Opinión

A prepararnos para el postconflicto

Rodolfo Quintero Romero

15/05/2013 - 12:30

 

Todo indica que tarde o temprano se firmará el acuerdo de paz que termine con el conflicto armado. Por eso, es necesario prepararnos para el postconflicto: la etapa siguiente a la desmovilización, dejación de armas y vinculación a la vida civil de los excombatientes. El Estado tiene que llegar rápidamente a los territorios abandonados por las fuerzas insurgentes, para evitar que nuevos agentes los copen y continúe la actividad delictiva.

En el Cesar, a lo largo de la serranía del Perijá y la Sierra Nevada, hay presencia guerrillera y una base social campesina que ha convivido con ella durante más de 30 años. Las condiciones de vida de esa población son deplorables como lo son las de la mayoría de los cesarenses: ocupamos los primeros puestos en carencias y desigualdad en Colombia.

Todo el departamento merece un plan de choque pero hay que priorizar las zonas marginadas en donde tienen su asiento los grupos armados. Construir buenas vías de acceso; erradicar el analfabetismo; hacer escuelas, puestos de salud y acueductos veredales; pozas sépticas; electrificación rural; prevenir las violencias contra la mujer; apoyar las zonas de reservas campesinas; fortalecer o crear más Umatas; facilitar crédito barato.

Se requiere desterrar la corrupción facilitando el control y seguimiento del sector privado y la ciudadanía a la inversión pública. Erradicar el clientelismo renunciando a contratar funcionarios mediocres para complacer a amigos y compadres.  Tenemos que hacerlo ya, con cese del conflicto armado o no. El premio será una vida más equitativa, próspera, pacífica y feliz para nuestros hijos.

La terminación de la guerra no asegura la desaparición de la violencia pero sí creará un marco favorable para enfrentar las causas sociales, económicas y culturales que la generan y reproducen. Debemos actuar pronto. Jalonar dinero de las regalías y pagar a tiempo los impuestos. No esperar noticias de la Habana para comenzar a trabajar.

A nuestro favor está el hecho insólito de tener un gobernador y un alcalde de Valledupar, decentes y dinámicos, que deben unirse, aliarse y liderar a los demás alcaldes para, con el sector privado y el apoyo de las comunidades movilizadas, preparar el territorio para la reconciliación y una paz estable y duradera, con una actividad económica creciente, inclusión social y sostenibilidad ambiental.

La guerra ya no será contra las FARC o el ELN sino contra la desigualdad, la discriminación, la debilidad institucional, la impunidad, el hambre, la pobreza, el atraso económico, la contaminación ambiental y la cultura de la ilegalidad.

 

Rodolfo Quintero Romero

@rodoquinteromer

Sobre el autor

Rodolfo Quintero Romero

Rodolfo Quintero Romero

Causa común

Rodolfo Quintero Romero. Agrónomo. Máster en Economía, especialista en Derecho del Medio Ambiente y Profesor Universitario. Su columna nos invita a conectar con la actualidad cesarense y entender los retos a enfrentar para lograr un crecimiento sostenible y duradero en el departamento.

@Rodoquinteromer

0 Comentarios


Escriba aquí su comentario Autorizo el tratamiento de mis datos según el siguiente Aviso de Privacidad.

Le puede interesar

El delfín tiene puesto fijo

El delfín tiene puesto fijo

“Difícil es entender el comportamiento de familias enteras en el desarrollo de esa prosaica carrera por disfrutar el poder”. De...

El racismo como ADN de la humanidad

El racismo como ADN de la humanidad

  Cada vez que sale a la luz un video de violencia policial estadounidense contra los afrodescendientes, la noticia se propaga como...

¿Quiere repetir el señor?

¿Quiere repetir el señor?

  El expresidente López  Michelsen hizo famosas muchas frases, entre ellas aquella que “nadie se queda en la mitad de un beso...

¿Quién descubrió a quién?

¿Quién descubrió a quién?

  En los anales de la historia encontramos la información sobre lo que algunos historiadores han llamado el “descubrimiento de A...

Acordeoneras pasan al tablero

Acordeoneras pasan al tablero

En columnas anteriores, y especialmente algunas próximas a la versión 51 del Festival de la Leyenda Vallenata, dije con toda claridad...

Lo más leído

Síguenos

facebook twitter youtube

Enlaces recomendados