Opinión

Glorias de la sabana: Rodrigo Roy Rodríguez

Jorge Nain Ruiz

21/08/2020 - 05:00

 

Glorias de la sabana: Rodrigo Roy Rodríguez

 

La semana anterior escribí en este espacio sobre el cantautor sabanero Miguel Cabrera, hoy sigo por esa línea, ya que estoy convencido que, en esa hermosa región sabanera, lo que tenemos son músicos de gran nivel.

Mi homenajeado de hoy es un acordeonero, arreglista, productor musical y compositor, nacido en San Jacinto, Bolívar, Rodrigo Rafael Rodríguez Lora, hijo de José Cerveleón Rodríguez, un cantador de Zafra, quien murió cuando Rodrigo apenas tenía cinco añitos y Luisa Lora descendiente de músicos bolivarenses.

Se inició golpeando tambores de banco, haciendo y tocando guacharacas de latas de corozo y, a ratos, le sacaba melodías a una pequeña dulzaina que le regaló su padrino Rafael Lora, su mamá con mucho sacrificio le regaló un acordeoncito viejo de dos hileras, en el que se inició siendo aún un adolescente, pero viendo al viejo Toño Fernández con Adolfo Pacheco y Ramón Vargas en parrandas por el pueblo.

En el año 1975, Andrés Landero se lo llevó para Barranquilla y lo apadrinó para que grabara su primer LP cantando y tocando canciones de su autoría, como los viejos juglares; en 1976, grabó con Adolfo Pacheco un LP llamado ‘El San Jacintero’

‘Roy’, nombre artístico que le puso un productor en Medellín con el argumento de que Rodrigo Rodríguez era muy largo y parecía un trabalengua, desde muy joven aprendió el oficio de técnico de acordeones y, un buen día, lo invitó Gilberto Torres a que se fuera con él a Sincelejo y allá se quedó viviendo 17 años. Grabó al lado de buenos cantantes como Álvaro Carrasco, Miguel Cabrera y Jairo Gil, pero en 1981 lo invitó Julio Fontalvo para que lo acompañara en el acordeón a grabar un LP y Rodrigo le pidió que lo dejara cantar una canción y preciso ese tema fue el porro “El Toro Balay” en su versión original, que luego se convirtió en un rotundo éxito.

Rodrigo ha producido más de 70 trabajos musicales, acompañó en el acordeón a Carlos Vives en el video La Tierra del Olvido y en el año 2012 le hizo la producción y acompañó en el acordeón a Juan Piña en el homenaje que éste le hizo a San Jacinto y con el que a la postre ganaron el Grammy Latino.

Rodrigo Rodríguez ha ganado como acordeonero profesional en varios festivales, en México y Argentina sus cumbias son exitosas; desde 1980, suena en México la cumbia de su autoría Virgen de Guadalupe, a la cual le han hecho muchas versiones.

Este Sanjacintero es autor de más de mil canciones, miembro de Sayco y de Asinpro, se encuentra residenciado en Cartagena con sus seis hijos ya todos profesionales, es un gran gestor cultural e instructor de acordeón, miembro también de la Academia ‘Laras’ la cual organiza los premios Grammy Latinos. Ha sido un músico exitoso que merece éste y muchos homenajes.   

Colofón: La Fundación Festival de la Leyenda Vallenata ha anunciado que la realización de la versión número 53 del Festival de la Leyenda Vallenata se haría virtualmente los últimos días de septiembre y los primeros de octubre del presente año y sólo se espera la aprobación del permiso del alcalde de Valledupar.

 

Jorge Nain Ruiz

@jorgenainruiz

Sobre el autor

Jorge Nain Ruiz

Jorge Nain Ruiz

Vallenateando

Jorge Nain Ruíz. Abogado. Especializado en derecho Administrativo, enamorado del folclor Vallenato, cantautor del mismo. Esta columna busca acercarnos a una visión didáctica sobre la cultura, el folclore y especialmente la música vallenata. Ponemos un granito de arena para que la música más hermosa del mundo pueda ser analizada, estudiada y comprendida.

@jorgenainruiz

1 Comentarios


Constanza Russi 22-08-2020 06:12 PM

Excelente columna , me encanta es muy importante el empuje para nuestro folcor y cultura ciudadana...Dios quiera se sigan dando las cosas....un súper abrazo...muchas felicidades

Escriba aquí su comentario Autorizo el tratamiento de mis datos según el siguiente Aviso de Privacidad.

Le puede interesar

Música Vallenata y Sabanera: una confrontación peligrosa

Música Vallenata y Sabanera: una confrontación peligrosa

Al leer con supremo detenimiento el artículo de Abel Medina, me he enterado de un libro publicado por un destacado folclorista e inves...

Aquellos eclipses de antes

Aquellos eclipses de antes

  Regresó el eclipse el lunes y nadie le paró bolas. En 1998, Valledupar fue elegida por la naturaleza para ver el eclipse. Fue un...

¿Murió la revolución o un revolucionario?

¿Murió la revolución o un revolucionario?

Murió el hombre que encarnaba una revolución fallida desde hace varias décadas y se convirtió en un tirano, igual o peor a Fulgen...

Silvestre Dangond, un artista que aún no dimensionamos

Silvestre Dangond, un artista que aún no dimensionamos

  Ladran, señal de que cabalgamos, frase bastante conocida y adjudicada equivocadamente al Quijote, cae como anillo al dedo con lo...

Defiendo la institucionalidad en Sayco

Defiendo la institucionalidad en Sayco

  En varias oportunidades en esta columna de opinión me he referido a problemas y vicisitudes por las que ha atravesado en diversa...

Lo más leído

Síguenos

facebook twitter youtube

Enlaces recomendados