Opinión
¡Vivan todas las mujeres luchadoras!
Silvio Rodríguez describió en una célebre canción a las mujeres diferentes facetas de todas ellas; lo estremecieron un montón de mujeres de fuego y también de nieve. Vale recordar esta letra cuando conmemoramos el día internacional de la mujer recordando con respeto y brindándole la gloria eterna a todas las que como dice Silvio “La historia dejó entre laureles”.
Debemos recordar con ahínco el fatal episodio que dio origen a esta fecha, cuando en una muestra de resistencia de las obreras de la fábrica Triangle Shirtwaist de Nueva York, por obtener un trabajo digno, murieron quemadas dentro de las instalaciones de la fábrica en marzo de 1911 culpa del encierro en el que se encontraban.
Es valioso resaltar el valor de este día en la actualidad, cuando la lucha de las mujeres por sus justas reivindicaciones sigue más viva que nunca en Colombia y el mundo, cuando el modelo imperante sigue poniéndose sobre ellas negándoles derechos vitales, además de una paupérrima situación laboral que las golpea aún más que a los hombres. Sólo para evidenciarlo, en España las mujeres han sido gravemente afectadas por la crisis económica siendo principales víctimas de desahucios y desempleo, actualmente 40.304 son asistidas por la Cruz Roja en éste país.
En Colombia la historia no es distinta; Según el DANE, para finales de 2013, la tasa global de participación en la actividad económica para los hombres fue 75,7%, y para las mujeres fue 54,6%; mientras la tasa de ocupación fue de 71,2% y 48,5%, respectivamente. Sumado a ello que sigue la práctica de diferenciar el trabajo en “trabajo de mujeres” y “trabajo de hombres” lo que ha hecho que, por ejemplo, casi 3 millones de mujeres sean empleadas del sector de servicios sociales, comunales y personales (32% de las mujeres ocupadas) y que de 750.000 personas ocupadas en servicio doméstico, el 95% sean mujeres, siendo éste tipo de trabajos comúnmente mal remunerados y sin ningún tipo de seguridad social.
Y el panorama es preocupante, teniendo en cuenta que la política impuesta por el gobierno Santos obedece las “indicaciones” de organismos como la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico OCDE, la cual sugiere aumentar las edades de pensión e igualar la edad de retiro de hombres con la de las mujeres (que actualmente son 60 y 57, respectivamente), aumentar las semanas de cotización y liquidar la pensión con una mesada de menor al valor del salario mínimo. No siendo suficiente, el gobierno de Santos sigue fomentando la tercerización laboral que afecta a las mujeres en sectores como el comercial y salud, en donde predomina el trabajo femenino.
Es necesario señalar el ejemplo de las mujeres en la historia para luchar contra las injusticias que se agudizan y requieren la más grande resistencia, necesitamos muchas Violeta Parra, muchas Manuela Beltrán, muchas María Cano, muchas Rosa Luxemburgo, muchas Policarpa, entre otras tantas mujeres significativas. Necesitamos, como sigue el verso de Silvio, de aquellas “desconocidas gigantes, que no hay libro que las aguante” ni tampoco alcanzarán estos párrafos para mencionar sus luchas diarias.
Me permito terminar éste escrito homenajeando a María Concepción Loperena, la heroína precursora de la independencia de Valledupar, de la cual Jorge Tadeo Lozano resaltó su valor diciendo: “Si en las provincias se consiguiera un número regular de esos tipos perfectos de mujer, ¿Qué no haríamos en esta dura faena, que nos hemos impuesto?”
Extra: Y estremecerían al mundo muchas más luchadoras como mi madre, la Señora Noris, a la cual le debo todo.
Fabio Andrés Pinto
@IngFabioPin
Sobre el autor
Fabio Andrés Pinto
Visión alternativa
Nacido en Valledupar. Ingeniero electrónico. Magíster en Matemáticas Aplicadas. Docente universitario, investigador y consultor en temas tecnológicos. En este espacio se describe y se reflexiona sobre la situación del país a nivel tecnológico, académico y económico.
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