Opinión

Martín Elías y la vida

Camilo Pinto Morón

17/04/2017 - 05:25

 

Martín Elías y su hijo Martín Elías Jr

 

Es un viernes santo caluroso en Valledupar, los termómetros están a punto de estallar, tengo los ojos un tanto aguados, un sin sabor que me impacienta y que a la vez solo me permite pronunciar unas cuantas palabras. Los designios de Dios y la vida la mayoría de veces son muy difíciles de aceptar, para ello se necesita mucha fuerza, abundante resignación, pero son eso, las determinaciones de nuestro padre, el de la ventana azul.

Hace pocos minutos se conoció del fallecimiento del artista de la música vallenata Martín Elías Díaz Acosta, hijo de Diomedes Díaz, un cantante con una proyección artística impresionante, quien a sus 26 años se había posicionado en un sitial al que pocos habían logrado acceder, un ser con un carisma y una jovialidad que daba gusto apreciar, acreedor de ese don hermoso y especial como lo es el canto de la provincia del Valle de Upar. El vallenato perdió a uno de sus buenos muchachos, hoy marcha hacia el cielo ‘El Gran Martín Elías’, quien tendrá la dicha de reunirse con desaparecidos baluartes de nuestro bello folclore.

Raras son las veces que escribo mis columnas de opinión al son de las melodías de un acordeón, pero creo que hoy la situación es muy distinta. La partida de Martín Elías deja un gran vacío en nuestro patrimonio cultural, como también considero que a través de ella recibimos un mensaje que no es tan extraño para nosotros, es algo que Dios y la vida viene haciendo de manera constante con quienes habitamos este mundo terrenal, hablo de aquel llamado a la cordura, el respeto y el valor por ese bien preciado que muchas veces ultrajamos y desafiamos, sí, la vida.

Con esto no busco imputarle algún cargo a Martín, no, todo lo contrario, lo que busco resaltar a través de este escrito es como la vida se nos puede ir tan solo en un instante, de forma inesperada, sin dar aviso alguno; ver cómo se puede apagar una vida llena de sueños como la de Martín, cómo se esfuman las quimeras de personas de buen corazón, personas que su consigna siempre fueron la buena fe y buenos comportamientos. La vida es quizá una de las muestras de amor más grande que tuvo nuestro creador para con nosotros, es labor nuestra velar por ella, honrarla.

Cuando niño, recuerdo que hubo una época en la que en las noches me levantaba llorando con el argumento de que no quería morirme, yo buscaba refugio en los brazos de mi madre, creo que ella nunca llegó a entender los motivos por los cuales yo reaccionaba repentinamente de tal manera. Hoy recordando esos episodios, me impresiona como una persona de escasos 10 años puede estar pensando en esas cosas, pero por otro lado hay que reconocer que la muerte es una realidad inocultable e inevitable, es por eso que no solo debemos vivir, hay que saber vivir.

Son muchas las enseñanzas y exhortaciones que germinan de esta lamentable coyuntura por la que hoy transita nuestro macondiano y folclórico País Vallenato.

Dicen las santas escrituras que “La prudencia vale tanto como las canas, y una vida intachable es como una edad avanzada” (Sabiduría 4, 7-17). Considero que la vida debemos afrontarla con la mayor precaución posible, sobre todo nosotros, la juventud, quienes estamos en la plena obligación de replantear nuestro norte.

Duele mucho la prematura partida de Martín Elías Díaz, sin duda alguna, uno de los relevos generacionales más integrales de nuestra música. Reconforta un poco saber que: “El bueno, aunque muera antes de tiempo, tendrá descanso, pues la vejez que merece respeto no es la que dura mucho tiempo, ni se mide por el número de años” (Sabiduría 4, 7-17). Se dice que el tiempo de Dios es perfecto, de lo cual no tengo la más mínima duda, este fue el tiempo de Martín y eso hay que aceptarlo, fue nuestro creador quien así lo dispuso, nosotros estamos sujetos a su voluntad.

Bien decía el cantor que: “No somos dueños del mundo, pero sí hijos del dueño”.

 

Camilo Pinto Morón

@camilopintom

 

Sobre el autor

Camilo Pinto Morón

Camilo Pinto Morón

Letras & Opinión

Camilo A. Pinto Morón, estudiante de Derecho de la Universidad de Santander, estudio leyes porque "pertenece a ese orden de cosas que se comprenden mejor cuando no se definen" - Levy Ullmann. Columnista de opinión en PanoramaCultural.com.co, el diario El Pilón, y Con la Oreja Roja. Fiel creyente de un oficio de opinar en serio, respetuoso, objetivo y responsable.

@camilopintom

0 Comentarios


Escriba aquí su comentario Autorizo el tratamiento de mis datos según el siguiente Aviso de Privacidad.

Le puede interesar

¿Corrupción en marcha?

¿Corrupción en marcha?

  La capacidad de asombro de los colombianos se ha agotado. Pareciera que hemos visto de todo, que ya nada nos asombra, o es tal el...

Lo que pasó y lo que vendrá en el vallenato

Lo que pasó y lo que vendrá en el vallenato

Deseándoles a todos de corazón un feliz año 2017 y, después de unas merecidas vacaciones, regreso con más bríos a seguir escrib...

Personajes y relatos mágicos del Caribe colombiano

Personajes y relatos mágicos del Caribe colombiano

  Signados por la magia del Caribe, el hombre de la costa norte colombiana, mantiene en su oralidad una serie de relatos que dan noti...

Segunda versión de Un canto al río

Segunda versión de Un canto al río

  Debo iniciar este escrito deseándoles a mis lectores una feliz navidad y un año 2023 pletórico de salud y felicidad, también qu...

Los hombres sí lloran

Los hombres sí lloran

  Cada día conozco aliados que buscan reinventarse, cambiar paradigmas y liberarse de cargas que son difíciles de llevar, como lo e...

Lo más leído

¿Cuál es la función del arte?

Gemma E. Ajenjo Rodríguez | Artes plásticas

La historia detrás de la canción “La piragua” de José Barros

Alejandro Gutiérrez De Piñeres y Grimaldi | Música y folclor

El Bogotazo, 9 de abril de 1948: el relato de la muerte de Jorge Eliécer Gaitán en la prensa

Yeison Yamir Martínez Mejía y Peter Henry Ortiz Garzón | Historia

La política, el bogotazo y la muerte de la esperanza

Carlos Alberto Salinas Sastre | Historia

Aproximación a la definición del Arte

Eduardo Vásquez | Artes plásticas

Macondo: perfil de Gabo

Oscar Pantoja | Literatura

Tres poemas de Luis Mizar

Donaldo Mendoza | Literatura

Síguenos

facebook twitter youtube

Enlaces recomendados