Artes escénicas

Kevin Joel, detrás de su máscara de mimo

Redacción

12/02/2014 - 08:20

 

Kevin Joel¿Iniciamos? nos preguntó con un gesto de la mano. Procedió a quitarse sus guantes blancos y bastante usados. Fue cuando dijo: ‘debo apresurarme, aún no completo la plata del arriendo’. ¿Es en serio?, replicamos. Sacando una hoja arrugada, con tachones a los lados y muchas anotaciones, respondió: ‘Y no termino de comprar la larga lista escolar’.

A su situación económica no le ve ninguna gracia. Su nombre es Kevin Joel León Hernández, tiene 27 años. El mimo más reconocido de la ciudad de Valledupar se ubica todos los días en la parte externa de la gobernación del Cesar.

Su rostro está cubierto de maquillaje. Recuerda que años atrás esa pintura tenía un valor de mil quinientos pesos, ‘era demasiada plata. Pude comprarla cuando me encontré en la calle un billete de cinco mil’, comentó.

En las calles de Bogotá aprendió ese arte. En sus inicios ‘el chiste’ le salió caro. “Las mujeres me golpeaban con las sombrillas, los hombres me correteaban y otros se asustaban tanto que llamaban a la policía”, decía con picardía.

Su tierra natal es Arjona, Bolívar. A los 16 años salió rumbo a la capital del país. Durmió en parques, comió y vistió gracias a la caridad de los demás, cantaba en busetas, vendía dulces y se inventaba cualquier cosa que le permitiera ganar una moneda.

El mimo de pantalón negro y camisa de rayas blancas y verdes, quien con solo una mirada hace reír, reúne diariamente 30 mil pesos. Está a cargo de sus dos hijos, –dos y tres años son sus edades- no tiene compañera sentimental.

“Con mi trabajo me gusta hacer que las personas olviden por un rato sus penas”, ¿y quién le hace olvidar las suyas?, preguntamos. Su respuesta demostró su inclinación por lo espiritual.

Seguimos indagando ¿qué está detrás de la máscara de un mimo? “Está un ser humano muy diferente. El mimo es un personaje cómico pero quien le da vida es una persona con temor, que sufre y que tiene problemas. Alguien que se oculta en una máscara de maquillaje y que solo deja ver la gracia aunque la desgracia esté presente”.

¿Un mimo llora? De inmediato respondió negativamente. “Los mimos no lloramos, los mimos hacemos felices a la gente. Solo hay reflejos de tristeza, pero solo eso”.

¿Los mimos se enamoran? “Sí nos enamoramos, y lo mejor, sabemos enamorar”. ¿Alguna táctica en especial? “No hay mujer que se resista a la picardía y a la alegría”.

Kevin Joel León Hernández, sueña con sacar a sus muchachitos adelante. Sueña con una casa propia y ahora ronda por su cabeza la idea de la política: quiere ser concejal. ¿Qué gracia puede tener la política?, preguntamos. “Con un buen trabajo, con un desempeño limpio, se puede ayudar a muchas personas. Y yo quiero ayudar”, contestó.

Se volvió a poner los guantes y quedó sumido en el silencio o tal vez en la soledad en la que vive a pesar de la multitud en la que convive.

 

PanoramaCultural.com.co


0 Comentarios


Escriba aquí su comentario Autorizo el tratamiento de mis datos según el siguiente Aviso de Privacidad.

Le puede interesar

El ballet Vallenato, en pleno ensayo

El ballet Vallenato, en pleno ensayo

En el Jardín Nacional del barrio Dangond se encuentran cada semana los bailarines del Ballet Vallenato. Tres veces a la semana, de las...

Las ‘336 cartas de amor’ por entregar de MaryCarmen Amaya

Las ‘336 cartas de amor’ por entregar de MaryCarmen Amaya

  Con 19 años de edad, MaryCarmen Amaya Agudelo es la menor de cuatro hermanos, hija de madre samaria y padre guajiro pero nacida ...

Las artimañas de Andrés Bravo “El Rolo” y su show en Valledupar

Las artimañas de Andrés Bravo “El Rolo” y su show en Valledupar

El silencio del inicio llamó la atención del público. Andrés parecía perdido y quizás inhibido por unos focos que aportaban brill...

Rostros del pueblo: Pochorito

Rostros del pueblo: Pochorito

La vida está tejida con hilos que millones de seres anónimos aportan diariamente con esfuerzo y esperanza, en una lucha constante por...

La danza como ritual de resistencia identitaria

La danza como ritual de resistencia identitaria

  En enero de 2015, milicianos y milicianas kurdas de las YPG/YPJ celebran la victoria en Kobanê danzando sobre los escombros de l...

Lo más leído

Síguenos

facebook twitter youtube

Enlaces recomendados