Música y folclor

Cuando la música clásica resplandece en una iglesia

Redacción

16/08/2012 - 11:00

 

Concierto en la Inmaculada Concepción (Valledupar)Nada de lo que sucedió el miércoles 15 de agosto por la noche en la iglesia Inmaculada Concepción de Valledupar puede explicarse sin el uso de superlativos. Y no se equivoquen, no fue nada que alterara el orden de este simbólico edificio del centro histórico.

Desde fuera, la discreción imperaba. Pocas eran las señales que dejaban entrever un evento inmediato salvo un par de personas aferradas a una lista de nombres y atentas a la llegada de fieles.

En el interior, el público se ordenaba poco a poco con el recato que exige el lugar. Los bancos de madera de las primeras filas eran los lugares más ansiados para observar la unión entre un piano a cola y un violín.

El concierto de música clásica organizado por la Fundación Pentagrama es una novedad. Algo tan insólito como natural. Al fin y al cabo, no hay mejor escenario para la música clásica que una iglesia y su acústica celestial.

Tras una leve espera, la presencia de los músicos se hace notar. Xavier Henríquez Ortiz: un joven violinista catalán de 16 años, miembro titular de la Joven Orquesta Nacional de Cataluña y formado en el Conservatorio Municipal de Música de Barcelona, aparece al lado del destacado pianista colombiano Diego Claros.

Ambos nutren esta pintura inusual con colores y contrastes. El violinista, joven y serio, se coloca ante su partitura con un gesto impaciente, mientras que el pianista sonriente se sienta frente al piano con un aire distendido.

Ambos empiezan a tejer una música melodiosa. Xavier apremia con su bastón  las cuerdas del violín y, de repente, le sucede Diego rozando las negras y blancas de su instrumento.

Los dúos y solos se suceden creando ambientes de profundo reposo y otros de clara agitación. Los músicos interpretan primero unas Danzas españolas (La Malagueña) de Pablo Sarasate y, luego, el concierto para violín número 22 de Henryk Wieniawski.

La sutileza de Felix Mendelssohn y su concierto para violín en Mi menor arrojan una luz nostálgica y sentimental al concierto antes de que se cierre la programación con el “Perpetuum mobile” de Ottokar Novacek.

Todas estas obras magistrales dan pie a breves descansos. Momentos en los que los músicos se refugian en un camerino y los ojos de los espectadores vuelven a contemplar el decorado de la iglesia. En este concierto, el patrimonio es también uno de los grandes protagonistas.

Finalmente, los músicos regresan a sus puestos. La ovación del público alzado los incita a tocar el tema que tenían reservado para este momento: Colombia, Tierra querida. El recital se convierte en una avalancha de sonrisas y tarareos.

El violín y el piano se han ganado definitivamente la estima de la atenta audiencia. Y la compañía de una iglesia.

0 Comentarios


Escriba aquí su comentario Autorizo el tratamiento de mis datos según el siguiente Aviso de Privacidad.

Le puede interesar

Las mentiras musicales que le echó Omar Geles a Diomedes Díaz

Las mentiras musicales que le echó Omar Geles a Diomedes Díaz

  El Rey Vallenato y célebre compositor, Omar Antonio Geles Suárez, ha tenido una vida llena de triunfos en su carrera musical, aun...

‘Nacho’ Urbina y la poesía resiliente

‘Nacho’ Urbina y la poesía resiliente

  Volver a leer las páginas que narran la historia de un amor que no pudo ser, de la esperanza rota por las dagas del desamor, del...

Nelson Velásquez desata la locura en Valledupar

Nelson Velásquez desata la locura en Valledupar

Sus músicas enamoran, alegran y también enloquecen. Nelson Velásquez llevaba tiempo sin pasar por la ciudad de Valledupar y, sin emb...

“Todo lo que se toca en acordeón no es vallenato”

“Todo lo que se toca en acordeón no es vallenato”

Con la asistencia de Los Niños del Vallenato de la Escuela Rafael Escalona y sus respectivos padres, se realizó este fin de semana en...

Las tamboras de Chimichagua ya no llevan candela viva

Las tamboras de Chimichagua ya no llevan candela viva

El domingo 14 de agosto de 1988 murió en Chimichagua, Cesar, el compositor Heriberto Pretel Medina y, como paradoja de la vida del sac...

Lo más leído

Síguenos

facebook twitter youtube

Enlaces recomendados