Opinión

Momentos

Antonio Ureña García

03/08/2017 - 08:30

 

 

Todos y todas nos empeñamos en buscar la felicidad, cuando sabemos que la misma es tan solo una quimera. Con ahinco, lo único que encontraremos serán ciertos pasajes más o menos fugaces que actuarán a modo de contrapeso frente a nuestra lucha cotidiana. Sin embargo en ocasiones la vida nos regala situaciones y sensaciones capaces de  transformar el devenir de los días en un viaje maravilloso.

A veces, en ese viaje aparecerán salteadores de caminos que pretenden robar los sueños, haciendo surgir pesadillas que causan miedo y angustia. Esos salteadores actúan a modo de fantasmas que intentan, no solo parar el viaje, si no revivir sombras del pasado. Se genera así una certeza: no es posible avanzar. Esos fantasmas en realidad no actúan solos; lo hacen en connivencia con la soledad y el tedio. Cuando la sensación de soledad o falta de alicientes invade el día, ellos aprovechan para invadir la noche. Así, para vencerles hay que activar la capacidad de dejarse sorprender por los pequeños detalles que a diario pasan desapercibidos. Sólo de esta forma comenzarán a difuminarse cual sombras que son.

Al diluirse las sombras en su totalidad, la fantasía de un camino lleno de sorpresas vuelve a invadir los  sueños y se puede otra vez volver a caminar con una sonrisa que actuará como exorcismo ante los fantasmas que impedían avanzar.

A veces, en un alarde de generosidad, la vida nos ofrece la persona que ha de acompañarnos durante ese viaje. Se trata de un regalo sorpresa, pues ninguno de los dos sabe dónde les llevará, si es que ha de llevarles a alguna parte. Tienen una certeza: quieren viajar y quieren hacerlo juntos y ni importa el destino del mismo. Es entonces, cuando esa fantasía del camino compartido va adquiriendo corporeidad en forma de unos labios en los que fundirse o una piel en la que dibujar y comunicarse mediante caricias.

Ambos son conscientes que aparecerán obstáculos, Si deciden superarlos juntos, pese a mostrarse como insalvables, en lugar de detenerles, el sentirse unidos les dará energía para continuar.

Pero lo importante de aquel viaje no es hacerlo solo o acompañado, si no transformar cada etapa del mismo, cada momento que nos ofrece la vida, en algo único e irrepetible que de alguna forma sintetice y haga recordar todos aquellos momentos únicos e irrepetibles producidos a lo largo del camino.  

Sólo vivir con intensidad estos momentos torna liviana la mochila que llevamos sobre los hombros y lo guardado en su fondo como algo doloroso se convierte en experiencia capaz de hacernos mirar a nuestro alrededor con ojos nuevos para así disfrutar con más intensidad lo que nos rodea.

 

Antonio García Ureña 

 

Sobre el autor

Antonio Ureña García

Antonio Ureña García

Contrapunteo cultural

Antonio Ureña García (Madrid, España). Doctor (PHD) en Filosofía y Ciencias de la Educación; Licenciado en Historia y Profesor de Música. Como Investigador en Ciencias Sociales es especialista en Latinoamérica, región donde ha realizado diversos trabajos de investigación así como actividades de Cooperación para el Desarrollo, siendo distinguido por este motivo con la Orden General José Antonio Páez en su Primera Categoría (Venezuela). En su columna “Contrapunteo Cultural” persigue hacer una reflexión sobre la cultura y la sociedad latinoamericanas desde una perspectiva antropológica.

0 Comentarios


Escriba aquí su comentario Autorizo el tratamiento de mis datos según el siguiente Aviso de Privacidad.

Le puede interesar

Un puente por lo alto

Un puente por lo alto

El pasado fin de semana festivo tuve el honor de ser invitado por la Universidad Popular del Cesar y el grupo de investigación La Pied...

La mano invisible

La mano invisible

Esta segunda semana de febrero nos deja pensativos  en todos los sentidos. Recuerdo en mis tiempos de estudiante un tema propio de e...

Reelección presidencial y el grillo

Reelección presidencial y el grillo

La historia de la reelección presidencial en Colombia es un libro abierto donde se puede leer, sin mayor esfuerzo, que las reeleccio...

Los arhuacos tienen razón

Los arhuacos tienen razón

Les asiste razón a los indígenas arhuacos al levantar su voz de protesta contra el canal RCN por la manera como se ha mostrado esa ...

El falo de la censura

El falo de la censura

  En julio de 1995, el artista le pidió personalmente al director un permiso para presentar algunas de sus obras en la sala de exp...

Lo más leído

Síguenos

facebook twitter youtube

Enlaces recomendados