Cine

Jhon Guerrero: “Hay que diversificar y apostar a otras cosas en el Cesar”

Estrenado el cortometraje “Santo Arte”, un sector de artistas de Valledupar cultiva la esperanza de que la ola cinematográfica pueda crecer y fructificar. Nada de sueños inalcanzables. Todo lo contrario: se manejan ideas y proyectos muy concretos.

El tallerista que permitió la grabación del corto, Jhon Guerrero, habló de cómo se fueron dando los primeros pasos y qué falta para que el cine empiece a volar en el departamento del Cesar.  

¿Cómo inició el taller de cine organizado en la Alianza Francesa de Valledupar?

El taller empieza porque en el 2013 gané una beca en el ICT en el programa Jóvenes talentos. La beca consiste en que ellos te mandan al exterior y tú vienes a replicar lo que aprendiste y de esa forma se condona el dinero percibido. Al inicio de esta beca se pidió a una entidad cultural que avalara el proyecto y la única institución dispuesta a apoyar fue la Alianza Francesa, por eso hicimos el taller acá a mi regreso de Barcelona replicando las técnicas de escritura audiovisual.

¿Qué temas se abordaron en el taller?

Pasamos por el guión, la fotografía, edición, realización, montaje, de todo un poquito. En dos meses hicimos todo esto.

¿Qué dificultades encontraron en un principio y cómo las resolvieron?

Convocar a las personas, buscar a la gente y que se interesaran. Algunos estaban interesados pero tenían estudios, no podían. Pero los que quedaron fueron, finalmente, los más apasionados.

Lo más complicado en la realización fue la parte económica. Siempre es complicado ese asunto, pero el resultado es satisfactorio. Ahora que lo vi, en cuestión técnica estamos muy bien. De pronto, me hubiera gustado trabajar un poco más la historia, pero es que escribiendo un libro te puedes echar toda la vida. Para el ejercicio creo que está muy bien.

¿Cómo ha ido la realización del cortometraje?

Había gente con una cierta experiencia en el mundo audiovisual entonces estuvieron ahí como pilares para ir avanzando. A nivel actoral nos faltó un poquito de tiempo más que de capacidad. El cortometraje lo veo muy bien y al público de la Alianza le gustó. Es el primer cortometraje que hacemos y, por eso, estamos muy satisfechos. Cuando hagamos el tercero o el cuarto, la calidad irá mejorando.

¿Intervino en el guión?    

Sólo opinando. Ellos tenían toda la libertad. Yo no les imponía nada. La idea era que fuera algo democrático, creo que es la mejor forma de trabajar en un guión. El arte es muchas veces delicado porque es personal, y cuando dices algo o das una opinión, el que escribe cree que lo criticas y muchas veces se siente lastimado. Entonces, era sobre todo opinar e invitar a probar cosas.

¿Sintió las ganas de aparecer en el cortometraje?

Estuve actuando pero fue más por necesidad que por convicción. No me gusta actuar, no me gusta estar delante de las cámaras sino detrás. Sé lo que hacen Woody Allen o Tarantino, pero eso no es lo mío.  

¿Qué viene en el futuro? ¿Qué le gustaría ver en Valledupar y el Cesar?

En el Cesar, el tema de la Cultura está reducido únicamente a la música vallenata y estamos fallando en eso. Hay que diversificar y apostar a otras cosas en el Cesar. No sólo el cine: El teatro, la fotografía… Ahora hay proyectos con la Alianza Francesa que esperamos se materialicen.

Se abre la convocatoria nacional de estímulos, sería bueno que ahonden ahí. Hay una serie de estímulos por los que los artistas tienen que apostar. Son muy necesarios para informarse y formarse.

El otro problema es el Consejo de Cine. Nosotros necesitamos ese Consejo de Cine a nivel del Cesar para acceder a recursos dedicados a las artes cinematográficas.

¿En qué proyecto personal está trabajando actualmente?

Ahora mismo estoy trabajando en un guión que se llama “No hay tumbas para tanta gente”, es como mi ópera prima. Trata de un pueblo ubicado en una isla del Caribe colombiano que un día se queda sin espacios en sus cementerios para enterrar a sus muertos. Entonces, el alcalde toma como medida crear una ley donde prohíbe morir a sus habitantes. La historia trata de ese primer muerto después de la ley del alcalde. Ya he ganado un premio con el ministerio de cultura para que me asesoren. En febrero viajo a Cali y la idea es que a través de ese proyecto progrese en el ámbito de la escritura y producción.  En eso estoy ahora mismo, trabajando mi guión.

 

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