Literatura

Libro: La cumbia en Guamal

Luis Carlos Ramirez Lascarro

24/04/2023 - 00:03

 

Libro: La cumbia en Guamal

 

La Cumbia es una de las manifestaciones culturales patrimoniales más importantes del municipio de Guamal, Magdalena, cuya importancia radica en que el conjunto de prácticas que convergen en ella son, a la vez, tradicionales, contemporáneas y vivientes, ya que se han venido renovando en algunos aspectos a través del tiempo. Son integradoras, pues, además de que son los propios guamaleros quienes se organizan para la puesta en escena de las cumbias públicas y privadas, estas se convierten en el espacio democratizador por excelencia del municipio, en el cual no existen distingos de ninguna clase, lo cual les otorga un sentido cohesionador, representativo, colectivo y popular y las convierte en un espacio equitativo e inclusivo de encuentro y refuerzo de los vínculos entre los miembros de la comunidad, tanto en el pasado como en el presente.

Esta manifestación se remonta, en el municipio, de manera documentada, a finales del siglo XIX, lo cual se puede corroborar con las contribuciones hechas por algunos escritores guamaleros, tales como Antonio Brugés Carmona, quien habla de ella en algunas de sus notas de prensa en el diario capitalino El Tiempo; Gnecco Rangel Pava, quien describe la puesta en escena y los ritmos interpretados en las cumbias y cumbiambas de principios del siglo XX en su célebre libro Aires Guamalenses (1948); José Rumualdo Zambrano Cadena, quien en algunos apartes del libro Apuntes de mi tierra: Guamal de ayer y hoy (1997) incluye algunas anécdotas sobre bailadores y personajes pintorescos, además de nombrar por primera vez al conjunto Meza, el iniciador de la tradición cumbiera actual en el pueblo y Jhon Carlos Pedrozo Pupo, quien dedica un capítulo de su libro Melambo: tradiciones e historias de Guamal (2018) a delinear algunas características de su baile y a hacer un inventario somero de actores y ritmos tradicionales interpretados en ellas; sin embargo no existía hasta el momento un documento en el cual se recogiera la memoria colectiva en torno a esta manifestación, construyendo una línea de tiempo, un mapa de actores, un inventario de obras compuestas por guamaleros, ni la definición los elementos que diferencian la forma de vivirla, bailarla e interpretarla, incluso en relación a territorios tan cercanos como El Banco, lo cual es de suma importancia, para contribuir a garantizar su continuidad en el tiempo y la salvaguardia de su valiosa tradición.

Tuve la fortuna de que saliera favorecido en la segunda convocatoria de estímulos Macondo cultural de la Gobernación del Magdalena, el libro: La cumbia en Guamal, Magdalena, escrito en coautoría con mi hermano David Alejandro Ramírez Lascarro, contribuyendo al fortalecimiento del sentido de pertenencia de los guamaleros respecto a su propio municipio y esta manifestación cultural, permitiéndoles dar a conocer su tradición, la cual ha aportado significativamente, casi desde el anonimato, a la conservación de una de las formas más espontáneas, naturales y orgánicas de vivir la cumbia, casi de manera invariable, por más de un siglo, así como a la implementación del Plan Especial de Salvaguardia de la Cumbia tradicional del caribe colombiano (MinCultura, 2022), toda vez que se alinea con cuatro de sus seis líneas de acción, principalmente las líneas 2 y 3: Fomento a la investigación, documentación y producción de conocimiento sobre la Cumbia Tradicional y Músicas Tradicionales y Trasmisión del conocimiento, formación y educación; pero de manera indirecta o tangencial a la 4 y la 6: Fortalecer los espacios y las estrategias de encuentro, comunicación, divulgación y recreación de la Cumbia Tradicional y Articulación y gestión institucional para la implementación del Plan Especial de Salvaguardia, además de contribuir a la ampliación del acervo documental disponible para la implementación de la Cátedra de historia guamalera, constituida de obligatoria enseñanza en las instituciones educativas del municipio mediante el acuerdo 007 del 7 de septiembre del 2021 por el consejo municipal.

A manera de anticipo a la publicación de la obra, la cual verá la luz en pocos días, les compartiré el prólogo escrito para ella por el Magister en Antropología Social y Cultura de la Universidad de Ámsterdam, Andrés Forero Rueda, profesor nuestro en la Universidad del Magdalena y guía importante en el proceso de patrimonialización de la Cumbia.

