Opinión

Editorial: Las viviendas de doble filo

Redacción

13/01/2014 - 11:25

 

El presidente Santos inaugurando una vivienda gratis en Valledupar / Foto: El TiempoHasta las ciudades más desarrolladas del planeta experimentan problemas de integración en algunos de sus barrios periféricos.

Es el caso de París (Francia) que en el año 2005 conoció una oleada sin precedentes de disturbios con jóvenes que consideraban que no tenían futuro y que no se les brindaba oportunidades para su crecimiento e integración.

También se observa algo parecido en algunos barrios de la ciudad de Barcelona (España) donde, a pesar de ser considerada como una de las ciudades con mejor planeación de las últimas décadas, la policía no se atreve a entrar en ciertas zonas por temor a ser atacada.

En Manchester, una de las urbes más poderosas en términos económicos de Gran Bretaña, 2000 jóvenes encapuchados salieron a las calles en el año 2011 para expresar su descontento tras la muerte de un joven de 29 años abatido por la policía.

Todos estos hechos se produjeron en ciudades que cuentan con políticas avanzadas de integración social, y sin embargo, éstas no fueron suficientes para evitar el enfrentamiento con las autoridades. La desesperación y la sensación de abandono estallaron de la manera más violenta.

En Valledupar, se inauguran nuevas viviendas "gratis" a gran velocidad y esa noticia es motivo de satisfacción para muchas personas. La urbanización de Nando Marín –inaugurada este año– y la de Lorenzo Morales (a punto de serlo), son ejemplos de buen diseño y de comodidad, y responden a las necesidades inmediatas de poblaciones desplazadas o en situación precaria.

El presidente Juan Manuel Santos, que hizo a principios de año una buena operación publicitaria para probar la calidad de esas viviendas, no tuvo ninguna dificultad para dormir en una de ellas. Hay que reconocer que su construcción es impecable.

No obstante, la ubicación alejada de etas viviendas del centro de Valledupar, la falta de transportes y su incomunicación (muchos taxis no se atreven a atender esos destinos), los pocos servicios públicos, y sobre todo, la total ausencia de fuentes de trabajo en las proximidades, dejan entrever un rápido deterioro de estas nuevas instalaciones.

Es posible que, en pocos meses o años, estos barrios se conviertan en zonas rojas (o ghetos, como se suele decir en Estados Unidos) donde la delincuencia se instala peligrosamente por falta de presencia policial y de trabajos que garanticen un sustento a las familias.

Por eso, para que estas urbanizaciones con nombres legendarios no se conviertan dentro de 3 o 5 años en polvorines que desfiguren a la ciudad de Valledupar, se ha de pensar seriamente en comunicarlas, atraer fuentes de trabajo e imponer la autoridad del Estado. Es imprescindible crear una sensación de proximidad y un clima de escucha. El acompañamiento de psicólogos es beneficioso a corto plazo, pero no reemplaza la inversión económica.

La estabilidad de Valledupar depende de todos estos esfuerzos.

0 Comentarios


Escriba aquí su comentario Autorizo el tratamiento de mis datos según el siguiente Aviso de Privacidad.

Le puede interesar

Final, final, no va más

Final, final, no va más

  Los colombianos, por lo menos una gran cantidad, queríamos una Colombia en paz, pero el número de colombianos que creíamos que...

Los derechos, mejores condiciones y estabilidad laboral deben ser garantizados por el Estado

Los derechos, mejores condiciones y estabilidad laboral deben ser garantizados por el Estado

  El presidente Gustavo Petro, en el 2022 'Foro Iberoamericano: retos de la formalizaron laboral' sostuvo lo siguiente: “En...

Elecciones territoriales: el Cesar, una mirada en prospectiva

Elecciones territoriales: el Cesar, una mirada en prospectiva

  A casi un año de que los territorios decidan su suerte respecto a quienes regirán sus destinos por los siguientes cuatro años, y...

Mis gatos Rojo y Azul

Mis gatos Rojo y Azul

  Yo tengo un par de gatos que viven dentro de mí, en aposentos blancos como el papel. Ellos rasgan mi cuerpo para que yo no olvide ...

Despedimos a otro grande: Miguel López

Despedimos a otro grande: Miguel López

  No fue otro acordeonero más el que despedimos esta semana, fue Miguel Antonio López Gutiérrez, el V Rey de la Leyenda Vallenata....

Lo más leído

El árbol de Navidad y la evolución de un culto milenario

Berta Lucía Estrada | Otras expresiones

Débora Arango, la huella de una gran artista colombiana

Marta Elena Bravo de Hermelin | Artes plásticas

El origen del pesebre

Redacción | Ocio y sociedad

Luís Magín Díaz, una vida para componer

Redacción | Música y folclor

Andrés Landero, la celebridad que olvidamos

Ivis Martínez Pimienta   | Música y folclor

La estancia de Altos del Rosario

Álvaro Rojano Osorio | Pueblos

¡Gracias por esta bonita Combinación!

Nicolás Fernando Ceballos Galvis | Música y folclor

Síguenos

facebook twitter youtube

Enlaces recomendados