Opinión

El fan de la franqueza

Carlos Cesar Silva

25/09/2017 - 04:15

 

 

Estoy muy contento porque Enrique Meza fue designado como nuevo rector de la UPC. Sí, sí, más contento que Petro masturbándose mientras observa en RCN los resultados de la última encuesta presidencial, más contento que Uribe saludando al Papa en la 26, más contento que Jaime Arce llegando a la clínica Laura Daniela en su Ferrari, su Porsche o su Mustang. En fin, las palabras sinceras de Enrique me tienen brincando en un solo pie: “La casa Gnecco… son el Partido de la U…no me avergüenza… buscar el apoyo político”.

Parece que llegó a la rectoría de la UPC un hombre franco, muy franco. Estoy maravillado con su desparpajo: me ha llenado de mucha esperanza la manera como admitió haber buscado la bendición de santos para alcanzar el cielo. En serio, eso merece un aplauso apoteósico, aquí, en donde impera la hipocresía y el engaño, no cualquiera tiene la gallardía de llamarle al pan, pan y al vino, vino. De modo que me le quito el sombrero a Enrique. Claro, a ese Enrique valeroso como Forrest Gump y Sancho Panza, a ése que no le da vergüenza reconocer que los Monsalvo Gnecco, ahora extenderán sus ladridos de poder hasta la UPC, la entidad pública que tiene más recursos y cargos en el Departamento, después de la Gobernación y la alcaldía de Valledupar, en donde ellos tienen voz de mando hace rato.

Al fin apareció un político, sí, un político que habla sin pelos en la lengua. No me cabe duda que Enrique administrará de frente. Ahí vienen, ya empiezo a ver sus contratos diáfanos, sin reuniones a puerta cerrada y sin cadenas de favores. Él, que posee el don de la veracidad, se siente legitimado para actuar: “Mi designación fue con tres votos de los estamentos universitarios y tres institucionales, ese equilibrio me dará gobernabilidad”. Enhorabuena, Jesús Ferro Bayona y Fernando Hinestrosa Forero, le quedarán chiquitos a Enrique, chiquiticos.

Por supuesto, ahora vislumbro a los aliados políticos de Enrique, ayudándolo en su difícil tarea. Alcanzo a ver en sus caras que no persiguen un interés particular, que están muy preocupados por los problemas de la UPC: malos servicios médicos, cafeterías internas vendiendo productos a precios exagerados, muchas demandas por despido injustificado, bibliotecas sin los libros suficientes, falta de una residencia estudiantil subsidiada, egresados sin un programa de educación continuada, pocos recursos para inversión, matriculas cada vez más costosas, pobre nivel académico y nombramientos de profesores bajo el manto de la complacencia política.

Sé que no es justo dudar de Enrique y de sus socios, pero con el objetivo de conseguir que la franqueza que anda en el ambiente sea todavía más pura, quiero hacerle varias pregunticas al nuevo rector: ¿Qué va darle a sus aliados por haberlo ayudado a cumplir su viejo sueño de asumir las riendas de la UPC?, ¿Va dejar que la universidad se termine de consolidar como un trofeo político?, ¿Está dispuesto a convertirse en un títere?, ¿Quién es usted, Aquiles o la tortuga?, ¿Ha visto las pelis de Mr. Been? Por favor, Enrique, no deje a un lado la espontaneidad, respóndale a este fan suyo. 

 

Carlos César Silva

@ccsilva86

Sobre el autor

Carlos Cesar Silva

Carlos Cesar Silva

La curva

Carlos César Silva. Valledupar (Cesar) 22 de noviembre de 1986. Abogado de la Universidad Popular del Cesar, especialista y magister en Derecho Público de la Universidad del Norte. En el 2013 publicó en la web el libro de artículos Cine sin crispetas. Cuentos suyos han sido publicados en las revistas Puesto de Combate y Panorama Cultural. Miembro fundador del grupo artístico Jauría. Cocreador del bar cultural Tlön.

@ccsilva86

0 Comentarios


Escriba aquí su comentario Autorizo el tratamiento de mis datos según el siguiente Aviso de Privacidad.

Le puede interesar

25 de noviembre: un llamado al compromiso contra la violencia de género

25 de noviembre: un llamado al compromiso contra la violencia de género

  “Trabajar por un mundo donde seamos socialmente iguales,  humanamente diferentes y totalmente libres" Rosa Luxemburgo Desd...

Editorial: La Paz, una cuestión de voluntad

Editorial: La Paz, una cuestión de voluntad

La Primera Escuela Vallenata para la formación de gestores de Paz nos brindó el fin de semana del 22 de agosto una de las imágenes...

Honoris causa in corruzione

Honoris causa in corruzione

“Hay dos tipos de educación, la que te enseña a ganarte la vida y la que te enseña a vivir”, A. de Mello Nada más indicador ...

“Ni una mujer menos, ni una muerta más” (2)

“Ni una mujer menos, ni una muerta más” (2)

No es culpa del reguetón.  Cuando era adolescente escuchaba que decían que el culpable de tanta depravación en la juventud  era...

Infraestructura víctima de la violencia y la corrupción

Infraestructura víctima de la violencia y la corrupción

  El conflicto social y armado que sufre Colombia podría considerarse que es un subproducto de la corrupción, de ella se agarran to...

Lo más leído

Síguenos

facebook twitter youtube

Enlaces recomendados