El prólogo

El 12 de octubre de 2022, el Consejo Nacional de Patrimonio Cultural de Colombia recomendó al estado colombiano adoptar del Plan Especial de Salvaguardia – PES, de la Cumbia Tradicional del Caribe colombiano e incluir esta manifestación cultural en la Lista Representativa de Patrimonio Cultural Inmaterial del ámbito nacional. Esta decisión unánime del principal órgano asesor del gobierno colombiano en materia de gestión y política pública sobre el patrimonio cultural se tomó sobre la base de un proceso de construcción participativa de un consenso sobre la comprensión polisémica del concepto Cumbia, un diagnóstico de su estado actual en materia de transmisión y valoración colectiva y una propuesta de acción para garantizar la sostenibilidad de esta manifestación a futuro, por parte de múltiples actores asociados a la promoción y salvaguardia de las distintas expresiones culturales que se denominan como Cumbia en distintas partes del Caribe colombiano, pero principalmente del departamento del Magdalena. En el documento técnico soporte sobre la cual se basó el análisis y concepto del Consejo Nacional de Patrimonio Cultural, no hay un territorio que emerja de manera más vibrante que el municipio de Guamal, Magdalena, gracias a los aportes del investigador Luis Carlos Ramírez Lascarro, autor de esta obra que enhorabuena se publica para permitir que los actores de la Cumbia, los habitantes de la región Caribe, los colombianos y los interesados en la diversidad musical y cultural del mundo puedan aproximarse con una claridad admirable a las formas socioculturales de crear, revivir, experimentar, narrar y entonar la Cumbia en ese territorio del margen oriental del brazo de Mompox, del río Magdalena. Esta obra expande la inmersión realizada por Ramírez Lascarro en universo cultural de la Cumbia guamalense para sustentar la necesidad de generar un régimen especial de salvaguardia para la Cumbia como expresión fundamental de la riqueza y creatividad cultural sobre la cual se edifica la identidad cultural colombiana, ofreciendo una narración cautivante llena de personalidades vivas, desmitificaciones, nuevas perspectivas en debates sobre la Cumbia y el redescubrimiento de auténticas joyas de la cultura musical y el patrimonio cultural inmaterial de Colombia, algunas de ellas endémicas de Guamal.  Toda esta narrativa se edifica sobre los sólidos cimientos de un ejercicio profundo de observación, revisión de fuentes primarias y secundarias e inmersión etnográfica en el contexto de la Cumbia de Guamal, que seguramente permitirán que esta obra se posicione como referencia obligatoria en los estudios de musicología asociados a la Cumbia colombiana.

Uno de los principales puntos de interés de este trabajo se centra en la capacidad del autor de argumentar sólidamente cuales fueron algunas de las dinámicas históricas y sociales que llevaron a la configuración de una forma propia de comprender y vivir la Cumbia en Guamal. Asimismo, el autor desarrolla una deconstrucción decisiva de múltiples mitos, suposiciones y malentendidos sobre la Cumbia que por varios años han plagado el estudio de esta expresión cultural. En el hilo conductor del texto, el autor logra contextualizar el territorio de Guamal en medio de una historia más amplia en las que se imbrican relaciones políticas, sociales y económicas y fenómenos de carácter regional, haciendo que la obra resalte no sólo como una historia cultural de la Cumbia, sino la historia en si misma contada a través de la Cumbia. El texto concentra su análisis en argumentar en desarrollar los distintos significados que los guamaleros le otorgan a la Cumbia, como una práctica social, como un género musical específico que se interpreta en el espacio de la Cumbia (sin ser el más predominante en las Cumbias de Guamal) y como expresión dancística. La diversidad de fuentes explorada por el autor y su predilección por darle voz a los protagonistas mismos de la Cumbia de Guamal, conducen a descubrimientos sobre la creatividad colectiva del Guamal como territorio tejido a través de una densa red de significados y símbolos culturales. Quizás esta sea una de las claves para el lector al navegar el texto: la reconstrucción de historias de vida de quiénes construyeron el legado de la Cumbia en el Guamal, transformando la vida cultural para siempre de este municipio y, así, contribuyeron a que Colombia en el presente sea uno de los países musicalmente más diversos del planeta.

