Artes plásticas
Land Art en el parque lineal de Valledupar
Reivindicar el azar y la intuición en el arte es comprender la creación como un descubrimiento sorprendente, es proponer una mirada más amplia a las fronteras tradicionales, y un esfuerzo por superar los prejuicios intelectuales y estéticos que limitan la creatividad.
Si a lo anterior se suma la posibilidad de aprovechar cualquier objeto como material artístico y relacionarlo con el ambiente para convertirlo en una vivencia, entonces puede hablarse del arte de acción.
El Land Art es una de estas manifestaciones y una vertiente muy popular del llamado “neodadaísmo”. Se caracteriza por la intervención del artista en espacios abiertos utilizando elementos que halla en el lugar, sin llevar herramientas adicionales a su ingenio. Una escena como ésta se vivió el pasado 10 de noviembre en el Parque Lineal de Valledupar, donde 21 estudiantes de Licenciatura en Arte y Folclor hicieron de las suyas con la riqueza material que ofrece esta zona de la ciudad.
Guijarros, vidrios, latas, checas, bolsas, hojas y semillas fueron materia prima de vistosos mosaicos en los que el folclor vallenato se vio representado a través de acordeones y sirenas, haciendo juego con universales imágenes de ojos, manos y paisajes.
El maestro José Aníbal Moya dirige a sus alumnos en la realización de estas actividades al aire libre y las concibe como “una reacción frente a la destrucción de la naturaleza, una protesta en la que el uso de los elementos del ambiente y la basura del hombre sirven como símbolos para llevar un mensaje de conservación”.
Las realizaciones del Land Art suelen ser efímeras, una característica irónicamente análoga a la de los objetos que utiliza, si consideramos la vida de una lata de metal o una bolsa plástica antes de lanzarlas a la canasta, no suelen durar más de 10 minutos en manos humanas.
Danna González, una de las participantes, declara sus impresiones acerca de la experiencia “las clases al aire libre resultan muy atractivas, trabajar fuera del salón ayuda a abrir la mente y a desarrollar la capacidad crítica y creativa de nosotros, los estudiantes”.
Además de sus labores artísticas y pedagógicas, el maestro Moya es conocido por su compromiso frente a la naturaleza, cualidades que conjuga hábilmente al momento de impartir sus lecciones, en las que siempre se destaca una metodología práctica y libre, que invita al estudiante a un encuentro con sus talentos.
En recientes oportunidades estos mismos jóvenes realizaron performances y jornadas de dibujo en otros lugares de la ciudad como la Escuela de Bellas Artes y el Parque de las Madres; ahora el Parque Lineal, un lugar emblemático de la ciudad pero amenazado con la desaparición, se agrega como escenario de una dinámica por el rescate y la visibilidad de los espacios públicos, que beneficia a toda la comunidad.
Sobre el autor

José Luis Ropero de La Hoz
Enfoque directo
Valledupar (1985). Profesor y comunicador por vocación, su columna “Enfoque directo” ofrece una mirada del acontecer cultural sin formalismos. Admirador de la naturaleza y el talento humano.
0 Comentarios
Le puede interesar

Eduardo Ramírez Villamizar y su encuentro con el arte abstracto geométrico en París
Ramírez Villamizar realizó dos viajes a París, que correspondieron a dos etapas de su carrera artística: el primero, de 1950 a 1952...

William Turner o la evanescencia del agua
La primera vez que escuché el nombre de William Turner (1775-1851), fue en el curso de Historia del Arte que cursé en la Universi...

Un pintor al volante
Quizá fue una gran casualidad encontrarme después de un largo periodo, con Paco Olano, precisamente en un bus urbano de Valledupa...

Arte, representación y realidad
Muchas veces se dice, como elogio de la calidad artística de una obra pictórica: “parece una foto”. Esta frase informa sobre los ...

Dicken Castro: un diseñador gráfico único en Colombia
Considerado uno de los pioneros del diseño gráfico en Colombia, el destacado arquitecto y diseñador gráfico antioqueño Dicken ...