Literatura

Clemencia Tariffa, la poeta olvidada del Cesar

Samny Sarabia

04/10/2023 - 00:05

 

Clemencia Tariffa, la poeta olvidada del Cesar
Clemencia Tariffa de joven (izquierd) y junto al escritor Manuel Zapata Olivella

 

Pocos cesarenses saben que en sus tierras, específicamente en el municipio de Codazzi, nació el 22 de octubre de 1959 una de las plumas más exquisitas del Caribe colombiano. Es más, no todo los codacenses conocen la obra y el gran aporte que una poeta suya hizo a las letras de la región a pesar de contender con una vida adversa. Dentro de la bibliografía que recoge a los poetas destacados del departamento, el nombre de Clemencia Tariffa es quizá el gran ausente. 

El descuido por la poética de Tariffa en el Cesar se debe –tal vez- a que, desde muy pequeña, fue llevada por su madre a vivir a la ciudad de Santa Marta. En esa ciudad, en medio de la precariedad y de la epilepsia terminó el bachillerato, se empleó como bibliotecaria en un colegio privado, se desarrolló literariamente y conoció a sus mejores amigos, esos que la socorrieron en sus momentos más amargos.

En 1987, bajo el mecenazgo del político samario Juan Carlos Vives Menotti, publicó el libro ‘El ojo de la noche’, obra con la que dio a conocer su poética en la Casa de Poesía Silva y en otros lugares del interior del país. En 1994 obtuvo en Caracas el Premio Latinoamericano de Poesía Koeyú y el Premio de Poesía del Instituto de Cultura del Cesar. Junto a Hernán Vargascarreño, Leda Beatriz Mendoza, Alfonso Delgado Campo, Miriam Reina, Monique Facuseh, María Teresa Escobar y otros pocos poetas, formó el colectivo ‘Poetas al Exilio’; quienes en el año 2006 le ayudaron a publicar su segundo libro titulado ‘Cuartel’.

Tras el fallecimiento de su madre, doña Socorro, quien fuera su eterna compañera y cuidadora, la poeta fue recluida en una cárcel en Santa Marta por una confusión relacionada con la muerte de su madre, y luego –debido a su enfermedad- en una clínica mental donde pasó sus últimos años de vida, una vida difícil que se encargó de recrear de una manera hermosamente trágica; a través de sus letras dio a conocer sus vivencias, la melancolía y la desdicha siempre estuvieron plasmadas en ellas.

Con su muerte en el año 2009, el erotismo y la tragedia por la que se distingue su poesía, se quedó detenida en el tiempo, sentida y vivida solo por sus cercanos y por aquellos pocos que tuvieron la dicha de conocer sus escritos estando ella en vida y que son quienes –hoy- se empeñan en difundir su legado. Dentro de ellos se cuenta otro codacense, Nidio Quiroz, un escritor y gestor cultural, distinguido por ser el ganador, entre más de 22 mil inscritos, del Concurso Nacional de Cuento organizado por RCN radio y televisión, en asocio con el Ministerio de Educación en su versión 2018 con el cuento ‘Yo quiero ir a Río de Janeiro’.

Nidio Quiroz escribe desde los 11 años. La primera referencia de Clemencia Tariffa la tuvo a los 18 años en un taller de creación literaria que la Gobernación del Cesar llegó a dictar a Codazzi hace diez años. El tutor encargado les habló sobre la poeta y desde entonces, ha mantenido el interés de investigar su vida y obra para difundirla entre sus coterráneos y promoverla por todo el Caribe. Tanto así que junto a tres amigos, constituyó la fundación ‘Árboles Azules’, con la que fomentan la cultura y hacen procesos de recuperación de la identidad cultural de la región Caribe y obviamente de Codazzi.

Al indagar a Nidio Quiroz sobre su pesquisa literaria y cómo percibe a Clemencia Tariffa, su respuesta es bucólica y melancólica: “En esta investigación conocí a una mujer extraordinaria, solitaria, enclaustrada en su enfermedad que la limitó y la condenó a varios desniveles emocionales y físicos. Descubrí a Clemencia, la que era y no era, la que no quería tener a la intrusa que la habitó sin pedir permiso. Su soledad, sus desniveles le hicieron imaginarse en otras circunstancias y descubrió en las letras su camino a la felicidad, a ese trance que le permitía encontrar paz y disfrutar. Solo con el amor, con el amor desde lo erótico, ese que ella misma quiso brindar sin límites a su pareja fortuita. Magníficamente logró llevarnos a un viaje al erotismo sutil. Para mí, la mejor poeta que ha nacido en estas tierras y me da orgullo decir que fue nuestra tutora en este hermoso camino de las letras”.

 

Samny Sarabia

@SarabiaSamny

1 Comentarios


Hanner José Freyle Nieves 30-07-2018 12:17 PM

A clemencia la conocí en Santa Marta en Unimagdalena en el taller literario Álvaro Cepeda Samudio del cuál fuí uno de sus fundadores, un sábado en una sesión de trabajo, la llevó un amigo y nos habló de su trabajo y nos leyó algunas de sus poesías, ese día nos adelantó algo de un libro de poesía erótica que pensaba publicar. Desde ese día no la volví a ver, luego por medio de un amigo escritor samario supe de su muerte.

Escriba aquí su comentario Autorizo el tratamiento de mis datos según el siguiente Aviso de Privacidad.

Le puede interesar

Los “Manuscritos de buhardilla” de Rodolfo Ortega

Los “Manuscritos de buhardilla” de Rodolfo Ortega

Confieso que nunca me había sentido con un compromiso tan grande de escribir algo que estuviese a la gran altura de la presente circun...

Crónica de un coloquio entre poetas

Crónica de un coloquio entre poetas

En la sala de conferencias de la biblioteca Rafael Carrillo, dos jóvenes poetas de Valledupar analizan el panorama poético de la regi...

Juan Gelman y la apuesta por una poética comunicante

Juan Gelman y la apuesta por una poética comunicante

Desde el momento de su publicación, Violín y otras cuestiones [1] tuvo una buena acogida por parte de la crítica. El texto aparece e...

Los 10 mejores poemas de Gustavo Adolfo Bécquer

Los 10 mejores poemas de Gustavo Adolfo Bécquer

  Gustavo Adolfo Bécquer nació en Sevilla (España) en 1836 y murió en la misma ciudad, a los 34 años, en 1870 a causa de tubercu...

El regalo de los Reyes Magos, el cuento breve de O. Henry

El regalo de los Reyes Magos, el cuento breve de O. Henry

  Un dólar y ochenta y siete centavos. Eso era todo. Y setenta centavos estaban en céntimos. Céntimos ahorrados, uno por uno, disc...

Lo más leído

Síguenos

facebook twitter youtube

Enlaces recomendados