Opinión

Editorial: Reflexiones sobre un tributo a Chávez en Valledupar

Redacción

25/03/2013 - 12:05

 

Cinco esquinas (Valledupar)La muerte de Chávez lo ha cambiado todo. Es indudable. Ha roto unos equilibrios que se habían formado dentro de Venezuela pero también fuera.

No insistiremos en las cuestiones políticas, ni tampoco en la perspectiva geoestratégica –aunque, evidentemente, son fundamentales cuando se evoca el nombre de Chávez– pero trataremos más bien de resaltar el contexto social (ya que la política es el reflejo de un diálogo entre sectores sociales o de su ausencia).

En el caso de Valledupar, cabe destacar un hecho sorprendente que no ha pasado desapercibido. El homenaje al difunto presidente venezolano, Hugo Chávez, el miércoles 20 de marzo, en el centro de la ciudad, ha sido el motivo de encuentro para muchos trabajadores, sindicatos y seguidores del comandante en tierras colombianas.

Algo extraordinario para una región –y un país–  acostumbrados al choque verbal incesante entre Uribe y Chávez, entre las amenazas de conflicto o los altibajos de unas relaciones demasiado temperamentales.

En la ciudad de Valledupar no se había expresado nunca antes públicamente unas ideas pro-chavistas y no son pocos los que se sorprendieron con el tributo a Chávez. Muchas personas presentes supieron del acto en la calle, y muchas otras no terminaban de creerlo.

La respuesta no fue quizás tan masiva como lo esperaban sus organizadores. Y esto puede deberse a la ausencia de Piedad Córdoba –quien anunció una posible visita–, pero el ruido generado entorno a la manifestación fue tal vez lo más importante de una noche que tardó en iniciar.

Frente al escenario centenares de personas. Y a un lado de la tarima: una pancarta de tres metros en la que se daba las gracias a Chávez. Entre los presentes, algunas personas no se limitaron y acudieron vestidas de rojo, al mejor estilo de la revolución bolivariana.

Y ése fue uno de los aspectos más destacables: una parte de la población se atrevió a exponer sus ideas políticas bajo el lema democrático. Un manifestante llegó incluso a comentar que un acto como éste no se hubiera pensado jamás dos o tres años antes.

Entonces, ¿Cómo debe interpretarse esta manifestación? La respuesta no puede ser otra: como un acto democrático. Cada sector poblacional es libre de expresar sus ideas mientras sea con respeto y tolerancia.

Chávez ya habiendo desaparecido, algunos sectores han considerado oportuno la necesidad de afirmar sus ideas y, ojalá, sea esto también un mensaje para los grupos armados: que dejen a un lado su lucha y se integren democráticamente al diálogo.

0 Comentarios


Escriba aquí su comentario Autorizo el tratamiento de mis datos según el siguiente Aviso de Privacidad.

Le puede interesar

Las bondades de la vida y la amistad

Las bondades de la vida y la amistad

La vida es racimo de luz, y a veces de sombra de dolor; pero a pesar de todo es la vida, y la vida es bella. No te afanes en buscar d...

La realidad brasileña después de las protestas de 2013

La realidad brasileña después de las protestas de 2013

Existe hoy en día en Brasil un cuestionamiento acerca de la democracia brasileña, una especie de "crisis de la madurez" de la socieda...

Érase una vez un fabuloso país sin derechos humanos

Érase una vez un fabuloso país sin derechos humanos

Sucedió hace unos días. En aquel país-selva poblado por fantasmagóricos votantes y polarizado entre: timoratos y belicosos, que...

Editorial: ¿Qué significa trabajar por  la cultura?

Editorial: ¿Qué significa trabajar por la cultura?

Todo el mundo habla de cultura: los políticos en campaña, los sacerdotes en las eucaristías, los escritores de cafés, los periodist...

El Festival Samuel Martínez

El Festival Samuel Martínez

Estamos en pleno Festival de Canciones Samuel Martínez en la Loma de Calenturas, corregimiento del Municipio de El Paso, uno de los ev...

Lo más leído

Síguenos

facebook twitter youtube

Enlaces recomendados