Opinión

La Valledupar con la que sueño

Camilo Pinto Morón

17/12/2019 - 05:00

 

La Valledupar con la que sueño
Vista aérea de Valledupar / Foto: archivo PanoramaCultural.com.co

Quizás, a diferencia de muchos, la Valledupar con la que sueño, por lo menos a corto y mediano plazo, no la dibujo con accesorios lujosos producidos por la “modernidad” que en repetidas ocasiones ofusca el entendimiento y la capacidad de razonar, que enceguece.

El territorio que anhelo, el cual bajo mi consideración podría construirse en un lapso de 12 años (tres periodos constitucionales), se ciñe al derrotero de gozar de unos buenos niveles de progreso social y crecimiento económico, los cuales en un inicio no tienen que ser los más extraordinarios debido a la complejidad que implican estos procesos. Tal vez en mis opiniones he sido reiterativo con el concepto de #ConstrucciónDeCiudad, incluso, y posiblemente sea así, hasta el punto de que se vuelva tedioso, sin embargo, y lo digo con toda la convicción, siempre habrá razones y valdrá la pena insistir en lo que es necesario.

En esta columna no ahondaré en los puntos negros (indicadores socioeconómicos) que hoy manchan el desempeño de nuestro municipio, expresaré cómo lo proyecto desde los dos ejes que lo componen: la Valledupar rural y la Valledupar urbana, partiendo de la periferia, infinidades de veces olvidada, hacia el dificultoso centro.

Valledupar rural: a través del gasto social prioritario a los habitantes de estas zonas del municipio se les puede garantizar sus derechos económicos, sociales y culturales con mayor demanda: salud, educación, agua potable y saneamiento básico. La conectividad y la productividad también deben estar en la agenda, el acceso a buenos servicios de internet, comunicación y transporte para estar conectados con el centro del municipio y las nuevas formas de educación y negocio. En cuanto a la productividad es hora que retomemos nuestra vocación agrícola y se fortalezca organizadamente la ‘nueva ola’ de los emprendimientos alternativos.

La zona corregimental de Valledupar necesita una sola cosa y aún no la tiene, al menos en un grado considerable: calidad de vida, que le sean garantizados los ingredientes esenciales que encierran su diario vivir, no hay que inventar, está claro.

Valledupar urbana: debemos definir una hoja de ruta clara y sensata de hacia dónde queremos impulsar el municipio. Primordial: consolidar un buen y verdadero sistema de transporte público, la transversalidad de este componente se encuentra sujeta al principio de integralidad y, por ende, afecta una multiplicidad de temas como comercio, educación, inclusión, sostenibilidad, competitividad y legalidad. La seguridad en Valledupar pasó de ser cuestión de simples “robos de ollas” a la estructuración de bandas criminales que actúan a tenebrosas escalas, la respuesta debe ser el fortalecimiento de la inteligencia, e insisto, en el trazado de una política con un fuertes matices preventivos y proactivos que sea sostenible en el tiempo. La economía del municipio no anda nada bien. Es hora que llegue el empresarismo, la industrialización, para lo que es necesario, además de lo anteriormente señalado, que se gesten vigorosas y auténticas alianzas público – privadas, debe existir dialogo permanente y actuante entre los sectores públicos, privados y la academia.

Hoy debemos fijarnos en casos exitosos de construcción de ciudad como el de Barranquilla y Medellín, y en uno que aún se encuentra en proceso y que va bien como es el de Montería. No para hacer lo mismo que han hecho allá, materialmente hablando, parafraseando al exalcalde monteriano Carlos Correa: “todas las ciudades son diferentes, por muy cerca que estén no son iguales, cada una tiene su ADN especial”, lo que sí podemos emular es la planeación sensata que se ha hecho a corto, mediano y largo plazo, en sentido contrario a los virajes caprichosos de la actividad administrativa a los que en muchas ocasiones no han tenido acostumbrados nuestros dirigentes de turno cada vez que hay cambios de gobierno; hoy Barranquilla y Medellín son territorios que están obteniendo resultados exitosos porque su dirigencia con visión futurista entendió que había que construir ciudad con atención prioritaria a los temas urbanos y rurales de carácter básico, así es como en nuestras regiones se comienzan a hablar de verdaderas transformaciones.

