilos pesa?

No sé de peso. Casi no me peso.

¿Qué peso tiene encima?

El peso de la injusticia, de cosas que soñaste y no pasaron. De personas que amas y te rompen el conducto sin explicaciones, esos son pesos que hay que  resolver. Al final se resolverán, la vida pasa.

¿Muchos pesos en el bolsillo?

En el bolsillo no tanto, ni me gustaría tenerlos tanto. Los suficientes apenas.

¿Muchos amigos?

Hay gente con la que tú conversas. Pero los amigos se cuentan con las manos de los dedos. Los amigos generalmente se hacen en la primaria, en el bachillerato, esos son los que permanecen, los otros son cuestiones pasajeras, de intereses, de oportunidades, de conveniencias.

¿Insomnio?

Casi no duermo. Soy espectador de madrugadas.

Complete las siguientes frases:

Que falte el sueño pero que no falte… “El amor, que no falte el amor”.

Estar enamorado es una fiesta hasta que… “Estar enamorado es una estupidez momentánea y humana”.

El desamor debería ser sólo para… “Para gente que no tenga corazón, ni alma ni nada. En cambio, el amor sana y cura todo, pero el amor es duro, de acero, de piedra.

¿Cómo es la mujer ideal?

Una mujer tierna, que sueñe, que le gusten los colores de la vida, que se ría, que le encante la música. Y por decirte algo físicamente: que sea flaca y alta.

¿Permanece muchas horas solo?

Permanezco mucho tiempo solo y la soledad es malísima. Pero los lectores, los escritores somos solos, es un oficio solitario.

Qué prefiere, ¿Bailar o escuchar música?

Escuchar música. Soy mal bailador, nunca aprendí a bailar. Ahí más o menos me defiendo para reírme de mí mismo.

¿Cuándo un político no debe ser reelegido?

Cuando sea incapaz de cumplir lo que prometió. ¿Para qué reelegirlo? Hacerlo no valdría la pena. Pero quiénes hacen un buen trabajo, reelegirlos valdría la pena.

¿Qué le falta al municipio?

El municipio viene con carencia de confianza desde hace mucho tiempo, tuvimos demasiados malos alcaldes. No sé si el actual es malo o bueno, pero al menos transmite esa sensación de confianza a nivel nacional, aunque a nivel local hay tantas peleas, tantas cosas que uno no sabe lo que está pasando. Pero sí se tiene la mediana idea de que hay confianza.

¿Qué le sobra al municipio?

Al municipio le sobran problemas como el de las invasiones, la inseguridad que no sabe uno si es percepción o sí es realidad.

¿Qué le falta al Cesar y qué le sobra?

Al cesar le faltan líderes. A pesar de que hay juventud que está más preparada, más educada, no sé si no sabemos transmitirlo, si no sabemos contarlo, pero falta liderazgo. Parece que los líderes se acabaron. Y ¿qué sobra? Sobra gente hablando paja en las calles, mandando razones, llevando cuentos,  sobra gente que habla mal en vez de aportar el bien.

Usted qué piensa, ¿el que peca y reza empata?

Depende. Pero generalmente yo pienso que sí. Cuando uno se equivoca tiene derecho a reiniciarse, como los equipos electrónicos.

¿Qué tanto reza?

Soy poco rezandero. Más bien soy una persona que trata de actuar bien para no estar pendiente de tantos castigos.

¿Y qué tanto peca?

Pecadillos normales.

¿El mejor piropo que le hayan dicho?

Que soy inteligente y que soy un flaco buena gente.

Si el genio de la lámpara de Disney se le apareciera, ¿qué le pediría?

Qué me dé fortaleza en estos momentos.

¿Qué piensa de los candidatos al congreso?

Son muchachos buenos pero no he escuchado ideas políticamente renovadoras, ideas contundentes. Solo generalidades. En el congreso ellos van a hacer leyes y no están hablando de una ley que haga esto, que compense aquello, o sobre quitar leyes que en el país no funcionan.

Qué piensa cuando escucha:

Alcalde de Valledupar. Promesas

Gobernador del Cesar. Frialdad

Diputados. Charlas y risas

Concejales. Recochita y risas

Música vallenata. Sentimientos en acordeones, composiciones y guitarras.

Periodismo. Alma social, convencimiento, investigación, realidad, sueños, falta de tinto y ganas de servir.

Le comentamos que seguramente titularemos “Edgardo Mendoza, bajo el chorro”, usted tiene otra propuesta…

Yo propongo “El chorro de Edgardo Mendoza” y lo invertimos, pero igualmente es bueno, me suena ese.

 

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