Opinión

Errores comunes de los festivales vallenatos

Jorge Nain Ruiz

11/08/2023 - 00:15

 

Errores comunes de los festivales vallenatos

 

No tengo duda alguna sobre el importante aporte que hacen los múltiples festivales vallenatos que se realizan en buena parte de los municipios y corregimientos de Colombia a la preservación y difusión de las bases de la música vernácula del Caribe colombiano, sin embargo, debemos hacer un mayor esfuerzo por corregir una serie de errores que tenemos en la organización de la gran mayoría de estos.

Recientemente, estuve en el Festival Francisco el Hombre de Riohacha y conversé agradablemente con el gran musico y amigo Roger David Bermúdez Villamizar, estudioso del vallenato y en general de nuestra cultura, y me contaba con entusiasmo que uno de los puntos más fuertes que tiene ese festival es el cuidado y preponderancia que le otorgan a la selección y al trato a los miembros del jurado calificador de los concursos.

Un error común que advierto en buena parte de los festivales vallenatos que he visitado es precisamente que no se le da la más mínima importancia al jurado. En muchos festivales el presidente o coordinador de jurados minutos antes de iniciar un concurso observa que persona mas o menos conocedora del tema se encuentra por ahí merodeando y la invita a subir a la tarima como jurado, ello implica que improvisa totalmente, con el agravante que no sabe si esa persona tiene un familiar participando, si tiene una íntima amistad con un concursante que le impida calificar con objetividad, en fin para escoger un jurado se requiere un estudio serio y juicioso de su hoja de vida y de sus antecedentes.

He estado en festivales que los mismos miembros de la junta organizadora terminan de jurado, porque no encontraron a nadie más. En muchos festivales se les ocurre poner de jurado a participantes de otras categorías, ejemplo en acordeón aficionado ponen a un verseador y en piquería ponen a un acordeonero. Resulta que entre los músicos festivaleros existen bandos, enemistades y contubernios que hacen que no se califiquen objetivamente entre ellos.

Otro error común que he observado en algunos festivales es permitir que miembros o familiares muy cercanos de los organizadores, participen en los concursos, se hace necesario crear una inhabilidad para los organizadores y los familiares hasta el segundo grado de consanguinidad, por lo menos. No podemos permitir que queden dudas de la ecuanimidad y de los principios éticos de los organizadores de un concurso.

No me cansaré de recomendar que busquen formulas para que los distintos concursos de los festivales no se sigan haciendo en lugares y horas en que el inclemente sol hace de las suyas. Los participantes en un festival vallenato no solo buscan un premio material en trofeo y dinero, sino también que el público escuche su obra. ¿Quién va a pararse a las 12 del día en una plazoleta de puro cemento, sin arborización, como lo son, en buena parte, estos parques donde se realizan los festivales?

En general insisto en que se requiere urgente un organismo que le haga control y veeduría a todos y cada uno de los festivales vallenatos que se realizan en Colombia, para que se pueda cumplir con los objetivos del PES y de la declaratoria de la UNESCO como Patrimonio Inmaterial de la Humanidad por proteger. Mientras tanto un poco de sentido común.

Colofón: Me agrada mucho que un artista como Rafa Pérez tenga la valentía y las agallas de hacer el lanzamiento de su nuevo trabajo musical en el Parque la Leyenda, lo cual implica que se tiene confianza, es de los nuevos valores que debemos apoyar, este Chiriguanero llegará muy lejos.    

 

Jorge Nain Ruiz

Sobre el autor

Jorge Nain Ruiz

Jorge Nain Ruiz

Vallenateando

Jorge Nain Ruíz. Abogado. Especializado en derecho Administrativo, enamorado del folclor Vallenato, cantautor del mismo. Esta columna busca acercarnos a una visión didáctica sobre la cultura, el folclore y especialmente la música vallenata. Ponemos un granito de arena para que la música más hermosa del mundo pueda ser analizada, estudiada y comprendida.

@jorgenainruiz

0 Comentarios


Escriba aquí su comentario Autorizo el tratamiento de mis datos según el siguiente Aviso de Privacidad.

Le puede interesar

La señora del dilema

La señora del dilema

  En días pasados, me abordó una conocida señora, se le notaba algo de angustia y ansiedad en su rostro.  Me dijo: -Señor Jorge...

Una charla ante el espejo

Una charla ante el espejo

  —Silva, abordemos el tema desde la génesis. Según la Constitución Política de 1991: ¿Cuál es el modelo de estado de Colom...

Tlön Bar: un mundo de todos

Tlön Bar: un mundo de todos

“Tlön es el fruto de fatigadas generaciones de hombres que secreta y rigurosamente han concebido y diagramado un universo de extremo...

Las galápagas de la violencia

Las galápagas de la violencia

En esos días, en que se estremeció de horror el país, en que el odio y la barbarie se enseñoreaban en campos y ciudades; aquí en T...

La metamorfosis de un alcalde

La metamorfosis de un alcalde

Los alcaldes, esos personajes privilegiados, amados por unos, odiados y vilipendiados por otros, son seres de carne y hueso, así ell...

Lo más leído

¿Qué es la oralidad?

Javier Zamudio | Patrimonio

Vida y trayectoria de Rafael Pombo

Redacción | Literatura

La Cultura y el laberinto del poder

Omar Castillo | Pensamiento

La parranda vallenata como un ritual de amistad

María Ruth Mosquera | Música y folclor

Vallenato clásico

Luis Carlos Ramirez Lascarro | Música y folclor

La Parranda vallenata

Carolina Rosa Guerra Ariza | Patrimonio

Síguenos

facebook twitter youtube

Enlaces recomendados