Opinión

Karol G, genia Bichota, y Dalai Lama, un bicho aprovechado

Fabrina Acosta Contreras

13/04/2023 - 00:03

 

Karol G, genia Bichota, y Dalai Lama, un bicho aprovechado
Karol G y Dalai Lama / Foto: créditos a su autor

 

A propósito de lo ocurrido con los excesivos filtros realizados a la cantante Karol G en la portada de la revista GQ y a su asertiva manifestación, además del forzado beso que Dalai Lama le dio a un niño, reafirmo que la Humanidad no se ve más bonita calladita, y que lo que está mal hay que denunciarlo y rechazarlo, que no hay que disfrazar ningún tipo de violencia o discriminación de colonización religiosa o de aparente moda, no y mil veces no.

Establecer estereotipos de belleza y estética para las mujeres es solo el resultado de una cultura patriarcal que parece inventarse formas de arraigarse más y más; idealizar a seres humanos como dioses “perfectos” hace parte de una cultura de sometimiento pueril y falto de determinación, nos llenan de miedos, de mitos infernales, de discursos religiosos que atentan hasta con la salud mental de las personas, por eso cada vez procuro ser más espiritual y menos religiosa, es que ya basta de hacer uso de cualquier “poder” para cometer delitos o posar de salvador del mundo, impoluto e inmortal.

Ya basta de pobretear, feminizar e infantilizar las violencias, cada persona independiente de su condición social, racial, generacional, económica o de género merece respeto en lo privado y en lo público, no puede ser el respeto una retórica doble moral para quedar bien con el mundo.

Karol G es una “genia bichota”, entendió hace rato el tema de la sororidad, del empoderamiento y de que jamás el silencio será la salida, que basta de que las mujeres nos hagamos pajazos mentales disminuyendo la gravedad de situaciones que atropellan nuestra paz y nuestros derechos, la violencia será violencia, aunque se disfrace de sutileza. Gracias, Karol G, por hacer de esa situación una tendencia en redes, dado que desde ahí hacemos pedagogía y potenciamos el poder que tiene la era digital para decirle al mundo que las mujeres no somos objetos y que nuestros cuerpos merecen una valoración alejada del racismo, el machismo y tantas pendejadas.

Al Dalai Lama le digo que no es una santidad un personaje que obliga a un niño a darle un beso y además con lengua. Si eso es en público, no quiero imaginarme cómo será en privado. En realidad, en nombre de dioses, se ha matado, robado y de todo, así que no es extraño que un bicho aproveche de la infancia, la inocencia y la idealización desbordada de muchos, no me sorprendería que ahora se desatara un “Me Too a la Dalai Lama” y salgan las victimas a hablar de tocamientos, abusos y etc. No poso hoy de santurrona enojada es que un día me prometí nunca silenciarme ante lo que hace daño, lo injusto. No se puede vestir de cosas buenas ya basta de tanto silencio y miedo absurdo. Dalai Lama se desdibujó la “santidad” que le asignan, pero por ahí no es…

 

Fabrina Acosta

Sobre el autor

Fabrina Acosta Contreras

Fabrina Acosta Contreras

Evas&Adanes

Nieta de Rita Contreras, leyenda viva de 109 años. Escritora e investigadora Guajira, psicóloga, Magister en estudios de género, Magister en Gestión de Organizaciones y Especialista en Alta Gerencia. Creadora de la Asociación “Evas&Adanes” desde la cual lidera diversas iniciativas ciudadanas como los foros “La Mujer en el vallenato”, “Tejiendo esperanzas por la Guajira”, el programa radial Evas&Adanes, entre otras. 

Ha recibido reconocimientos por la causa que lidera tales como: Joven sobresaliente de Colombia TOYP 2018 (JCI Colombia), máxima distinción del departamento de La Guajira medalla Luis Antonio Robles, personaje diez en el departamento de Amazonas, medalla a Mujer extraordinaria con proyección social otorgada por la Asociación de Mujeres de la Guajira. 

Ha sido columnista por más de 10 años de varios medios puntualizando temas de género y derechos de las mujeres, así como las causas por la guajira. Es autora de los libros Mujer Sin Receta: Sin Contraindicaciones para hombresEvas culpables, Adanes inocentes”, “De esas costumbres que hay en mi tierra: una mirada a los imaginarios sociales de la violencia de género”, “Mujeres sin receta: Más allá de los mitos”.

 

@Facostac

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