Literatura

Noventa años del natalicio del escritor García Márquez

José Atuesta Mindiola

06/03/2017 - 03:25

 

Gabriel García Márquez

 

Las cosas suceden, cuando tienen que suceder. En una antigua ranchería de La Guajira, José Arcadio Buendía le ganó una pelea de gallos a Prudencio Aguilar. El perdedor, furioso, le grita ofensas que ponen en duda la virilidad del ganador. Éste, en defensa de su honor, lo reta a un duelo. Le dijo: –Tú, anda a tu casa, ármate, porque te voy a matar–. Y en efecto, Prudencio muere. 

Jose Arcadio tenía un año de casado con su prima, Úrsula Iguarán. El matrimonio no se había consumado por el temor de ella de que sus hijos nacieran con cola de cerdo; pero en el pueblo corría el rumor de que José Arcadio era impotente.  Como el perdedor, en ocasiones busca la venganza a cualquier precio, fue éste el motivo de Prudencio para acometer su ajuste de cuentas, que al final le costó la vida. El duelo por asuntos de honor era una costumbre atávica que no se consideraba delito.  Sin embargo, este trágico suceso le cambió la vida a José Arcadio y a Úrsula. La imagen del muerto los persigue cada instante, hasta el punto que tuvieron que irse del pueblo.  Inician la travesía que termina en Macondo.  

Ni hay duda que los personajes de este duelo a muerte, acaecido en Barrancas (La Guajira) en un domingo de octubre de 1908, son el coronel Nicolás Ricardo Márquez Mejía y Medardo Pacheco Romero.  A raíz de este episodio, el coronel viaja con su esposa Tranquilina Iguarán Cotes y se residencian en Aracataca.  Allí nacen sus hijos, entre ellos Luisa Santiaga Márquez Iguarán, que sería la esposa de Gabriel Eligio García Martínez.  De este hogar viene al mundo Gabriel José García Márquez el 6 de marzo de 1927.  El abuelo fue el personaje fundamental en la infancia del escritor. Los relatos de sus peripecias en la guerra civil, surgiría el interés por los temas de la muerte y la guerra.

La maestra Rosa Elena Fergusson le enseñó la fascinación por la lectura y la escritura, y desde pequeño se siente atraído por la poesía. Mediante concurso del Ministerio de Educación Nacional gana una beca para terminar bachillerato en el Liceo Nacional de Varones de Zipaquirá. La presencia de los profesores de literatura Carlos Julio Calderón Hermida y el poeta Carlos Martín, le orientaron su vocación de escritor. Fue así como, hacia finales de cuarto de bachillerato, leyó en clase sus primeros cuentos y poesías.

En 1947 ingresa a la Universidad Nacional a estudiar Derecho, pero por el cierre de la Universidad viaja a Cartagena, y con el apoyo del periodista Clemente Manuel Zabala, ingresa como redactor y columnista en el diario El Universal. Pronto hizo amistad con los escritores de la ciudad, especialmente con Héctor Rojas Herazo y Gustavo Ibarra Merlano. Por invitación del médico y escritor Manuel Zapata Olivella llega a Valledupar en 1949, y se enamora de las crónicas de los cantos vallenatos; de la mano del compositor Rafael Escalona viaja por los pueblos de la Guajira y del Cesar de donde provenían sus ascendentes paternos.

Regresa a Barranquilla trabaja en El Heraldo, y se une al grupo de los escritores Álvaro Cepeda, Alfonso Fuenmayor y Ramón Vinyes.  En 1954 viaja a Bogotá y por recomendación del poeta Álvaro Mutis entra de redactor y comentarista de El Espectador. Después reside en México y allá escribe Cien Años de Soledad, la editorial Sudamericana de Buenos Aires publica su primera edición el 30 de mayo de 1967. Los elogios de la crítica y del público siguen vigentes para las obras de este Nobel de la literatura de 1982.

 

José Atuesta Mindiola

Poeta y escritor 

 

Sobre el autor

José Atuesta Mindiola

José Atuesta Mindiola

El tinajero

José Atuesta Mindiola (Mariangola, Cesar). Poeta y profesor de biología. Ganó en el año 2003 el Premio Nacional Casa de Poesía Silva y es autor de libros como “Dulce arena del musengue” (1991), “Estación de los cuerpos” (1996), “Décimas Vallenatas” (2006), “La décima es como el río” (2008) y “Sonetos Vallenatos” (2011).

Su columna “El Tinajero” aborda los capítulos más variados de la actualidad y la cultura del Cesar.

0 Comentarios


Escriba aquí su comentario Autorizo el tratamiento de mis datos según el siguiente Aviso de Privacidad.

Le puede interesar

Literatura universal: Caín, de José Saramago

Literatura universal: Caín, de José Saramago

Siempre que abro un libro de José Saramago me invade un sentimiento extraño: algo así como una ilusión por el reencuentro con su na...

El realismo caribe de David Sánchez Juliao

El realismo caribe de David Sánchez Juliao

“La culpa ––tal vez–– sea también de uno. No de ellos únicamente, porque el infortunio de este país que hemos contribuido ...

El trueque literario: una experiencia más allá del intercambio de libros

El trueque literario: una experiencia más allá del intercambio de libros

  Vuelve el Trueque Literario a Valledupar tras un año de ausencia, pero en su séptima versión regresa con actividades culturales,...

Colombia sí tiene mujeres escritoras

Colombia sí tiene mujeres escritoras

El Día del Idioma tiene su origen en 1926, cuando el escritor valenciano Vicente Clavel Andrés propuso la idea de un día especial p...

Décimas a Pepe Castro, de José Atuesta Mindiola

Décimas a Pepe Castro, de José Atuesta Mindiola

  Considerado como uno de los políticos más importantes del departamento del Cesar, José Guillermo Castro Castro, conocido tambi...

Lo más leído

La Muerte de Abel Antonio

Álvaro Rojano Osorio | Música y folclor

Origen del Festival de la Leyenda Vallenata: un viaje en el tiempo

Simón Martínez Ubárnez | Música y folclor

La parranda vallenata como un ritual de amistad

María Ruth Mosquera | Música y folclor

La Parranda vallenata

Carolina Rosa Guerra Ariza | Patrimonio

Síguenos

facebook twitter youtube

Enlaces recomendados