Opinión
Lágrimas en el sueño
Las lágrimas caen por mis mejillas mientras duermo, salen de mis ojos cerrados por el profundo sueño. En ese mismo sueño tomé en mis brazos a un amigo que, alcoholizado y de cáncer, está muriendo, sin memoria, no me reconoce. Mientras lo abrazo le pido que descanse que aún la vida se nos va en silencio.
Allí en ese universo que es el sueño, las cosas sin sonido, aún los movimientos sin sonidos, el grito sin sonido, un cubismo gris, mi amigo y yo como retratos pálidos por el tiempo mismo que deambulan sin fin, como las pinturas negras, un cielo de arreboles, desvanecen como los rostros orgánicos de Baldot. Despierto en una habitación del hotel donde me encuentro, y sí, mis lágrimas son reales, mis ojos están llenos de ellas, mi almohada húmedas de ellas, el alma arrugada y triste por el universo del sueño.
Baldot
Sobre el autor
Baldot
Fintas literarias
Uvaldo Torres Rodríguez. “Baldot”. Artista que expresa su vida, su historia, sus sueños a través del lienzo, plasmando su raza, lo tribal, lo ancestral, y deformando la forma en la búsqueda de un nuevo concepto. Redacta su vida a través de la pintura, sus fintas literarias las escribe con guantes de boxeo. Con amor al arte y a la literatura desde niño.
0 Comentarios
Le puede interesar
Dos problemas graves de nuestros músicos
Tomás Alfonso “Poncho” Zuleta Díaz, uno de los más tradicionales y emblemáticos cantautores de nuestra música vallenata,...
Desarrollo y progreso con lo nuestro
Valledupar es un municipio que cuenta con grandes potencialidades y que viene aspirando a convertirse en ciudad, objetivo éste que...
El inquietante nacimiento de un gigante editorial
El anuncio hace pocos días de la fusión entre dos colosos mundiales del sector editorial debe ser el motivo de muchas reflexiones. Mi...
El vallenato y la cultura mafiosa
Históricamente, las músicas populares han tenido la predilección de las mafias del narcotráfico y la vallenata no ha sido la ex...
La estrategia del culebrero
Álvaro Uribe Vélez repite con ahínco que los acuerdos de La Habana tienen impunidad. Quizás con el propósito de fascinar más r...