Opinión

Carta de un campesino a su verdugo

Baldot

03/08/2021 - 04:50

 

Carta de un campesino a su verdugo
Foto archivo del artista Baldot

 

Dicen que andas buscándome para asesinarme, tú que me conoces. Ayudé a moldearte cuando crecías y te vi correr desde pequeño, jugar con el carro de madera que tu padre y yo hicimos para que aquel diciembre te lo pusiera el niño Dios.

¿No eres tú el hijo de José y María?, aquel chiquillo que jugaba en las soleadas tardes en el campo, que a machete y pala te hicimos tu padre y yo. Hoy, tienes tu mente perdida y tu corazón endurecido con el tiempo por culpa del señor Estado, por robarte todo.

Tus sueños te hicieron desconocer que somos el mismo rostro que el río se llevó. Me dicen que me andas buscando, que derribas puertas, ventanas. Arrasas a pueblos enteros, en los que las calles son blancas y el silencio es eterno.

Eres don Estado que trata de callar mis ideas, el mismo que dice cuidarme y alardea protegerme, y la realidad es que estoy muerto. Sí, estoy muerto, muerto por el mismo hijo que vi crecer. Toma mis tierras, no mi vida, cultiva en ella el olvido y la tristeza, y lleva el cultivo del horror a la gran ciudad, que devora cual Saturno a su hijo… No olvides que los campesinos son los padres de los hijos, los verdaderos dueños de la tierra.

 

Baldot

Sobre el autor

Baldot

Baldot

Fintas literarias

Uvaldo Torres Rodríguez. “Baldot”. Artista que expresa su vida, su historia, sus sueños a través del lienzo, plasmando su raza, lo tribal, lo ancestral, y deformando la forma en la búsqueda de un nuevo concepto. Redacta su vida a través de la pintura, sus fintas literarias las escribe con guantes de boxeo. Con amor al arte y a la literatura desde niño.

0 Comentarios


Escriba aquí su comentario Autorizo el tratamiento de mis datos según el siguiente Aviso de Privacidad.

Le puede interesar

Valledupar, antes y después de la interconexión Corelca (parte final)

Valledupar, antes y después de la interconexión Corelca (parte final)

Debido al racionamiento de energía eléctrica en 1992, se puso en evidencia la gran problemática (estructurales, principalmente) y ca...

Silvestre Dangond, un artista que aún no dimensionamos

Silvestre Dangond, un artista que aún no dimensionamos

  Ladran, señal de que cabalgamos, frase bastante conocida y adjudicada equivocadamente al Quijote, cae como anillo al dedo con lo...

El lenguaje de la polarización

El lenguaje de la polarización

  Amigos, Colombia se ahoga en el mar turbulento de la polarización. El miedo, el radicalismo y la estigmatización son las armas ...

En cortinas de humo tenemos maestros

En cortinas de humo tenemos maestros

  Sentarme a escribir semanalmente esta columna debería ser una rutina, pero ocurre que no, ya que pospongo su escritura y trabajo...

Las credenciales de Miguel Morales

Las credenciales de Miguel Morales

Se trata de la misma persona. La voz que, aquella tarde en la distancia, distrajo mi atención al creer que se trataba de Rafael Oroz...

Lo más leído

La Muerte de Abel Antonio

Álvaro Rojano Osorio | Música y folclor

Origen del Festival de la Leyenda Vallenata: un viaje en el tiempo

Simón Martínez Ubárnez | Música y folclor

La parranda vallenata como un ritual de amistad

María Ruth Mosquera | Música y folclor

La Parranda vallenata

Carolina Rosa Guerra Ariza | Patrimonio

Síguenos

facebook twitter youtube

Enlaces recomendados