Patrimonio

El Museo del acordeón, el lugar más universal de Valledupar (y posiblemente del Caribe colombiano)

Johari Gautier Carmona

28/03/2022 - 04:55

 

El Museo del acordeón, el lugar más universal de Valledupar (y posiblemente del Caribe colombiano)
Beto Murgas recibe reconocimiento del Parlamento Andino como referente cultural / Foto: PanoramaCultural.com.co

 

El jueves 24 de marzo del 2022, la Casa-Museo del Acordeón y su fundador Beto Murgas recibieron un reconocimiento de parte del Parlamento andino como “Referente cultural en la región Andina”. En palabras de su secretario general, Eduardo Chiliquinga, “este reconocimiento no es otro cualquiera”.

El órgano de representación de naciones de la comunidad andina hizo presencia en la ciudad de Valledupar para resaltar e impulsar simbólicamente el esfuerzo de una gestión cultural que crea memoria, tejido cultural, orgullo y dinámicas turísticas. “Uno, cuando recorre el museo del acordeón, entiende la magnitud del acordeón en Colombia –explicó Eduardo Chiriquinga–. Pero, a partir de hoy, la Casa-Museo de Beto Murgas no sólo es de Valledupar también es de la región andina”.

El reconocimiento a Beto Murgas es la prueba tajante de que todo esfuerzo termina pagando y que el amor por un arte o una disciplina no se esfuma, sino que se expande, se multiplica y conquista a corazones y mentes abiertas. La ceremonia organizada en el mismo museo fue una vitrina de lo escrupuloso que es Beto Murgas como gestor cultural, pero también de cómo el entorno ha respondido a las atenciones y el compromiso de este cantautor y museógrafo villanuevero.

Esto me invita a presentar inevitablemente el Museo del Acordeón de Beto Murgas como el lugar más universal de Valledupar y posiblemente de la región Caribe. Un lugar en el que, pese a las limitaciones de espacio, no se escatima en tiempo o en ideas para trascender.

Beto Murgas / Foto: PanoramaCultural.com.co

El Museo de Beto Murgas abrió sus puertas en el año 2013 haciéndose un espacio en la capital del Cesar como primer museo independiente. En su interior se presentó una colección de acordeones de diversos países que van desde Alemania, pasando por Italia, Rusia, Argentina o Brasil, que fue creciendo rápidamente con el tiempo y fue integrando otros elementos (como LPs, fotografías o libros).

Con el paso del tiempo, el museo se convirtió en un lugar de paso obligatorio para quienes visitan la ciudad de Valledupar y quieren entender lo que es el Vallenato y cómo este instrumento de carácter europeo pudo aclimatarse tan bien en esta parte del Caribe. Alianzas creadas con entidades como Comfacesar, guías turísticas, fundaciones culturales y asociaciones artísticas, facilitaron ese proceso de crecimiento.

No sobra decir que el talante de compositor de Beto Murgas también ayudó en el reconocimiento regional y nacional de este museo. Oriundo de Villanueva (Guajira) y autor de algunas de las canciones más bellas del folclor Vallenato, Beto Murgas confirmó ser, desde el principio, un perfecto guía y narrador de la música tradicional. Su canción “La negra” ha recorrido el mundo en varias direcciones.

Inquieto como nadie, y siempre abierto a investigar las raíces del acordeón, Beto Murgas incluyó muy tempranamente en su museo rarezas como el ancestro chino del acordeón: el sheng, un invento que se atribuye al emperador chino Nyu-Kwa (3000 años antes de Cristo). Esta apertura sobre el mundo entero es un elemento característico de esa universalidad que destaco en este artículo. Desde un principio, Beto se esforzó en reconstruir el mundo que rodea el acordeón en una ciudad como Valledupar y en ese empeño levantó puentes hacia fuera, hacia otras ciudades, otros países y continentes.

Beto Murgas expone algunos de los juglares más conocidos de la región / Foto: El Pilón  

Pero el Museo del Acordeón es mucho más que el acordeón y cualquier visitante se dará cuenta al verlo. Aquí se coleccionan otras curiosidades de gran valor como la novela "Cien años de soledad" de García Márquez traducida a más de veinte idiomas entre los que aparece un ejemplar en esperanto (un idioma que sólo cuenta 10.000 hablantes nativos). Es también un patio abierto a la parranda con grandes murales y pinturas, obras escultóricas de artistas como Walter Arland y recuerdos que ensalzan la esencia de la música vallenata.

Coleccionistas y amantes del vallenato viajan desde diversos continentes -desde Europa pasando por América del norte y Sur-, para descubrir el museo del acordeón e incluso entregar instrumentos que albergan grandes historias.

En mi caso, tuve el gusto de entregar al museo, en 2021, un acordeón Höhner de la Segunda guerra mundial. Pertenecía a un soldado alemán que, tras la ocupación en Francia, tuvo que salir huyendo por temor a las represalias de la resistencia. El acordeón puede verse hoy en el museo. Eso me lleva a decir que yo también, en ese museo, tengo algo, y ese algo es, en realidad, una gran amistad con un hombre admirable.   

Allí, a ese museo, trato de ir con frecuencia. Allí he llevado a mi hijo con sólo 6 años y llevaré a todo aquel que quiera descubrir y sentirse a gusto en Valledupar. De todas las cosas que más aprecio, y que hacen de este lugar el más universal de Valledupar (y posiblemente del Caribe colombiano), es la sensación de entrar en un lugar que pertenece a Macondo. Sí, un capítulo más de la obra de García Márquez en el que usted y yo, querido lector, podemos ser protagonistas.

 

Johari Gautier Carmona

@JohariGautier

Sobre el autor

Johari Gautier Carmona

Johari Gautier Carmona

Textos caribeños

Periodista y narrador. Dirige PanoramaCultural.com.co desde su fundación en 2012.

Parisino español (del distrito XV) de herencia antillana. Barcelonés francés (del Guinardó) con fuerte ancla africana. Y, además -como si no fuera poco-: vallenato de adopción.

Escribe sobre culturas, África, viajes, medio ambiente y literatura. Todo lo que, de alguna forma, está ahí y no se deja ver… Autor de "Cuentos históricos del pueblo africano" (Ed. Almuzara, 2010), Del sueño y sus pesadillas (Atmósfera Literaria, 2015) y "El Rey del mambo" (Ed. Irreverentes, 2009). 

@JohariGautier

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