Literatura
Recuerdos de un taller literario RELATA
Sentado detrás de una mesita rectangular en la sala de conferencias de la Biblioteca Rafael Carrillo, Luis Alberto Murgas espera a sus alumnos con paciencia. El profesor del taller de literatura Relata ––más conocido como “Beto”–– siempre es puntual. La verdad es que es el único que llega a la hora. Desde las ocho de la mañana de cada sábado (hora a la que supuestamente empieza el taller), el hombre se sienta con ese rostro pensativo que deja entrever un amor por las letras y una voluntad férrea por comunicar su conocimiento.
Los alumnos van llegando a cuenta gotas como hojas sueltas caídas de un árbol, pero a las nueve empieza la clase. El retraso se ha convertido en una norma tácita que permite convertir el espacio de reunión en una tertulia amena. El profesor lo acepta con humor, más preocupado por las lecturas que tiene en su plan de estudio, por las anécdotas que le aportan los asistentes, que imponer una autoridad. La literatura es una cuestión de entusiasmo, de apasionamiento y entrega, lo sabe muy bien Beto. Es un modo de vida que aquí se ilustra en cada detalle: en las lecturas que se comparten, en el café caliente que acompaña las conversaciones, en las bromas, comparaciones y críticas compartidas.
0 Comentarios
Le puede interesar
Gabo y una nueva colección editorial para todos
La semana pasada nos llegaba la noticia preocupante del estado de salud de Gabriel García Márquez quien lleva recluido en un silencio...
“Los novelistas somos creadores de pruebas ficticias”
Juan Gabriel Vásquez llegó casi puntual a la cita en la oficina de su editora en el norte de Bogotá. Un estrecho cubículo, lleno de...
Chanson Douce, de Leïla Slimani: Premio Goncourt 2016
El pasado jueves 3 de noviembre se dio a conocer la novela ganadora del premio literario más importante de las letras francesas, Cha...
El origen de la tristeza: una crítica contra la modernidad
El arte se propone, entre muchas otras cosas, criticar los procesos de modernidad y modernización que se generan en la sociedad y con ...
Tacones al rojo
Mi mujer despertó angustiada y bastante molesta. De inmediato, se levantó y se sentó en el borde de la cama con la intención d...