Otras expresiones

Un homenaje a un maestro de la gastronomía vallenata

Redacción

15/09/2012 - 00:30

 

Rafael Eduardo de la HozRafael Eduardo de la Hoz. Su nombre suena en las memorias de quienes frecuentaron el Club Valledupar durante años. Él fue uno de los Chefs más destacados de esta prestigiosa entidad y con sus habilidades consiguió cautivar los paladares de un público vallenato innumerable.

Esta semana, su nombre volvió a sonar. Quizás con más fuerza. Y no fue por casualidad, sino debido a la noble tarea iniciada por la Fundación AVIVA en Valledupar de rescatar las costumbres y memorias del Viejo Valle de Upar.

En el marco del foro sobre la gastronomía organizado en la Escuela de Bellas Artes –junto con el Banco de la República–, el gran Chef apareció exultante y, tras los discursos del alcalde Freddy Socarrás y del presidente de la Cámara de Comercio, José Luis Urón, recibió un reconocimiento de parte de los organizadores del evento.

La emoción fue inmensa y en el rostro de Rafael Eduardo de la Hoz sólo había espacio para la alegría. Sentado en la primera fila, los periodistas vinieron a su encuentro para inmortalizarlo con su bandeja de plata en las manos.

Fueron unos minutos en los que la historia gastronómica de Valledupar volvió a la primera línea, premiando a sus mayores artistas, sus personalidades más entregadas, y celebrándolo en un acto inédito.

Rafael Eduardo de la Hoz llegó a la ciudad de Valledupar con sólo 20 años y, desde ese momento, emprendió el camino tortuoso de la gastronomía vallenata. Primero como auxiliar de cocina, y luego posicionándose en los lugares más selectos de la región.

Fue un cocinero empírico que supo explorar el mundo de los sabores y los matices. Su esfuerzo constante y la investigación le permitieron convertir cada estreno de carta en un momento importante y dieron a Valledupar una dimensión gastronómica más sofisticada.

En un discurso leído por el periodista Limedes Molina, el Chef expresó su alegría y satisfacción, y describió el sentimiento de profesionalismo que lo acompañó a lo largo de todos estos años dedicados a la gastronomía. “Este reconocimiento me llena de regocijo –expresó– y alimenta ese sentimiento del deber cumplido”.

0 Comentarios


Escriba aquí su comentario Autorizo el tratamiento de mis datos según el siguiente Aviso de Privacidad.

Le puede interesar

El recorrido del Centro Municipal de Memoria de Becerril

El recorrido del Centro Municipal de Memoria de Becerril

Desde que la señora Rosa Fuentes fue elegida como consejera departamental en representación de las Casas de la Cultura en el Cesar, l...

Una mirada a los orígenes de la Semana Santa en el Cesar

Una mirada a los orígenes de la Semana Santa en el Cesar

En vísperas de la Semana Santa, siempre es oportuno reflexionar sobre los orígenes y la evolución de estas fiestas que tienen un esp...

Alberto Muñoz y los nuevos retos de la Cultura en Valledupar

Alberto Muñoz y los nuevos retos de la Cultura en Valledupar

Elegante y reflexivo, Alberto Muñoz es un hombre destacado de la Cultura que ha trabajado durante muchos años en el ámbito carcelari...

El arte de la buena sazón

El arte de la buena sazón

El  medio día del miércoles 5 de septiembre tuvo un sabor diferente. El Primer Encuentro Gastronómico Regional  se encargó de mat...

El poder de convocatoria del Ecce Homo

El poder de convocatoria del Ecce Homo

Son las 4 y media en la Plaza Alfonso López. Un lunes 25 de marzo, caluroso y festivo. Desde hace varios días, el nombre del Ecce Hom...

Lo más leído

Síguenos

facebook twitter youtube

Enlaces recomendados