Bienestar

Los secretos de la respiración consciente

Armando León Caña

20/02/2014 - 09:40

 

Por respiración se entiende generalmente la entrada de oxígeno al cuerpo de un ser vivo y la salida de dióxido de carbono. Es también conocido como el proceso metabólico de respiración celular, indispensable para la vida de los organismos aeróbicos.

Con la respiración conseguimos una gran parte de nuestra energía y llevamos a cabo nuestra alimentación. Es el fundamento de una vida diaria y saludable, y sin embargo, independientemente de la edad que tengamos, podemos decir que la gran mayoría no sabemos respirar. Es un ejercicio que solemos hacer para responder a unas necesidades básicas de nuestro organismo.

La respiración no es solamente una actividad de los pulmones. Todo el organismo respira a través del pulmón. Cuando lleves a la práctica el ejercicio que sigue más adelante te vas a dar cuenta de los siguientes beneficios de la “Respiración consciente”:

-Alivia una cefalea tensional.

-Mejora tu tensión arterial.

-Disminuye miedos y temores.

-Controla procesos de ansiedad.

-Incrementa la creatividad.

-Mejora tu calidad de sueño.

-Fortalece el sistema inmunitario.

-Tienes claridad en tus pensamientos a la hora de tomar decisiones.

-Mejora el manejo delas emociones.

A continuación, enumero algunos tips para que tu respiración sea consciente y que, en este proceso, tengas grandes beneficios en tu vida personal:

1. Relájate. Inhala lentamente y siente conscientemente cómo se expande hacia afuera tu cavidad torácica y, luego, cómo el diafragma es empujado hacia abajo. En dirección al estómago. Esto hace que tu estómago durante el proceso muestre un pequeño bulto, que es normal por el ejercicio que se está desarrollando.

2. Siguiente paso: sin hacer esfuerzo alguno pero siempre consciente, pon cuidado y siente como tu cavidad torácica junto con tu diafragma se van contrayendo naturalmente y ayudan a expulsar el aire desde tus pulmones. Este ejercicio es bueno que lo repitas entre 15 o 20 veces, y si es posible mucho más (esto dependerá de tu capacidad física y pulmonar, nunca te excedas). No olvides que la posición que hayas decidido adoptar para realizar estos ejercicios siempre te debe hacer sentir cómodo.

3. Inhala lenta y profundamente, tratando de llenar tus pulmones completamente con aire de forma consciente. Al realizar este tipo de respiración, es importante hacerlo con calma, por eso debes de escoger un momento durante el día para solo dedicarlo a tu ejercicio de respiración.

4. Exhala conscientemente, expulsando siempre todo el aire de tus pulmones. El paso 3 y 4 son importantísimos porque la realización de uno nos lleva a otro, es importante realizarlos de forma consciente durante la práctica por lo menos unas 4 o 5 veces, siempre en un estado de confort. Durante los ejercicios no hagas estiramiento a tu cuerpo. Este ejercicio, logrará después de 3 o 4 días hayas logrado acondicionar tus pulmones a este nuevo estilo de respiración.

Como te habrás dado cuenta, las palabras claves en el ejercicio son: “Consciente y comodidad”.

Una vez dominada la técnica del ejercicio anterior, pasamos a realizar un ejercicio aún más completo:

1. Inhala de forma lenta y profunda el aire, llegarás a un punto en el que sin forzarte sientas que ya no puedes inhalar más. De manera consciente, exhala muy suave y muy lentamente, y vas a ir en forma progresiva aumentando el tiempo de exhalación y hacia el final de la misma. Haz ciclos de 15 a 20 repeticiones o más en la medida que te sea posible sin esfuerzos extras.

2. Empieza por inhalar profunda y lentamente como ya lo hiciste en el paso 1. Si haces un sonido con tu laringe durante el momento de la exhalación lentamente, lograrás ir liberando a tu cuerpo de tensiones acumuladas y te sentirás mejor. Recuerda realizar ciclos de 15 a 20 repeticiones sin esfuerzo, suave y lentamente.

3. Aquí vas a inhalar lo más rápido posible, pero recuerda que rapidez no significa forzar indebidamente, exhalas lenta y suavemente pero alargando la parte de la exhalación incluyendo el sonido para liberar tensiones. No olvide de igual forma repetir los ciclos.

4. Inhala una respiración aquí si un poquito rápida y profunda llenado al máximo los pulmones, y haciendo con los labios una mueca (como si quisieras dar un beso) con un agujero pequeño, vas a exhalar a través del agujero todo el aire que puedas suave y lentamente. Después de iniciar con un par de ciclos, vas a ir aumentando las repeticiones hasta alcanzar el mayor número de veces el ejercicio.

5. El siguiente ejercicio de exhalación se hace realizando una contracción muscular de la zona abdominal hacia adentro, sin hacer fuerza, solo realiza el movimiento natural de contracción, lo suficientemente para que al expulsar el aire por tus fosas nasales sientas como sueltas el aire.

Cuando tengas la sensación de los movimientos anteriores, haz una contracción más profunda y siempre lenta de tus músculos abdominales. Al final de la contracción con el simple hecho de soltar el músculo tus pulmones nuevamente se llenarán de oxígeno como una respuesta natural y automática.

Ahora las palabras claves en el anterior ejercicio son: “Suave y lentamente”. Recuerda la postura, pues tu comodidad es primordial para realizar el ejercicio adecuadamente y obtener los mejores resultados.

 

Armando León Caña

@ArmandoLeca


Sobre el autor

Armando León Caña

Armando León Caña

Vida Saludable

Armando León Caña. Acupunturista nacido en Veracruz, México, con más de 16 años de experiencia, residente en Bogotá y dedicado a la Medicina Tradicional China. Es el fundador de Natural Skinny Acupuntura en Bogotá (Colombia) y Egresado del Instituto Médico Superior de Acupuntura y Ciencias Bioenergéticas. Además, es facilitador de cursos y talleres en MT Andina.

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