Historia

La Gripe española: la pandemia de 1918 que no comenzó en España

Sandra Pulido

04/03/2022 - 05:25

 

La Gripe española: la pandemia de 1918 que no comenzó en España
Hospital militar de emergencia durante la epidemia de Gripe Española. Camp Funston, en Kansas (Estados Unidos) / Foto: Museo Nacional de Salud y Medicina

 

La Gripe Española mató entre 1918 y 1920 a más de 40 millones de personas en todo el mundo. Se desconoce la cifra exacta de la pandemia que es considerada la más devastadora de la historia. Un siglo después aún no se sabe cuál fue el origen de esta epidemia que no entendía de fronteras ni de clases sociales.

Aunque algunos investigadores afirman que empezó en Francia en 1916 o en China en 1917, muchos estudios sitúan los primeros casos en la base militar de Fort Riley (EE.UU.) el 4 de marzo de 1918.

Tras registrarse los primeros casos en Europa la gripe pasó a España. Un país neutral en la I Guerra Mundial que no censuró la publicación de los informes sobre la enfermedad y sus consecuencias a diferencia de los otros países centrados en el conflicto bélico.

Ser el único país que se hizo eco del problema provocó que la epidemia se conociese como la Gripe Española. Y a pesar de no ser el epicentro, España fue uno de los más afectados con 8 millones de personas infectadas y 300.000 personas fallecidas.

La censura y la falta de recursos evitaron investigar el foco letal del virus. Ahora sabemos que fue causado por un brote de influenza virus A, del subtipo H1N1. A diferencia de otros virus que afectan básicamente a niños y ancianos, muchas de sus víctimas fueron jóvenes y adultos saludables entre 20 y 40 años, una franja de edad que probablemente no estuvo expuesta al virus durante su niñez y no contaba con inmunidad natural.

Fiebre elevada, dolor de oídos, cansancio corporal, diarreas y vómitos ocasionales eran los síntomas propios de esta enfermedad. La mayoría de las personas que fallecieron durante la pandemia sucumbieron a una neumonía bacteriana secundaria, ya que no había antibióticos disponibles.

Sin embargo, un grupo murió rápidamente después de la aparición de los primeros síntomas, a menudo con hemorragia pulmonar aguda masiva o con edema pulmonar, y con frecuencia en menos de cinco días.

En los cientos de autopsias realizadas en el año 1918 los hallazgos patológicos primarios se limitaban al árbol respiratorio por lo que los resultados se centraban en la insuficiencia respiratoria, sin evidenciar la circulación de un virus.

Al no haber protocolos sanitarios que seguir los pacientes se agolpaban en espacios reducidos y sin ventilación y los cuerpos en las morgues y los cementerios. Por aquel entonces se haría popular la máscara de tela y gasa con las que la población se sentía más tranquila, aunque fueran del todo inútiles.

En el verano de 1920 el virus desapareció tal y como había llegado.

Y así la llamaron…

Los periódicos españoles fueron los primeros en informar sobre una enfermedad que estaba matando a la población. En el resto de Europa, y a ambos lados de las líneas aliadas, censuraron toda información para no desmoralizar a las tropas ni mostrar debilidad ante el enemigo. Con lo cual, sólo se convirtió en noticia en los países neutrales. En un primer momento los medios de España intentaron también darle nombre extranjero bautizándola como ‘El soldado de Nápoles’ o ‘La enfermedad de moda’. Tras informar el corresponsal del The Times en Madrid, el termino de ‘La Gripe Española’ se extendería por el resto del mundo a partir del verano de 1918.

 

Sandra Pulido 

Periodista especializada en asuntos médicos

0 Comentarios


Escriba aquí su comentario Autorizo el tratamiento de mis datos según el siguiente Aviso de Privacidad.

Le puede interesar

Turbaco: entre el coraje y el deshonor

Turbaco: entre el coraje y el deshonor

Turbaco, municipio colombiano, a veinte minutos de la calurosísima Cartagena de Indias, es santuario de perplejidades. Posee un clima...

John Hawkins: el contrabandista y pirata que abrió las hostilidades con la corona española

John Hawkins: el contrabandista y pirata que abrió las hostilidades con la corona española

  John Hawkins viajaba a menudo a Canarias donde conoció a Pedro de Ponte y Vergara, comerciante cuyo padre era genovés, quien le d...

Gorgona, su pasado y presente

Gorgona, su pasado y presente

  En 1526, los primeros españoles que desembarcaron bautizaron la isla como San Felipe, nombre que posteriormente fue cambiado por ...

Los viajeros de la música y la naciente república

Los viajeros de la música y la naciente república

  Los relatos de viajeros son una importante fuente histórica, no sólo por una supuesta desprevenida o despiadada visión de aventu...

La manta arrastrá: una olvidada institución de la Ciénaga bárbara

La manta arrastrá: una olvidada institución de la Ciénaga bárbara

  "No me pise la sábana, señor. Mire que la acabo de lavar… en el río". Anónimo cienaguero Al iniciar el último cuarto del s...

Lo más leído

Síguenos

facebook twitter youtube

Enlaces recomendados