Literatura
El cuento del gallo capón, el cuento muy breve de García Márquez
Los que querían dormir, no por cansancio sino por nostalgia de los sueños, recurrieron a toda clase de métodos agotadores. Se reunían a conversar sin tregua, a repetirse durante horas y horas los mismos chistes, a complicar hasta los límites de la exasperación el cuento del gallo capón, que era un juego infinito en que el narrador preguntaba si querían que les contara el cuento del gallo capón, y cuando contestaban que sí, el narrador decía que no había pedido que dijeran que sí, sino que si querían que les contara el cuento del gallo capón, y cuando contestaban que no, el narrador decía que no les había pedido que dijeran que no, sino que si querían que les contara el cuento del gallo capón, y cuando se quedaban callados el narrador decía que no les había pedido que se quedaran callados, sino que si querían que les contara el cuento del gallo capón, y nadie podía irse, porque el narrador decía que no les había pedido que se fueran, sino que si querían que les contara el cuento del gallo capón, y así sucesivamente, en un círculo vicioso que se prolongaba por noches enteras.
FIN
Gabriel García Márquez
0 Comentarios
Le puede interesar
El arte de perderse a sí mismo
“Rue des boutiques obscures” (Folio 2011), del Premio Nobel de Literatura 2014 Patrick Modiano, es el libro que he leído esta se...
Cuento: Un secreto para ser contado
Este es un secreto que he guardado toda la vida y que hoy después de consultar con mamá y obtener su visto bueno te lo quiero contar,...
El ahogado más hermoso del mundo, el cuento de Gabriel García Márquez
Los primeros niños que vieron el promontorio oscuro y sigiloso que se acercaba por el mar, se hicieron la ilusión de que era un b...
¿A qué suenan las personas?
En estos tiempos convulsos –donde ya sean mandatarios de potencias mundiales, o el vecino del sexto con el que coincidimos todas ...
Gonzalo Arango, profeta del Nadaísmo
Han pasado más de 40 años desde su desaparición física en un lamentable accidente cerca de Villa de Leyva, en septiembre de 197...