No me cabe la menor duda que Valledupar tiene las riquezas en materia prima y en capital humano para convertirse en una verdadera ciudad. Nuestro potencial humano, agroindustrial, cultural, turístico y ecológico está allí, esperando que nos tomemos la planeación, la construcción de ciudad en serio, para lo cual se requiere de la imprescindible voluntad política de nuestra dirigencia, de la colaboración del sector privado en conjunto con la academia y la participación de la ciudadanía.

Por estos días nos toca lidiar con guarismos para nada alentadores. Desempleo (trimestre móvil Agosto – Octubre): 15,5% la segunda ciudad con la mayor tasa del país. Índice de competitividad: 4,27 (posición 19 de 23 ciudades). Desempleo juvenil: 26,5% (primer puesto a nivel nacional). Pobreza monetaria: 34,4% (cuarto puesto a nivel nacional). Cumplimiento del Plan de Desarrollo Municipal (2016 – 2019): 49,07% (Sistema de Información para la Evaluación de la Eficacia – DNP).

Hay mucho por hacer, las tareas están sobre la mesa y me resisto a creer que nos vayan a quedar grandes. Esta es mi opinión, esta es la Valledupar con la que sueño.

Adenda: A mis lectores les deseo una feliz navidad. Mi columna estará de vuelta estará de vuelta en el mes de enero del próximo año. Siempre un gusto. ¡Abrazos!

 

Camilo Pinto Morón

@camilopintom

Sobre el autor

Camilo Pinto Morón

Camilo Pinto Morón

Letras & Opinión

Camilo A. Pinto Morón, estudiante de Derecho de la Universidad de Santander, estudio leyes porque "pertenece a ese orden de cosas que se comprenden mejor cuando no se definen" - Levy Ullmann. Columnista de opinión en PanoramaCultural.com.co, el diario El Pilón, y Con la Oreja Roja. Fiel creyente de un oficio de opinar en serio, respetuoso, objetivo y responsable.

@camilopintom

1 Comentarios


Jana Guerra 17-12-2019 08:10 AM

Excelente ser humano y un gran profesional preocupado por su comunidad Dios te bendiga Camilo y te permita ver realizado tu sueño un abrazo.

Escriba aquí su comentario Autorizo el tratamiento de mis datos según el siguiente Aviso de Privacidad.

Le puede interesar

Muerte Verde

Muerte Verde

  Lloran madres del caudal a sus hijos del gobierno, sus bocas abiertas, ojos abiertos, hijos de un pueblo, ¡Caín! ¡Abel! Muerte v...

El Festival Vallenato nos espera

El Festival Vallenato nos espera

  Estamos exactamente a un mes de la justa folclórica y musical más importante de Colombia, el Festival de la Leyenda Vallenata, qu...

Una columna semanal

Una columna semanal

Opinar semanalmente sobre un tema de actualidad se ha convertido en una de mis rutinas, rutina ésta que encierra un grado de complej...

En defensa del punto G: Joaquin Guillen

En defensa del punto G: Joaquin Guillen

  Los griegos que inventaron nuestra manera occidental de pensar y hacer, dijeron que cuando el cielo está más oscuro, alguna est...

Rafael Orozco “El ídolo” es una ficción

Rafael Orozco “El ídolo” es una ficción

En el Municipio de Becerril, tierra donde naciera “El ídolo” Rafael Orozco, se viene gestando una  marcha de protesta para el pr...

Lo más leído

¿Cuál es la función del arte?

Gemma E. Ajenjo Rodríguez | Artes plásticas

El Bogotazo, 9 de abril de 1948: el relato de la muerte de Jorge Eliécer Gaitán en la prensa

Yeison Yamir Martínez Mejía y Peter Henry Ortiz Garzón | Historia

La política, el bogotazo y la muerte de la esperanza

Carlos Alberto Salinas Sastre | Historia

Aproximación a la definición del Arte

Eduardo Vásquez | Artes plásticas

Tres poemas de Luiz Mizar

Donaldo Mendoza | Literatura

Rosa jardinera

Álvaro Yaguna Nuñez | Música y folclor

Gitanos: érase una vez América

Ricardo Hernández | Pueblos

Síguenos

facebook twitter youtube

Enlaces recomendados