Música y folclor

Noches de piano en la Fundación Pentagrama

Redacción

23/02/2012 - 16:47

 

Noches de pianoCada jueves por la noche, a las 6 y media, la sede de la Fundación Pentagrama abre sus puertas al público. La esquina de la Plaza Alfonso López se convierte en un escenario para las inquietudes culturales y la escucha de músicos de la ciudad.

En el interior, unas sillas han sido colocadas con escrúpulo delante de un piano de cola negro y elegante que ocupa gran parte del escenario. En la entrada, la señora Elisa Castro de Dangond, una de las fundadoras de la organización, espera al pianista de esa noche: Pedro Perales. Teme que no venga porque ya es la hora del encuentro, y sin embargo, algo la tranquiliza: el día anterior, el joven músico vino a ensayar algunos temas y mostró su compromiso.

Pocos minutos después, llega el pianista. Los rostros se relajan. El joven, sonriente, hace su entrada con una corta presentación, se sienta ante el piano, agradece el público por su interés y anuncia un tema de Richard Clayderman.

A partir de entonces, las notas melancólicas acaparan la atención del público y el músico construye un universo lleno de emociones. La música clásica tiene ese poder de trasladar a otros lugares, otras épocas, y llegar a un estado insospechado de relajación y serenidad.

Pedro Perales interpreta –bajo pedido de la audiencia– el tema “Balada para Adelina” de Richard Clayderman. La melodía romántica enamora al público que, nada más terminar, pide que se repita una vez más la canción.

Luego, el joven pianista interpreta “Para Elisa” de Ludwig Van Beethoven y “Sonata en Do mayor” de Wolfgang Amadeus Mozart. Dos genios inmortales de la música clásica que no dejan indiferentes a nadie.

Los aplausos invaden la sala y muestro pianista anuncia la entrada de otros artistas locales: Oscar Cortes y David Martínez Barros. El primero interpreta dos de sus composiciones que invitan a recorrer el patrimonio natural de Colombia bajo un ritmo de blues-gospel. Una de ellas habla del río Guatapurí: ese río que tanta importancia tiene en la identidad de Valledupar. “El insumo de la cultura vallenata”.

A continuación David Martínez Barros entra en acción acompañado de una cantante de voz sedosa. El ambiente en la casa se abre a estilos musicales muy distintos, con sonidos innovadores y mezclas originales.

Las noches de la Fundación Pentagrama abren nuevos horizontes y ofrecen momentos de enriquecimiento que recomendamos a todos los lectores. La entrada es gratuita y el espectáculo varía cada semana con nuevos intérpretes.

0 Comentarios


Escriba aquí su comentario Autorizo el tratamiento de mis datos según el siguiente Aviso de Privacidad.

Le puede interesar

Clara Cabello sigue casada con el recuerdo de Rafael Orozco

Clara Cabello sigue casada con el recuerdo de Rafael Orozco

Hace 22 años que le segaron la vida al cantante Rafael José Orozco Maestre en Barranquilla. Fue exactamente el jueves 11 de junio de ...

El juglar Lorenzo Morales se fue de mañanita, como dice la canción

El juglar Lorenzo Morales se fue de mañanita, como dice la canción

  Tener de vecino a Lorenzo Miguel Morales Herrera, permitió conocerlo muy de cerca y entablar diálogos constantes sobre su vida y ...

Camilo Namén todavía llora con Mi gran amigo

Camilo Namén todavía llora con Mi gran amigo

De niño, su primer juguete fue un totumo que presumía era un carrito, y ya jovencito vendía cuques con la tártara en la mano. Inclu...

Un desfile de piloneritas pasado por agua

Un desfile de piloneritas pasado por agua

Miércoles 25 de abril del 2012. El primer desfile del Festival Vallenato llega con ese rumor que acompaña los grandes eventos. Madres...

Historia del formato de gaitas y tambores: el ejemplo de San Jacinto

Historia del formato de gaitas y tambores: el ejemplo de San Jacinto

  El conocimiento musical migra de un lugar a otro, a través de por lo menos un músico que se desplaza y lleva consigo su conocimie...

Lo más leído

Síguenos

facebook twitter youtube

Enlaces recomendados