Opinión
Un canto de esperanza
En un mundo donde cada nota musical puede contar una historia, la música tiene el poder de transformar vidas. Recientemente, con la entrega de guitarras a un grupo de niños con habilidades diferentes, no solo dimos instrumentos, sino también herramientas de expresión, creatividad y esperanza. Este proyecto nació del deseo de abrir nuevas puertas a aquellos que, a pesar de sus limitaciones, tienen un gran talento y una inmensa capacidad para emocionarnos con sus canciones.
Fue un viernes lleno de emoción y alegría. Ese día, como cada año, se llevó a cabo la entrega de guitarras donadas por la Promoción del 81, jornada de la mañana del Colegio Nacional Agustín Codazzi, de la cual tengo el honor de formar parte. En esta labor anual, colaboramos estrechamente con la academia de arte y guitarra de Carlos Castillo, buscando abrir nuevas posibilidades para niños con discapacidad en nuestra comunidad.
Para esta ocasión, recogí a mis amigos Mario Puerta y Diomar Cañizares, miembros del equipo de trabajo de Cantos, Cuentos y Leyendas, ambos residentes en Valledupar. Juntos nos dirigimos al municipio de Codazzi, Cesar, para hacer la entrega en un evento que forma parte de la campaña "Inicios" y que han llamado "Guitarras al Parque".
Al llegar al parque La Frontera, donde se realizó el acto, nos recibió el maestro e instructor Carlos Castillo y la coordinadora Belkys Fuentes. Fue realmente maravillosa esta experiencia, pues era la primera vez en mi vida que asistía a una presentación de esta envergadura.
Cuando comenzó la presentación, detrás de nosotros estaba sentado un adolescente que sostenía una guitarra abrazada contra su cuerpo. Intenté saludarlo, pero mi saludo no tuvo eco; él mantenía la mirada fija, perdida hacia la serranía del Perijá. La profesora, que se percató de la situación, se acercó disimuladamente y susurró: "Ese joven es uno de nuestros alumnos; tiene diagnóstico de trastorno del espectro autista (TEA) y es un caso de autismo severo. Cuando llegó a la Fundación La Divina Pastora, presentaba cuadros de aislamiento, pero comenzó el programa 'Atrapa Sueños,' en el que la fundación facilita transporte puerta a puerta, con cuatro horas de capacitación, merienda y almuerzo incluidos. Contamos con profesionales en psicología, nutrición, trabajo social, pedagogía, terapia ocupacional, así como instructores de música, danza, teatro y pintura, quienes se encargan de fortalecer sus habilidades."
En una tarima con sonido amplificado, comenzó la presentación con un trío infantil de guitarras de la Academia Carlos Castillo, dirigida por el propio Carlos, quien es uno de los formadores de estos niños y jóvenes. Luego, tres niños con discapacidad participaron y ¡vaya! Qué bien lo hicieron. Continuaron alternando, y me di cuenta de que este ejercicio les daba seguridad en su participación, ya que formaban parte del espectáculo “Guitarra al Parque”.
Sentía una gran intriga por el joven que estaba detrás de mí. Me preguntaba si, con ese hermetismo que lo rodeaba, se atrevería a salir a dar su presentación. Y, para mi sorpresa, me dejó sin palabras: cuando la presentadora lo llamó, salió de prisa, subió a la tarima y, con gran maestría, interpretó la guitarra. La felicidad invadió mi ser, y no pude contener las lágrimas al presenciar tan espectacular acontecimiento. El parque estaba lleno de espectadores, familiares y vecinos del barrio, y todos lo aplaudimos con entusiasmo.
En ese momento, la coordinadora del evento, Belkys Fuentes, me contó que, cuando llegaron las primeras guitarras prestadas a la fundación, él mostró interés en tocar, y desde entonces han trabajado su autismo severo a través de la música. Esto me hizo reflexionar: los limitados somos nosotros, y estas iniciativas necesitan el apoyo de muchas entidades y personas de buen corazón. Al final, entregamos las guitarras a tres alumnos con capacidades diferentes y una a la escuela de la fundación, sumando un total de cuatro guitarras.
El nombre de este joven adolescente es Jonathan, y pertenece al programa de Iniciativas estipulado para niños, niñas y adolescentes en la modalidad Atrapasueños 2024 de la Fundación Divina Pastora. Este programa promueve la implementación de acciones que contribuyen al reconocimiento de los talentos, aptitudes, habilidades y capacidades de los participantes, así como a garantizar sus derechos. Se enfoca en eliminar las barreras que afectan su inclusión y participación, fortaleciendo sus habilidades, destrezas y vocaciones.
Trabajan de manera articulada con instituciones educativas, culturales, juntas de acción comunal y la comunidad en general, promoviendo el buen uso del tiempo libre. Cuentan con 70 alumnos en condiciones de discapacidad intelectual, cognitiva y múltiple, de los cuales 20 han sido diagnosticados con autismo (TEA). Estos eventos, denominados “Guitarras al Parque”, se están llevando a cabo en diferentes parques de los barrios de Codazzi, entre ellos La Frontera, El Instituto, San José, Alfonso Ávila Quintero y El Socorro.
Las instituciones educativas con las que trabajan de forma articulada son el Colegio Montessori, Francisco de Paula Santander, Academia Carlos Castillo “Arte y Folclor”, la Secretaría de Gobierno y la Oficina de Gestión Social Municipal. Además, cuentan con un convenio con el I.C.B.F. para la atención integral de todos los alumnos. Este año, el proyecto incluyó la participación de exalumnos del Colegio Nacional Agustín Codazzi, promoción de la jornada de la mañana de 1981, así como de Cantos, Cuentos y Leyendas.
Regresamos a Valledupar alrededor de las diez de la noche, con la imagen de Jonathan en nuestras mentes y la enseñanza de que la discapacidad no es una limitante para salir adelante; los límites están en nosotros…en nuestras propias mentes. También regresamos con el compromiso de volver y seguir ayudándolos. Son muchas las guitarras que se necesitan, tanto para los alumnos como para la escuela. Quienes deseen unirse a la campaña "Dona una Guitarra" pueden contactar a la promoción '81 del Colegio Nacional Agustín Codazzi o a Cantos, Cuentos y Leyendas en Valledupar, así como a la Fundación Divina Pastora o la Academia Arte y Folclor de Carlos Castillo en Codazzi.
Es posible transformar vidas y brindar oportunidades a aquellos que más lo necesitan. Jonathan y sus compañeros son un ejemplo de resiliencia y superación, recordándonos que las barreras solo existen en la mente.
Luis Carlos Guerra Ávila
Sobre el autor
Luis Carlos Guerra Ávila
Magiriaimo Literario
Luis Carlos "El tachi" Guerra Avila nació en Codazzi, Cesar, un 09-04-62. Escritor, compositor y poeta. Entre sus obras tiene dos producciones musicales: "Auténtico", comercial, y "Misa vallenata", cristiana. Un poemario: "Nadie sabe que soy poeta". Varios ensayos y crónicas: "Origen de la música de acordeón”, “El ultimo juglar”, y análisis literarios de Juancho Polo Valencia, Doña Petra, Hijo de José Camilo, Hígado encebollado, entre otros. Actualmente se dedica a defender el río Magiriamo en Codazzi, como presidente de la Fundación Somos Codazzi y reside en Valledupar (Cesar).
2 Comentarios
Excelente iniciativa, digna de apoyar
Hermosa labor Tachi, tus esfuerzos tendrán frutos, unos los veras, y otros lo verán tus descendientes
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