Opinión

La música y Silvestre Dangond

José Atuesta Mindiola

19/06/2013 - 11:30

 

Silvestre Dangond La música es la acústica de los sentimientos; es la prolongación sonora de la poética del amor, la esperanza y de los sueños. La música es llovizna de arpegios en armonía y alimento para el espíritu.

Afirma Susan Langer (filosofa norteamericana): “La música es el más elevado mensaje del sentimiento; es el arte que convierte la técnica en un regalo al espíritu para contribuir a que los seres humanos, al admirar la belleza, sean progresivamente mejores”.

Para el músico y profesor español Pablo Casals: “La música es de gran utilidad para liberarnos de la tensión y la fatiga, y debería tener un lugar muy importante dentro del círculo familiar. La práctica del canto o de tocar un instrumento puede tener efectos muy positivos para favorecer la autorrealización, aumentar la autoestima, propiciar el conocimiento mutuo y la cohesión familiar”.

La música popular tiene como función básica el divertimiento, el goce estético que produce la belleza sonora y poética de la canción; pero además, de la novedad de la melodía, está el texto de los versos que comunica y nos amplía la conciencia y nos refina la sensibilidad. La base de la música es el compositor, el genio creador, pero la difusión se la da el intérprete. Desafortunadamente, los honores casi siempre se lo lleva el cantante, y el compositor termina en los surcos del olvido.

Los símbolos musicales son los instrumentos que identifican una determinada región. Cuando alguien habla de acordeón, caja y guacharaca, ya se anticipa el nombre de la región vallenata. Pero ahora, en el nuevo Cd de Silvestre Dangond, el artista de las multitudes, hemos observado con desconcierto que nuestro admirado cantante y su acordeonero, aparecen en múltiples imágenes publicitarias con uniformes exclusivos de las fuerzas militares y con armas de largo alcance.

Las armas son la retórica de la violencia. Diversas investigaciones de la sociología han determinado que el poder de las armas es el soporte universal de las dictaduras. Un hombre armado no se detiene en el diálogo, se siente poderoso y se apresura a la intimidación. El cantante Cesar López en su emblema de pacifista, construye la escopetarra, convierte una escopeta en una guitarra.

La carátula del Cd la Novena batalla de  Silvestre Dangond desentona con la música. Algunas personas objetivas, que no defienden lo indefendible, han comentado que el cantante  pudo posar vestido de militar sin arma en la mano y rodeado de niños con uniformes, y era un  gran homenaje a las fuerzas armadas, y no presentar esa imagen de un rambo guerrero.

Los asesores deben preocuparse por la imagen publicitaria de Silvestre, y sobre todo ahora que el Alcalde de Valledupar lo ha erigido como símbolo de la ciudad. Respetuosamente le recomendamos, que en sus presentaciones, además de mostrar su talento, debe dar ejemplo de civismo y decencia. Las vulgaridades siempre serán vulgaridades y envilecen el arte.

 

José Atuesta Mindiola


Sobre el autor

José Atuesta Mindiola

José Atuesta Mindiola

El tinajero

José Atuesta Mindiola (Mariangola, Cesar). Poeta y profesor de biología. Ganó en el año 2003 el Premio Nacional Casa de Poesía Silva y es autor de libros como “Dulce arena del musengue” (1991), “Estación de los cuerpos” (1996), “Décimas Vallenatas” (2006), “La décima es como el río” (2008) y “Sonetos Vallenatos” (2011).

Su columna “El Tinajero” aborda los capítulos más variados de la actualidad y la cultura del Cesar.

0 Comentarios


Escriba aquí su comentario Autorizo el tratamiento de mis datos según el siguiente Aviso de Privacidad.

Le puede interesar

Tamalameque: mirando el pasado con ojos de futuro

Tamalameque: mirando el pasado con ojos de futuro

  Vivir en un pueblo del Caribe colombiano lleno de leyendas, historias, costumbres y tradiciones, nutriéndonos día a día de su or...

Valledupar, ¿distrito especial para matar?

Valledupar, ¿distrito especial para matar?

Valledupar, ciudad famosa por el Vallenato y hoy con el auge de novelas inspiradas en sus personajes es el destino que muchos quieren t...

Editorial: Las escuelas musicales y la difusión del folclor

Editorial: Las escuelas musicales y la difusión del folclor

Este mes de octubre, el Ministerio de Cultura hacía un énfasis en el esfuerzo desplegado para sostener y desarrollar una red de esc...

50 años del departamento del Cesar (IV): La política en el nuevo departamento

50 años del departamento del Cesar (IV): La política en el nuevo departamento

  La cosa política siguió igual que cuando pertenecíamos al Magdalena, lo único que había cambiado eran los actores, o mejor l...

La eterna disputa entre Vallenatos y Sabaneros

La eterna disputa entre Vallenatos y Sabaneros

El Investigador cultural Samuel Muñoz Muñoz ha publicado apartes de una carta que le dirige mi gran amigo Julio Rojas Buendía, el mi...

Lo más leído

La historia detrás de la canción “La piragua” de José Barros

Alejandro Gutiérrez De Piñeres y Grimaldi | Música y folclor

La Muerte de Abel Antonio

Álvaro Rojano Osorio | Música y folclor

Los mejores comienzos de novela en español

José Luis Hernández | Literatura

Macondo: perfil de Gabo

Oscar Pantoja | Literatura

El discutido origen de la arepa

Redacción | Gastronomía

La Poesía de Gabriel García Márquez

José Luis Díaz Granados | Literatura

Síguenos

facebook twitter youtube

Enlaces recomendados