Bienestar

Alimentos para recobrar la tranquilidad

Somos lo que comemos, ésa es una regla muy conocida. Por eso, a la hora de sentirse relajado o de prevenir la ansiedad, cambiar o adaptar su dieta también puede ser una buena decisión.

Todos los dietetistas se lo dirán, el primer paso a seguir en un proceso de mejora alimenticia consiste en retirar esos alimentos contraproducentes o frenar los que están siendo consumidos en exceso.

El café debe moderarse y los estimulantes como la guaraná limitarse a un consumo mínimo diario. Se recomienda también limitar el consumo de azúcar (pasteles, caramelos o refrescos) y reemplazarlos por frutas frescas.

A la hora de integrar nuevos alimentos que generen tranquilidad, aconsejamos los siguientes, pero siempre combinándolos con un ritmo de vida más tranquilo, un poco de relajación y, si puede ser, una breve siesta de 10-15 minutos después de la comida al medio día.

Recuerden que no sólo influye el alimento sino también cómo se ingiere. Comer productos sanos de manera atropellada o darse poco tiempo para saborearlos, anula por completo el efecto de los alimentos.

En primer lugar, la zanahoria tiende a favorecer el color de la piel y suavizar su textura. Ya sabe que, lo que se ve bien por fuera, por dentro también lo está. Puede combinar la zanahoria en una ensalada con aguacate, rico en vitamina B (que mejora la salud de los nervios y células del cerebro). De esta manera, aliviará su estrés. Además, el aguacate disminuye la presión arterial.

Los frutos secos –y sobre todo las almendras porque son ricas en magnesio– favorecen un buen estado de humor. Si además considera que tienen altos niveles proteínicos, y que son ricos en vitamina B2 y E, comprobará que son excelentes para la defensa del organismo.

Los arándanos se recomiendan especialmente por sus altos niveles de vitamina C y antioxidantes. Vienen muy bien después de una comida mezclados en un yogur o una torta ligera.  
La leche –tomada a temperatura ambiental– ayuda a conciliar el sueño. Los antioxidantes y el calcio que contiene son ingredientes perfectos para los momentos que requieren mucha concentración como los exámenes o periodos de prueba en el trabajo. De la misma forma, la avena preparada con leche contiene un compuesto llamado serotonina que permite que la calma fluya en su organismo.

Se recomienda siempre el pescado y, especialmente el salmón (rico en Omega 3), durante esos periodos de gran estrés a los que jóvenes y adultos pueden verse expuestos. Mantiene la adrenalina y el cortisol controlados, pero también mejora la actividad cerebral y reduce los riesgos cardiovasculares.

Disfrute de un buen jugo de naranja o limón en las mañanas para empezar el día con energía. Si además de esto, lo combina con espinacas en una torta de huevos obtendrá una combinación muy nutritiva que incluye magnesio.

Finalmente, los espárragos contribuyen a la tonicidad del organismo gracias a su gran dosis de ácido fólico (que ayuda a prevenir las depresiones o ansiedades). Si los incluye semanalmente en su dieta, verá que en poco tiempo respirará tranquilidad por todos los poros.