Ocio y sociedad
De policía a vendedor de cholados

Hielito picado servido en vasitos, hielito con sabor a vainilla, piña, coco, tamarindo, hielito con leche condensada, al hielito combinado de esta manera lo llaman cholado. Don Libardo Cúdriz tiene 67 años y desde hace 10 vende este refresco. “De haber sabido que este negocio daba pa´ vivir hubiera empezado desde joven”, confiesa.
“¿Quién no ha comido cholado?”, pregunta. “Niños, jóvenes y adultos lo consumen”. Y en la región Caribe el sol es un factor sumamente favorable para esto. “Entre más calor haga más cholado compran”, dice.
Durante nueve años fue agente de Policía, “me salí porque no me gustó, en este negocio no tengo problema”, comentó. “¿Se tiene mucho problema cuando se es policía?”, le pregunté. Sonrió y no me contestó. Supuse que vender cholado es ‘más refrescante’.
La piña se compra en la tienda, se hace trocitos, se le agrega esencia del mismo sabor, agua y azúcar, esta mezcla cubre el vaso con hielo y por él se cobra 500 pesitos. Esto me lo explica mientras una mujer se acerca con su niño de seis años y pide dos cholados, uno para ella y otro para su pequeño.
Si lo quieren con leche condensada, deberán pagar 700 o mil pesos dependiendo de la cantidad. “La compramos venezolana porque es más barata”, me cuenta.
Para vender estos cholados se necesita un molino especial para triturar hielo. “La máquina pica el hielo, cae en un bastidor y, luego, lo servimos según el sabor solicitado”.
“Por más importante que sea una reunión de trabajo, me levanto de la silla y con tono de voz serio digo ‘ya regreso, permítanme unos minutos’. Salgo de la empresa y me compro un cholado” –expresa el gerente de una importante empresa ubicada en los alrededores de la plaza Alfonso López de Valledupar–. No hay quién se resista a estos refrescos”.
En diferentes sectores de la capital del Cesar, es común encontrar vendedores de cholados, hay algunos más preparados con porciones de frutas y variedad de ingredientes. “Yo vendo cuando quiera y me voy cuando quiera”, explica Don libardo Cúdriz quien se gana entre 20 a 25 mil pesos diariamente. “Todos los días tengo plata y cuando tengo sed, adivine qué consumo”.
Siete hijos tiene este hombre, tres de ellos son varones y los tres también venden cholados.
Herlency Gutiérrez
@HerlencyG
0 Comentarios
Le puede interesar

Angie Castrillón Briasco: esperanza de las nuevas generaciones
Marzo es el mes de las mujeres, tiempo propicio para continuar afianzando la premisa de que todas las mujeres merecen trascender de...

Mejores casinos con Keno en Colombia
Originario de la antigua China, el juego de Keno ha viajado miles de años para llegar a los modernos casinos online de Colombia. A...

Eugenio Baena y Rafael Orozco: crónica de un reencuentro en el cielo
En la eternidad no hay prisa, pero hay encuentros que parecen ensayados desde siempre. Eugenio Baena cruzó la puerta de luz como q...

A pie por Valledupar
A pie: A pie andan los niños sin transporte escolar de los corregimientos de Valledupar. A pie porque la administración municipal n...

La Guajira, una oda a la esperanza
“Que La Guajira se formó de una caricia del sol y del pincel milagroso del Divino”, cantaba el trovador Hernando Marín, qui...