Opinión

6,5 billones de razones

Luis Alcides Aguilar Pérez

26/01/2016 - 04:40

 

Al parecer el gobierno nacional tenía 6,5 billones de razones para vender el 57,61 % de sus acciones en Isagén. Normalmente, estos sucesos económicos ocurren en el contexto de países que se orientan bajo políticas neoliberales, para “reinvertir” las ganancias de las ventas de las empresas estatales en infraestructuras, esa es la máxima del gobierno, del gobierno actual e igual forma lo sería de otro gobierno en momentos de políticas alineadas o inclinadas en la costumbre de la venta de nuestros recursos.

Con el panorama que se vislumbra con los recursos obtenidos por la venta de la empresa nacional que más agua maneja en el país, aduce el gobierno que se podría financiar una gran cantidad de proyectos, como son concesiones viales de cuarta generación. En medio de todo este proceso se involucra lo que algunos políticos visionarios como el senador Jorge Enrique Robledo, venía exponiendo desde hace muchos años, la venta de nuestros recursos naturales, ése es un acontecimiento de antaño, pero el de ahora está ligado a la entrega total de un gran patrimonio ambiental que involucra aspectos para la supervivencia de la humanidad como lo es el agua y bosques; en adelante gran parte de estos recursos estarán en manos de extranjeros. Con esta actitud, vista con la lupa de la imposición de economía política global y facilismo, nuestros gobernantes están cambiando vida por muerte.

En el ambiente gubernamental se hacen análisis para, según ellos, realizar un excelente uso de los recursos obtenidos por la venta de Isagen; pero el común de los ciudadanos sabe que más de un peso va a parar a manos de los mismo corruptos de siempre, entre ellos una gran cantidad de inversionistas privados que de seguro ya están haciendo lobby en palacio y despachos ministeriales para dar a conocer sus propuestas, como socios rentables en una economía de oportunidades para empresas privadas y de cinturones apretados para un pueblo que día a día se especializa en economía del rebusque, para poder subsistir ante el alto costo de vida.

Con dirigentes de Estado enfocados en este nuevo modelo de negocios que involucren grandes hectáreas de bosques, agua y otras riquezas nacionales, estamos llegando a un final apocalíptico, en donde sufriremos de escasez de recursos elementales para continuar existiendo como seres humanos. Llegará el momento en el cual no existirán propietarios nacionales de las tierras, ya que las mismas estarán en manos de grandes empresas extranjeras, y lo poco que podamos consumir y poseer será el producto de los resultados de segunda que nos dejen para nuestro uso, porque los de primera se estarán exportando desde Colombia a las naciones poderosas las que subsistirán gracias a la actitud equivocada de nuestros  gobernantes, entrenados bajo el precepto dejar aplicar la injerencia del garrote, maquillado con un toque de capitalismo voraz que a pasos agigantados ya se está preparando para tomar las riendas en un nuevo “mundo” de  poder basado en recursos, como agua, energía y alimentos.

6,5 billones de razones, razones que no se equiparan con la realidad de pueblos en crisis; lo que sin ser vidente podemos distinguir en medio de las guerras, sequía, epidemias y catástrofes.

Las respuestas por las razones de la venta de nuestros patrimonios, aún es confuso distinguirlo con tantos millones de millones, lo que para algunos magos no será difícil de hacerlos desaparecer.

 

Luis Alcides Aguilar P.

 

Sobre el autor

Luis Alcides Aguilar Pérez

Luis Alcides Aguilar Pérez

Buscando

Luis Alcides Aguilar Pérez (Chiriguaná- Cesar). Lic. En Ciencias Sociales de la Universidad del Magdalena. Docente de secundaria. Fiel enamorado del arte de escribir. Publicaciones: La Múcura de Parménides – Compendio de cuentos, poesías y reflexiones; Sueños de libertad – Cuentos, poemas y diez reflexiones; Chiriguaná. Historia y Cultura. Novela inédita “¡Y la culpa no es de Dios!”

@LuisAguilarPe

0 Comentarios


Escriba aquí su comentario Autorizo el tratamiento de mis datos según el siguiente Aviso de Privacidad.

Le puede interesar

Las galápagas de la violencia

Las galápagas de la violencia

En esos días, en que se estremeció de horror el país, en que el odio y la barbarie se enseñoreaban en campos y ciudades; aquí en T...

Las dos hermanas

Las dos hermanas

  Allá en San Diego de las flores, donde la familia era conocida por su apellido raizal, ya en tiempos de mozalbetes, la pareja fue ...

Editorial: En la Cultura, no vale el “Todo-Vale”

Editorial: En la Cultura, no vale el “Todo-Vale”

“En la Cultura no todo vale. Si hay algo que hay prescribir de las expresiones de la cultura es el “Todo vale””. Estas palab...

Editorial: La Afrocolombianidad y el fortalecimiento de una identidad

Editorial: La Afrocolombianidad y el fortalecimiento de una identidad

Tras una semana majestuosa en eventos culturales, hemos querido destacar en este editorial la labor de todos los que tratan de dar un e...

Donaldo Mendoza, nuestro prócer cesarense en el Cauca

Donaldo Mendoza, nuestro prócer cesarense en el Cauca

Hace treinta años el terremoto de Popayán dio génesis a una gesta que hoy se ve plasmada en la impresionante compilación periodíst...

Lo más leído

¿Qué es la oralidad?

Javier Zamudio | Patrimonio

Vida y trayectoria de Rafael Pombo

Redacción | Literatura

La Cultura y el laberinto del poder

Omar Castillo | Pensamiento

La parranda vallenata como un ritual de amistad

María Ruth Mosquera | Música y folclor

Vallenato clásico

Luis Carlos Ramirez Lascarro | Música y folclor

La parranda y el parrandero en la música vallenata

María Emilia Aponte Mantilla | Música y folclor

Síguenos

facebook twitter youtube

Enlaces recomendados