Música y folclor

“La música nos persigue, ya no podemos escapar de ella”

Redacción

11/06/2013 - 11:40

 

Jorge Nieves OviedoLos avances tecnológicos han hecho que nuestra relación con la música cambie drásticamente. La emergencia de parlantes imponentes, Ipods y otros accesorios han hecho también que la música se transforme.

Así pues, en este entorno donde la tecnología mantiene una gran influencia sobre nuestros gustos y percepciones, la música Vallenata se ha visto también afectada de manera significativa.

La conferencia del profesor Jorge Nieves Oviedo en el Segundo Encuentro Nacional de Investigadores de la Música Vallenata en la Universidad Popular del Cesar nos ofreció algunos casos que deben ser motivo de reflexión para quienes estudian la evolución de las músicas de acordeón en Colombia.

Tras recorrer los primeros años de grabación, el profesor habló del impacto de la digitalización: un término que en este siglo XXI, con la aparición de Internet, las redes sociales y los accesorios portátiles, es de uso cotidiano.

Los archivos comprimidos como el MP3 y MP4 han moldeado la forma con la que escuchamos la música. Ahora la compartimos con mucha más rapidez, la almacenamos en lugares que no ocupan espacio y le damos un valor que difiere de los Long Plays (o vinilos de los años 70 y 80).

De la misma forma, es difícil de encontrar un sitio donde no suene la música. El dominio de la música es imparable. “La música nos persigue –expresa Jorge Nieves–. Ya no podemos escapara de ella, está en todas partes, en los teléfonos, en las salas de espera, en los carros”.

Obviamente, todas estas evoluciones de nuestros hábitos suponen alteraciones relevantes en nuestro modo de consumir la música. “La experiencia de escuchar música ya no surge –comenta el profesor–. Ya no hay que buscar la música. La música nos invade en todos los aspectos”.

Uno consume música sin conocer el apellido o el nombre del cantante, baila o comparte una canción sin saber de dónde viene y, cuando ya no está de moda, uno se olvida de ella con la misma facilidad con la que empezó a escucharla.

Esta omnipresencia de la música nos incita a ser menos exigente, a rebajar nuestras expectativas y a olvidar las ocasiones especiales en las que antaño se acudía a una serenata o una banda tradicional.

Con este contexto, la música vallenata lucha por mantener su esencia de música social y vivencial. La tarea no es fácil si consideramos que, además de esta tendencia social, los sellos discográficos se están fusionando y están imponiendo unos criterios musicales que van en el mismo sentido que el consumismo descrito anteriormente.

0 Comentarios


Escriba aquí su comentario Autorizo el tratamiento de mis datos según el siguiente Aviso de Privacidad.

Le puede interesar

Oscar De León: de sonero mayor a leyenda estelar de la Salsa

Oscar De León: de sonero mayor a leyenda estelar de la Salsa

  “El Sonero Mayor”, “El Bajo Danzante” (como lo bautizara un importante locutor venezolano llamado Phidias Danilo Escalona),...

Germán Villa Acosta, primer inscrito al 47 Festival Vallenato

Germán Villa Acosta, primer inscrito al 47 Festival Vallenato

Sonriente y sereno, el compositor y abogado bogotano Germán Villa Acosta acudió a las instalaciones del Parque de la Leyenda Vallenat...

Inicia en Valledupar el 5º Festival Internacional de Danza tradicional

Inicia en Valledupar el 5º Festival Internacional de Danza tradicional

Con la participación de 3 países empieza hoy en Valledupar el Quinto Festival Internacional de Danza Tradicional, organizado por la F...

“Todo lo que se toca en acordeón no es vallenato”

“Todo lo que se toca en acordeón no es vallenato”

Con la asistencia de Los Niños del Vallenato de la Escuela Rafael Escalona y sus respectivos padres, se realizó este fin de semana en...

Ya empezó el Carnaval de Valledupar

Ya empezó el Carnaval de Valledupar

El Carnaval –una de las fiestas más populares de Colombia y de Sudamérica– arrancó el pasado sábado 28 de enero en la ciudad de...

Lo más leído

Síguenos

facebook twitter youtube

Enlaces recomendados