Patrimonio

Fiestas del Caimán y Día del Moja Moja: la alborada caimanera

Lisandro Polo Rodríguez

27/01/2023 - 05:25

 

Fiestas del Caimán y Día del Moja Moja: la alborada caimanera
Las fiestas del caimán / Foto: Lisandro Polo Rodríguez

 

Hoy día de San Sebastián

Cumple años Tomasita

Y ese maldito animal

Se ha comido a mi hijita”…

Con esta estrofa que se le atribuye al maestro Eulalio Meléndez, creada por el año 1886, nos transportamos imaginariamente a Ciénaga Magdalena, cualquier 20 de enero, día de San Sebastián, en la Fiesta del Caimán, celebración que gira alrededor al reptil de la familia de los aligatóridos, conocidos como caimanes; que se distribuyen en las regiones subtropicales.

Son muchas las poblaciones ribereñas que realizan en esta fecha diversos festejos en honor al “Rey del Río”. En Guaímaro, Magdalena, población ubicada entre Remolino y Salamina, es una tradición que lleva más de 100 años de existencia, en donde, a lo largo de su habitual recorrido por toda la población, se acompaña a la figura del reptil, la cual es elaborada en madera y materiales reciclables, accionados por lugareños poseídos del espíritu reptiliano, quienes van al compás del ritmo de los Tambores, al son de la música de “Pajarito”, la llamada música de “Negritos”, en donde se improvisan versos acompañados de tambor y guacharaca, con coros constantes; durante el recorrido se realizan estaciones en determinados puntos o en casas de personajes, a los que se les improvisan coplas. Los visitados deben pagar, ya sea con ron o con dinero para continuar la juerga, la cual es un desenfreno de confraternidad, hermandad y camaradería parrandera; jolgorio que inicia en las primeras horas del día alegrando los primeros rayos del sol, y contagiando el canto de los gallos con la “Alborada Caimanera”.

Este festejo del Caiman se realiza en diversas poblaciones de las riberas, en ellas se pueden apreciar una variedad de formatos musicales en el acompañamiento de este reptil artesanal en su jornada anual a través de los años, algunas de ellas presentando variaciones; como lo dice la investigadora cultural natural de Sevilla, Zona Bananera, Osmalia Gutiérrez: “Esa melodía antes era bastante marcada, sencilla, plana y hoy en día es más melódica; por efectos de la coreografía, el maestro Víctor Ricardo le incorporó unas variantes por petición del coreógrafo Omar Gastelbondo, incluyéndoles unas figuras que hoy día se conocen como bajadas, colocándole melodía a uno de los versos para enriquecer esa parte en la coreografía”.

Y es que en Ciénaga y toda esa zona, la música era con versos acompañados incluso de cañamilleros o instrumentos tradicionales. Allá por los años 80, fue que se hizo ese cambio donde se le incluyó el clarinete, como instrumento esencial, con el acompañamiento rítmico de la Joricamba, ritmo parecido a un ritmo de Baile Cantao y a la Puya Farotiá, como lo corrobora el artículo del Boletín Informativo del Centro de Investigaciones y Recursos Educativos del Instituto Nacional de Formación Técnica Profesional “Humberto Velásquez García” de Ciénaga, Magdalena (Revista No. 17):

Detrás viene un conjunto de músicos: gaita indígena, caña de millo, los tambores rituales, y las guacharacas. Adelante traen un caimán de “papel maché” que lleva un hombre introducido en la panza. En las fauces, una muñeca de trapo”.

Tal como se conoce, es una recreación corográfica y musical de Eulalio Meléndez, quién en 1886, para un carnaval de Ciénaga, compuso la música de la danza uniendo los versos de Manuel Inocente Varela y dándole una especie de minidrama basado en la desaparición de una hija del autor llamada Tomasita.

Algunas investigaciones realizadas por Guillermo Henríquez y Carlos Domínguez señalan que el caimán en ciénaga era un animal importante para la comunidad, es decir, era un animal totémico. Por ejemplo, en cerámicas de la cultura Tayrona, se encontraron varios sellos de barro –para impresión con tintas vegetales– que tenían a un hombre bailando dentro de un caimán.

Carlos Domínguez Ojeda nos relata que el decimero Lisandro Marriaga en 1864 escribió los versos de la primera danza, y en sus versos hace alusión a la señora Esther Mantilla, natural de Santana, residenciada en el barrio “Rincón Guapo” que, en la época de la creciente, ella iba a lavar a la ciénaga, colocó el lío de ropa en una piedra, de pronto el saurio emergió de las aguas llevándose a su hija, la señora aterrada empezó a dar gritos. Los pescadores de Pueblo Viejo salieron a su llamado, hechos que han sido recreado hasta la fecha en la población de Ciénaga Magdalena, pero que, en cada una de las poblaciones de la Ribera del Río Grande de la Magdalena, tiene su sentir y su goce propio, el cual celebran religiosamente cada 20 de enero Fiestas de San Sebastián en el popular Día del Moja Moja.

Me despido sin afán

Los invito aquí primero

Celebrar San Sebastián

Con el caimán guaimarero.

 

Lisandro Polo Rodríguez

1 Comentarios


Carlos Colonna 30-01-2023 06:29 PM

Gracias Lisandro por recrearnos ese magnífico espacio en Gauimaro, valió la pena y vale la pena repetir!

Escriba aquí su comentario Autorizo el tratamiento de mis datos según el siguiente Aviso de Privacidad.

Le puede interesar

El toque de campanas: una tradición en vía de extinción

El toque de campanas: una tradición en vía de extinción

  Los campanarios representan mucho más que adornos arquitectónicos. Durante siglos han permitido transmitir valiosos mensajes para...

Ganadores del premio Nacional de Bibliotecas Públicas “Daniel Samper Ortega” 2015

Ganadores del premio Nacional de Bibliotecas Públicas “Daniel Samper Ortega” 2015

En un territorio golpeado por la violencia y el conflicto armado como San Vicente del Caguán, la Biblioteca Pública se ha erigido d...

Luces y sombras en la historia de la India Catalina

Luces y sombras en la historia de la India Catalina

  La India Catalina es reconocida como uno de los monumentos más hermosos y representativos de Cartagena en Colombia. Su figura deja...

Las lavanderas de mi pueblo: recuerdos de Santa Marta

Las lavanderas de mi pueblo: recuerdos de Santa Marta

  No hace mucho tiempo, nuestro río era lugar de tablas, jabón y ropa que lavar. El agua de las casas era para beber. Para lavar ha...

La solidaria explosión de alegría en el Carnaval de Barranquilla

La solidaria explosión de alegría en el Carnaval de Barranquilla

  Hablemos de los personajes carnavaleros y de las realidades históricas trascendentales que nos evocan. El Pájaro Coyongo con su n...

Lo más leído

Síguenos

facebook twitter youtube

Enlaces recomendados