Cine

El origen de los guardianes: la revelación de estas navidades

En tiempos de Navidad, la mayoría de las películas visibles en los cines suelen dirigirse a un público joven. Es la temporada en la que, normalmente, abundan los largometrajes de animación o las comedias más variadas.

El origen de los guardianes se presenta como la apuesta de Dreamworks para estas fiestas. Una historia en 3 dimensiones para los más pequeños de la casa, aunque no podemos negar las segundas intenciones con este guión muy cuidado que también seducirá a un gran número de mayores.

De esta manera nos presentan una historia que gira en torno a los mitos de grandes culturas internacionales, sobre todo la americana: El hada de los dientes, Papa Noel, el conejo de pascua y el creador de sueños. Todos ellos se unirán a Jack Escarcha, el nuevo del grupo, el niño malo que no tiene cabida en ningún sitio para luchar con un enemigo común.

Esto es lo que vemos en el trailer –la base de la película– y conforme va avanzando la misma nos damos cuenta del esmero puesto en el guión, que respeta sumamente a los personajes, sobre todo al protagonista principal y a las características que lo definen, sus miedos y deseos.

Como es habitual en las películas de Dreamworks o Walt Disney, El origen de los guardianes habla de lo que más nos paraliza o preocupa: es decir los miedos, la soledad y de cómo superarlos, de cómo la mente y el creer que puedes hacerlo te ayudarán a superar dichos miedos, incluso la pérdida de un ser querido.

Se da mucho énfasis en los sueños de cada persona, lo que quieren conseguir o lo duro que es conseguirlo. Se hallan muchos mensajes perfectamente entrelazados que los más pequeños pasarán por alto y que pueden representar buenas lecciones para los mayores.

Sin embargo, no solo tenemos una película llena de mensajes encubiertos. Es una película animada con mucha acción y giros inesperados, y casi sin un minuto de descanso donde los personajes –todos muy bien definidos, con una personalidad independiente y coherente– interactúan de un modo muy creíble.

Nos encontramos con personalidades histriónicas, tan dispares como el hada de dientes, una trabajadora empedernida, un Papa Noel con tatuajes o un conejo de pascua muy vulgar, que en el fondo resulta ser un bombón.

Todo apunta a una película divertida, muy bien contada, estupenda para una audiencia familiar. Además, el efecto 3D es de un notable nivel: especialmente los efectos de las partículas, espectaculares en todos los sentidos.

Como conclusión, recomiendo El origen de los guardianes. Es la mejor película estrenada en este fin de año: un precioso cuento de navidad como hace mucho tiempo no teníamos.