Opinión

Editorial: El papel crucial de la mujer en las letras

Redacción

03/03/2014 - 08:30

 

La historia de la literatura caribeña y cesarense ha reflejado hasta ahora una escasa presencia de la mujer como sujeto literario.

El espacio ocupado por la mujer, tradicionalmente limitado a las esferas del hogar y la familia, ha hecho que sus creaciones literarias no tengan el mismo reconocimiento, o simplemente no trasciendan más allá de los pequeños círculos de lectores.

Como bien pudo expresarlo la licenciada de literatura, Melfi Campo Torres, durante la serie de conferencias organizadas en el Banco de la República de Valledupar, la aparición de la mujer en el horizonte literario fue tardío –se habla de los años 80 y 90–, y sin embargo, su irrupción fue determinante para su desarrollo.

Con la poesía de Clemencia Tariffa, los cuentos de Zamira Hernández y Ledys Jiménez, y las novelas de Mary Daza Orozco, las letras del departamento del Cesar maduraron notablemente en hondura y sensibilidad expresiva, en crítica y temáticas, y sobre este asunto queremos justamos insistir en este editorial.

Considerando la literatura como un modo de retratar una sociedad y una época concreta –y no solamente como un medio de entretenimiento reservado a algunos círculos–, la aparición de la mujer supone también la ruptura de un equilibrio y de unos tabúes ancestrales.

Con la irrupción de la voz femenina en un entorno tradicionalmente masculino, nuevos temas vieron la luz y ayudaron a concienciarnos sobre las lagunas y los atropellos de nuestras sociedades. Así es cómo pudimos acercarnos a esos temas que no tenían habitualmente espacio en las publicaciones, como son la maternidad, la familia, la feminidad, la libertad, la comunicación, el concepto del poder y muchos otros temas.

De repente, entendimos que el lenguaje podía ser agresivo o insultante, que la sexualidad era compartida, que el silencio podía herir incluso más que las palabras, y que no existía un género que tuviera un monopolio sobre cómo debía leerse la historia.

A lo largo del siglo XX, mujeres como Gabriela Mistral, Pearl S. Buck, Virginia Wolf o Isabel Allende han ayudado a que la mujer ocupe un espacio en las librerías y bibliotecas, pero también y sobre todo, en las conciencias.

Del mismo modo, la escritora Mary Daza lo hace con sus libros en Valledupar y el Cesar. Gracias a “Los muertos no se cuentan así” (1991) conocimos lo peor de la violencia en Colombia narrada desde la perspectiva de una mujer, y con “Lo que tú quieras” (2013) descubrimos un relato que desnuda la intolerancia de una comunidad ante la homosexualidad, tema que pocas veces se menciona en las novelas locales.

A todas esas mujeres que se dedican a plasmar sus historias en un papel, que se atreven a narrar lo que hasta ahora no parecía tener importancia, a las que han decidido seguir el camino de contar historias, dedicamos un sincero mensaje de aliento y agradecimiento.

 

PanoramaCultural.com.co


0 Comentarios


Escriba aquí su comentario Autorizo el tratamiento de mis datos según el siguiente Aviso de Privacidad.

Le puede interesar

En defensa del punto G: Joaquin Guillen

En defensa del punto G: Joaquin Guillen

  Los griegos que inventaron nuestra manera occidental de pensar y hacer, dijeron que cuando el cielo está más oscuro, alguna est...

Reyes que van por su segunda corona

Reyes que van por su segunda corona

  Ya estamos en la cuenta regresiva para el evento competitivo, cultural y folclórico más importante de Colombia, el Festival de la...

El cielo de los arrodillados

El cielo de los arrodillados

El 11 de marzo de 2018 se efectuarán en Colombia las próximas elecciones al Congreso, un certamen democrático o más bien roñoso qu...

Carmen de Bolívar entre VPH y EPM

Carmen de Bolívar entre VPH y EPM

El dramático caso de más de 300 niñas vacunadas contra el virus del papiloma humano en el municipio de El Carmen de Bolívar, la ang...

En Barrancabermeja, un festival modelo

En Barrancabermeja, un festival modelo

  Son muchas las columnas que les he dedicado a los festivales vallenatos del país, especialmente al Festival de la Leyenda Vallen...

Lo más leído

¿Qué es la oralidad?

Javier Zamudio | Patrimonio

La Cultura y el laberinto del poder

Omar Castillo | Pensamiento

Los Pacabuyes: ¿un pueblo Chimila o Malibú?

Luis Carlos Ramirez Lascarro | Pueblos

La magia de Escalona

Alberto Muñoz Peñaloza | Música y folclor

Vallenato clásico

Luis Carlos Ramirez Lascarro | Música y folclor

El Vallenato de Rafael Escalona

Darío Blanco Arboleda | Música y folclor

Armando Zabaleta: el fecundo compositor de “No voy a Patillal”

Eddie José Dániels García | Música y folclor

Síguenos

facebook twitter youtube

Enlaces recomendados