Educación
La red de Bibliotecas Públicas del Cesar, distinguida por el ministerio
La directora de la biblioteca Rafael Carrillo, Mónica Morón, expresaba hace unos meses en una entrevista su amor por la lectura y su fe en llegar más lejos –geográficamente- con la Biblioteca. Entre sus metas estaba el deseo de salir a los corregimientos y hacer que los libros circularan más en el departamento del Cesar.
Una forma de materializar esta meta son los talleres de literatura Caracolí del Cesar y el sistema de mochilas que, en su momento, Mónica Morón definió como proyectos esperanzadores.
En estos últimos días, la biblioteca recibió una distinción de parte del Ministerio de Cultura que evidencia la buena gestión y el correcto direccionamiento en las políticas educativas.
Mónica Morón expresó públicamente su satisfacción por un reconocimiento que posiciona la red bibliotecaria en un lugar destacado del país y premia el esfuerzo de los empleados y colaboradores.
Si es cierto que todavía es difícil llegar a los corregimientos y que el espacio para mejorar el servicio es notable, esta distinción subraya la tendencia positiva de los últimos años y la capacidad de mantener lo logrado a través del tiempo.
Efectivamente, no sólo caben en la gestión cultural y educativa las nuevas propuestas sino también el esfuerzo para mantenerlas en el panorama y así convertirse en política públicas de largo alcance.
En las miras del ministerio de la cultura está el esfuerzo realizado con el proyecto Caracoli del Cesar en el cual se puede apreciar toda la filosofía de la biblioteca departamental.
La prioridad es la lectura. Desde las salas infantiles hasta la sala principal de lectura se trata de hacer que la lectura sea más amena y atractiva, y que la literatura se entienda como un acercamiento al mundo.
Uno de los mayores desafíos que Mónica Morón encontró en los primeros años de su gestión fue convertir la imagen de la biblioteca (considerada por el público joven como un centro convencional donde se encontraban los políticos) en un espacio de formación y recreo en el que se accede a los libros sin mayores trabas.
Mónica Morón defiende una gestión orientada a la promoción de los hábitos de lectura y, en esa perspectiva, explica que en los tres últimos años se han publicado tres libros que indagan sobre los hábitos locales.
Más que un premio, esta distinción es una motivación y un estímulo para seguir adelante y perseverar en este trabajo diario y, muy a menudo silenciado, de la transmisión de saber y del gusto por la cultura.
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