Literatura

Un recital de poesía en la Casa de Bahareque de Valledupar

Redacción

09/07/2012 - 10:40

 

Alvaro Maestre En las noches de Luna llena, la casa de bahareque de Valledupar se transforma en un lugar asombroso donde prima la palabra en forma de poesía.

Este pasado viernes 6 de julio la magia volvió a producirse en el patio trasero. Mientras el público adulador y respetuoso escuchaba silenciosamente,  los autores reunidos por el poeta Álvaro Maestre se sentaban detrás de una mesita para leer algunos de sus poemas.

La oscuridad solemnizaba cada instante y la brisa refrescaba a los presentes. Cada lectura imponía su silencio y su lluvia de aplausos. Alternancia de atmósferas que se repetían con una frecuencia mesurable.

Los autores de la noche se desnudaron metafóricamente. Usando las palabras para exponer el fruto de sus contemplaciones. Los sentimientos y reflexiones: esos que nada puede borrar, que andan pegados al alma o a la piel.

Esperanza Ramos Yañez (la invitada especial),  Leonor Dangond, Nina Marin, María Ketty Figueroa, Yadira Vega, Félix Molina y William Jiménez fueron los primeros en intervenir (después de una bella interpretación de vallenatos en francés por el grupo de Alex Baquero).

Luego, el espacio se abrió a los declamadores que con espontaneidad dieron vida a los textos más insólitos. Norma Arenas, Fabio Ramírez, Mery Luz Zalabata, Alex Baquero, Fabiola Vanstralem y el escritor Ricardo Arias Ortiz. Ellos son los que hicieron que esta velada terminara con una dulce nota.

En una comunicación posterior al evento, la presidenta de la Fundación AVIVA, Alba Luz Luque-Lommel, expuso su satisfacción al ver que estos eventos que dan vida al centro histórico se repiten con la mayor asistencia y que la idea de la artista y abogada Jenny Uhía se instaló sólidamente en el calendario de Valledupar.

Este ciclo de recitales empezó durante el año 2011, tras la restauración de la casita de bahareque. La primera velada tuvo lugar en pleno mes del patrimonio en Septiembre y, a partir de entonces, fue celebrándose de manera bimensual con el nombre sugerido por la poetisa Leonor Dangond: “Recitales de luna llena”.

La casita de bahareque es un lugar idóneo para recobrar la memoria del Viejo Valle de Upar. Hace poco más de 150 años, el barrio Cañaguate se conformaba esencialmente de casitas de bahareque y, con pocas excepciones como la Casa Verde, la Casa de la Purrututú, y otras 3 edificaciones coloniales en el mismo Callejón, una de las cuales es la casa de Cecilia Zubiría, todas las otras casas eran de puro bahareque y techo de palma y caña brava.

0 Comentarios


Escriba aquí su comentario Autorizo el tratamiento de mis datos según el siguiente Aviso de Privacidad.

Le puede interesar

Summa de Giovanni Quessep: un homenaje al Premio René Char

Summa de Giovanni Quessep: un homenaje al Premio René Char

  En la presencia intensa y verdadera de la muerte, existe la presencia intensa y verdadera del amor [René  Char]. Paradójicam...

Ampliación de la frontera agrícola: el caso del Cesar

Ampliación de la frontera agrícola: el caso del Cesar

El docente Nelson Ramírez publicó en mayo de este año un valioso estudio sobre la evolución histórica del sector agrícola en el C...

Néstor Madrid Malo: otro olvidado por la crítica literaria en Colombia

Néstor Madrid Malo: otro olvidado por la crítica literaria en Colombia

  Cuando en 1982 Hermann Saunock publicó su olvidada “Lámpara de los Locos”, declaró a la prensa que el eje fundamental de su ...

El cuento del gallo capón, el cuento muy breve de García Márquez

El cuento del gallo capón, el cuento muy breve de García Márquez

  Los que querían dormir, no por cansancio sino por nostalgia de los sueños, recurrieron a toda clase de métodos agotadores. Se re...

Daniela

Daniela

Esta mañana encontré un cuaderno de apuntes que creía perdido. En la última página estaba escrito un número. Abajo decía Daniela...

Lo más leído

Síguenos

facebook twitter youtube

Enlaces recomendados