Medio ambiente

La bioconstrucción, una oportunidad de desarrollo en Valledupar

La bioconstrucción es un enfoque arquitectónico que responde a las necesidades del mundo moderno en materia de eficiencia energética, reciclaje, ahorro del agua, conservación de los ecosistemas, integración con el entorno y bienestar general para las comunidades.

Hoy se encuentra en desarrollo a pesar de la recesión económica que viven muchos países del mundo, y se perfila como una opción seria a la hora de aportar soluciones a los problemas de vivienda.

Estas ideas fueron expuestas en el auditorio de la Fundación Carboandes el pasado 18 de febrero, durante una conferencia organizada por la Reserva Natural Los Tananeos y el Instituto Sion, con el fin de empezar a ambientar las posibilidades y ventajas que esta práctica ofrece en materia habitacional para Valledupar.

La introducción estuvo a cargo de Katty Ropero Antelíz, directora de la Reserva Natural Los Tananeos, quien en breves palabras hizo una exposición de las actividades que en las áreas de ecoturismo, ecoalfabetismo, convivencia y conservación ambiental ha liderado su entidad durante tres años de existencia; luego el turno fue para Ismael Caballero Domínguez, Ingeniero Civil y Presidente de la Asociación Española de Bioconstrucción, que desarrolló en una comunicación vía Skype, los elementos esenciales de la bioconstrucción y dio respuesta a varios interrogantes formulados por los asistentes acerca del tema.

El objetivo principal de la bioconstrucción es lograr una integración armónica entre el individuo, la comunidad y los ecosistemas, en la que el aprovechamiento de los recursos sea eficiente y las familias puedan vivir con una mejor calidad.

Esto se logra al aplicar los principios de una casa saludable, que incluyen mantener niveles de humedad adecuados a través de una correcta circulación de aire, evitar excesivas radiaciones electromagnéticas, implementar el uso de energías renovables, tecnologías como el retrete sin agua y la depuración del agua a través de sistemas fitosanitarios para nuevos usos como regar el jardín.

En cuanto a los materiales utilizados en el proceso de la bioconstrucción, Ismael Caballero anotó que incluyen una amplia variedad, muchos de los cuales son de fácil consecución en el ámbito local, como el bambú, la palma y el heno, los cuales se aglutinan a través de mezclas con base en minerales como la arcilla y el cal.

Un público compuesto principalmente por arquitectos, constructores y ambientalistas formuló varias preguntas en relación a las posibilidades reales de que un proyecto como este pueda ser realizado a gran escala en una ciudad como Valledupar, a lo cual el conferenciante respondió que es muy viable, pues ya en otras ciudades americanas de clima tropical como Manaos (Brasil) hay proyectos de bioconstrucción de hasta cien viviendas, que por poderse realizar en menor tiempo y con materiales más económicos alcanza costos muy competitivos frente a la construcción tradicional.

Quedó claro que la materialización de una idea como esta requiere el esfuerzo de algunos pioneros, seguramente observar en la práctica los beneficios de este enfoque ayudará a vencer el escepticismo natural que acompaña a las nuevas propuestas, principalmente cuando el desarrollo sustentable y mejores hábitos ambientales se hacen cada día más apremiantes para el planeta.