Música y folclor
El ‘Vallenato entre rosas’ de una Princesa Guajira
El nombre de Zamia de la Rosa empezó a escucharse en el universo musical hace varios años entre el Cesar y La Guajira. En repetidas ocasiones se le vio -literalmente- “comiéndose” la tarima y conquistando al público de cada uno de los pueblos donde se presentaba. Pese a que en sus orígenes no se divisa una reconocida estirpe musical, la joven promesa del vallenato femenino ha acumulado méritos para que el mundo ponga los ojos sobre ella.
Entre Villanueva, su pueblo natal, y Urumita, al sur del departamento de La Guajira, vivió una infancia impregnada de música. Su padre, como buen barranquillero le inculcó el gusto por la salsa y el merengue, géneros musicales que admira y disfruta pero serían los cantos del Binomio de Oro, Fabián Corrales, Diomedes Díaz y Poncho Zuleta, los que se le instalarían en las venas y en el corazón y, posteriormente la incitarían a cultivar su voz para ubicarla entre las destacadas del folclor vallenato.
Aunque desde los once años está montada en una tarima participando en diversos festivales, durante los inicios de su adolescencia no imaginó dedicarse a la música profesionalmente, puesto que proviene de una familia en la que los estudios y una carrera universitaria deben primar ante cualquier otro gusto. A los 15 años, aún en el colegio, empiezan a ser más frecuentes sus presentaciones con caja, guacharaca y acordeón en eventos privados. Empieza a verse más marcada su vinculación con la música.
Toda vez que su padre se percata de la importancia de la música para su hija, la apoyó inscribiéndola en competencias de canto aunque a ella no le convencía la idea de someterse a los concursos, debido a que a los diez años de edad participó en una competencia organizada en su barrio y quedó en segundo lugar con ‘Sueños’, su primera composición musical. Si bien, obtuvo una destacada participación, hoy manifiesta que la inconformidad que sintió la llevó a no querer participar en concursos musicales.
Pero su pasión por la música no le permitió mantenerse en esa posición por mucho tiempo. Más adelante y con más cancha recorrida, se inscribe en el ‘Festival del cantante’, un concurso organizado en Riohacha para destacar los talentos guajiros en música. Es allí cuando su padre le aconseja presentarse con una canción de la desaparecida cantautora Patricia Teherán Romero. ‘Todo daría por ti’ es la canción que le da el segundo lugar en el concurso; por su capacidad vocal y por la conexión que logró con el público asistente esa noche supo que esa presentación marcaría un inicio real de lo que sería carrera y su propuesta artística. “Ver la reacción que tuvo la gente al escucharme cantar esa canción, me motivó mucho, la gente lloraba y se levantaban de sus sillas al escucharme cantar”.
De esa experiencia surge el homenaje musical que hizo a la diosa del vallenato, titulado ‘Terán Live’ presentado en el 2014 y que contenían las canciones ‘Tarde lo conocí’ (Omar Geles) y ‘Todo daría por ti’ (Jorge Celedón); temas que en 1994 se convertirían en corto tiempo en éxitos en Colombia y en el exterior en la voz de la cartagenera. Ambas canciones fueron incluidas en el álbum ‘Con aroma de mujer’ y que después de su fallecimiento pasarían a inmortalizarse en la historia del folclor vallenato.
Con este tributo, Zamia de la Rosa se da a conocer ante los medios de comunicación de la costa Caribe colombiana y marca una nueva etapa en su carrera, ya que llegó a catalogarse como uno de los mejores trabajos realizados en honor a Patricia Teherán desde su desaparición. Los resultados y la aceptación de ese primer ciclo exploratorio, le hizo reafirmar la confianza en su talento y representó la entrada oficial a un universo dominado por hombres y en el que la figura de la mujer no era concebido como protagónica.
En la extensa gira que inició en las emisoras de cada municipio de La Guajira, llega hasta Maicao, en la frontera con Venezuela. Ahí, en medio de una entrevista radial es bautizada como ‘La princesa guajira’. Su carisma, voz y talento, seguían haciendo su trabajo. A partir de ese momento, resuelve utilizar ese distintivo para coronarse ante la nueva camada de artistas femeninas que vienen forjando una impecable carrera en medio de un contexto naturalmente machista.
Al igual que ‘Las universitarias del vallenato’ en el año 1968, Patricia Teherán veinte años después y muchas otras mujeres que en diferentes épocas han querido abrirse espacio en la música vallenata, a la ‘Princesa guajira’ también le ha tocado enfrentar el muro de la resistencia de un sector que todavía no admite la importancia femenina en el canto y la interpretación de los instrumentos que dan vida a la música vallenata.
En noviembre del 2015, vuelve al ruedo con un sencillo de la autoría de Daimer Sierra titulado ‘La tarjeta roja’ que estuvo en los primeros lugares en las estaciones radiales del departamento de La Guajira. Un tema que habla de amonestar –de alguna manera- a un hombre que se porta mal con una mujer enamorada. A pesar del trabajo realizado, aún sentía que podía representar de mejor manera a la mujer en el ámbito de la música vallenata. Aunque perdido, ‘La princesa guajira’ es consciente del espacio que tiene la mujer en la música y la cultura del Magdalena Grande y considera que es el momento de recuperarlo y mantenerlo.
Ahora, con su ‘Vallenato entre rosas’ está decidida a seguir posicionándose como una de las figuras más representativas de la nueva generación de mujeres que han insistido en escribir su nombre en las páginas de la historia musical de la región. Ésta es una producción que contiene clásicos vallenatos tocados en guitarra en los cuales es acompañada o respaldada por las voces de doce artistas vallenatas de tres generaciones diferentes. “En esta producción quise compartir el talento femenino, quise compartir con aquellas artistas que vienen trabajando por resaltar el género vallenato desde hace mucho tiempo. Es un disco hecho con mucho cariño para los amantes de la buena música vallenata”.
En Villanueva Guajira, la plaza principal de su pueblo natal, será el lanzamiento oficial de ‘Vallenato entre rosas’, el próximo sábado este 21 de octubre. Ese día, Zamia demostrará una vez más, que a falta de dinastía musical le sobra talento y fuerza para seguir abriéndose camino e ir plasmando una huella imborrable en folclor vallenato.
Samny Sarabia
@SarabiaSamny
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