De igual forma, el texto explora nuevas formas de interactuar y explorar la Cumbia hombro a hombro con el lector. Al autor hace uso de los nuevos lenguajes y opciones que permite la revolución digital, elevándolo a un proyecto de carácter metatextual, en el cual el lector puede tomar la ruta de ahondar en las músicas, las danzas y las narrativas referenciadas a lo largo del texto. De este modo, esta obra se posiciona como un ejercicio profundo de documentación del patrimonio cultural inmaterial asociado a la Cumbia en Guamal, dado que organiza y contextualiza un archivo importante de consulta sobre esta manifestación de la identidad cultural del Caribe colombiano. Por ende, se invita a los lectores a hacer uso de todas las herramientas que el texto facilita para ir más allá del texto y poder sentir el contexto cultural de la Cumbia de Guamal y del Caribe colombiano más ampliamente.

El proceso de patrimonialización de la Cumbia tiene una correlación con la comercialización del propio concepto para referirse de forma genérica a unas músicas con ciertos aire Caribe, lo cual ha llevado al interés estatal en Colombia por reclamar dicho elemento como parte del acervo cultural del país. Sin embargo, para garantizar que futuras generaciones de colombianos puedan disfrutar del capital musical que se ha construido colectivamente y que se ha transmitido de generación en generación en el territorio nacional, es necesario un compromiso tanto público como desde la sociedad civil por salvaguardar la verdadera columna vertebral del patrimonio que llamamos Cumbia, que son sus diversas acepciones, construcciones y deconstrucciones que se dan a lo largo de la región. Este libro es un aporte importante en esa tarea, al dejar un testimonio fehaciente del esfuerzo colectivo guamalero por construir un tejido cultural único llamado Cumbia.

 

Luis Carlos Ramírez Lascarro

Sobre el autor

Luis Carlos Ramirez Lascarro

Luis Carlos Ramirez Lascarro

A tres tabacos

Guamal, Magdalena, Colombia, 1984. Historiador y Gestor patrimonial, egresado de la Universidad del Magdalena. Autor de los libros: La cumbia en Guamal, Magdalena, en coautoría con David Ramírez (2023); El acordeón de Juancho (2020) y Semana Santa de Guamal, Magdalena, una reseña histórica, en coautoría con Alberto Ávila Bagarozza (2020). Autor de las obras teatrales: Flores de María (2020), montada por el colectivo Maderos Teatro de Valledupar, y Cruselfa (2020), Monólogo coescrito con Luis Mario Jiménez, quien lo representa. Ha participado en las antologías poéticas: Poesía Social sin banderas (2005); Polen para fecundar manantiales (2008); Con otra voz y Poemas inolvidables (2011), Tocando el viento (2012) Antología Nacional de Relata (2013), Contagio poesía (2020) y Quemarlo todo (2021). He participado en las antologías narrativas: Elipsis internacional y Diez años no son tanto (2021). Ha participado en las siguientes revistas de divulgación: Hojalata y María mulata (2020); Heterotopías (2022) y Atarraya cultural (2023). He participado en todos los números de la revista La gota fría: No. 1 (2018), No. 2 (2020), No. 3 (2021), No. 4 (2022) y No. 5 (2023). Ha participado en los siguientes eventos culturales como conferencista invitado: Segundo Simposio literario estudiantil IED NARA (2023), con la ponencia: La literatura como reflejo de la identidad del caribe colombiano; VI Encuentro nacional de investigadores de la música vallenata (2017), con la ponencia: Julio Erazo Cuevas, el Juglar guamalero y Foro Vallenato clásico (2016), en el marco del 49 Festival de la Leyenda vallenata, con la ponencia: Zuletazos clásicos. Ha participado como corrector estilístico y ortotipográfico de los siguientes libros: El vallenato en Bogotá, su redención y popularidad (2021) y Poesía romántica en el canto vallenato: Rosendo Romero Ospino, el poeta del camino (2020), en el cual también participé como prologuista. El artículo El vallenato protesta fue citado en la tesis de maestría en musicología: El vallenato de “protesta”: La obra musical de Máximo Jiménez (2017); Los artículos: Poesía en la música vallenata y Salsa y vallenato fueron citados en el libro: Poesía romántica en el canto vallenato: Rosendo Romero Ospino, el poeta del camino (2020); El artículo La ciencia y el vallenato fue citado en la tesis de maestría en Literatura hispanoamericana y del caribe: Rafael Manjarrez: el vínculo entre la tradición y la modernidad (2021).

@luiskramirezl

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