Opinión

Michín dijo a su mamá…

Rodolfo Quintero Romero

20/02/2013 - 11:20

 

El gato bandido (Rafael Pombo)Cuando la violencia parece incontrolable en Valledupar y el Cesar, y la policía se ve desbordada por la delincuencia, no sorprende que surjan voces desesperadas llamando a coger las armas y a ejercer el derecho a la autodefensa.

Craso error al que hay que salirle al paso, con rapidez y contundencia, dado los terribles antecedentes de similares llamados en nuestro pasado reciente cuyas nefastas consecuencias no son ajenas a la actual ola de violencia.

Antes de tomar las armas, deberíamos recordar que no hay mayor violencia que la exclusión social a la que están condenados muchos de nuestros jóvenes por culpa de la pobreza y la desigualdad, que no se derrota con plomo sino con oportunidades de estudio y trabajo.

Para superar la anarquía social, la ley del más fuerte y dirimir los conflictos sociales, los humanos nos inventamos el Estado, cuya característica principal es el monopolio absoluto de la violencia.

La policía y el ejército son las instituciones coercitivas autorizadas para garantizar el orden y el cumplimiento de las normas en la sociedad, restringidas por la constitución y el respeto a los derechos humanos. Si no nos protegen, debemos exigirles que lo hagan, pero nunca suplantarlas.

La violencia que sufrimos tiene diferentes orígenes: hay bandas criminales, pero también delincuentes juveniles, aficionados, producto de la falta de oportunidades, empleo, educación o víctimas de la drogadicción.

Para eliminarla no hay soluciones milagrosas o inmediatas, ni siquiera colocando un policía en cada esquina. ¿Qué esperamos, acaso, que hagan los jóvenes desempleados, con hambre y sin futuro, obnubilados por una sociedad consumista a la que no pueden entrar?

Por supuesto que la policía tiene que combatir la delincuencia, pero debe hacerlo con una estrategia diferenciada e integral. No basta con la represión. Hay que ir a las causas de la violencia. Y entender que es un asunto que nos atañe a todos.

Las autoridades civiles deben hacer realidad los derechos ciudadanos al trabajo, la salud, educación, ambiente sano, vivienda y recreación. Sobre todo controlar la corrupción que impide que los dineros públicos lleguen a los pobres.

Los empresarios, cumplir con la legislación laboral y generan empleos estables. En vez de comprar armas, paguen, por lo menos, el salario mínimo a sus trabajadores y los impuestos que adeudan.

Necesitamos cultura ciudadana: respetar las normas, más tolerancia, repudiar a los corruptos, descartar los métodos violentos para resolver los conflictos, colaborar con las autoridades y acabar con el culto a la ilegalidad que tanto daño nos hace.

El alcalde debe prohibir ya el porte de armas. Medida que una minoría rechazará y que no acabará con la delincuencia pero ayudará a reducir los homicidios, como ha sucedido en otras ciudades.

Gobernación y Alcaldía pueden, con la construcción de obras civiles, embellecimiento de barrios y organización de eventos, generar empleo para la juventud y promover actividades culturales y deportivas para el manejo del tiempo libre.

La Justicia podría ser más rigurosa en sus fallos para que sepan los violentos que no hay impunidad y que no es rentable delinquir. A los bandidos no les puede ir bien porque sus imitadores serían incontables.

No deja de ser paradójico que nos irrite más el que se roba un celular, una cartera, que el que asalta el tesoro público. A este último lo condecoramos y elegimos.

Mil cosas más pueden hacerse, menos salir armados,  a lo Michín, con daga y pistolas, a correr la misma suerte del gato bandido.

Rodolfo Quintero Romero

@rodoquinteromer

Sobre el autor

Rodolfo Quintero Romero

Rodolfo Quintero Romero

Causa común

Rodolfo Quintero Romero. Agrónomo. Máster en Economía, especialista en Derecho del Medio Ambiente y Profesor Universitario. Su columna nos invita a conectar con la actualidad cesarense y entender los retos a enfrentar para lograr un crecimiento sostenible y duradero en el departamento.

@Rodoquinteromer

0 Comentarios


Escriba aquí su comentario Autorizo el tratamiento de mis datos según el siguiente Aviso de Privacidad.

Le puede interesar

Un nuevo día clarea

Un nuevo día clarea

  Colombia está cambiando. Las relaciones políticas tradicionales se desdibujan, unas por anacrónicas, otras por abusivas en el us...

El portal de María de Cardona en Mariangola

El portal de María de Cardona en Mariangola

En el corregimiento de Mariangola, cuatro mujeres hacen historia  en el ámbito comercial. A comienzo de 1940,  llega de Valledupar J...

Editorial: ¿Qué significa trabajar por  la cultura?

Editorial: ¿Qué significa trabajar por la cultura?

Todo el mundo habla de cultura: los políticos en campaña, los sacerdotes en las eucaristías, los escritores de cafés, los periodist...

Trazos de memoria con Chicho Ruiz

Trazos de memoria con Chicho Ruiz

¡Qué vaina! Compañero El encuentro no era aquí, era en Nabusimake. Así quedamos la última vez que nos vimos, hace veinte añ...

Servir es la mejor obra

Servir es la mejor obra

Fue una subida de nivel tremenda, con buena vibra y mensaje silencioso, pero efectivo, de orden, sobriedad y coherencia. RPT Noticias, ...

Lo más leído

La Cultura y el laberinto del poder

Omar Castillo | Pensamiento

Los Pacabuyes: ¿un pueblo Chimila o Malibú?

Luis Carlos Ramirez Lascarro | Pueblos

La magia de Escalona

Alberto Muñoz Peñaloza | Música y folclor

Vallenato clásico

Luis Carlos Ramirez Lascarro | Música y folclor

El Vallenato de Rafael Escalona

Darío Blanco Arboleda | Música y folclor

Armando Zabaleta: el fecundo compositor de “No voy a Patillal”

Eddie José Dániels García | Música y folclor

Síguenos

facebook twitter youtube

Enlaces recomendados