Opinión
¿Y dónde está el animador?
Quien duda del liderazgo del animador Sady Rojas, próspero empresario de las famosas castas Matecaña y padre de una escuela de animadores que por la década de los setenta impuso un estilo en las presentaciones de los conjuntos vallenatos de esa época, escuela de la que fue un alumno aventajado Pepe Jiménez, animador por muchos años del Binomio de Oro.
Algunos fungían como verdaderos animadores de las casetas y bailes, otros se hicieron llamar presentadores, tal vez porque no tenían la chispa y la jocosidad para una verdadera animación, pero, definitivamente, un conjunto vallenato de la época de los 70, 80 e incluso 90 no podía subirse a una tarima si no mediaba un buen animador, presentador o lo que otros llamaron maestros de ceremonias.
Los mejores locutores de radio encontraron una buena manera de aumentar sus ingresos, entonces se metieron a presentadores de conjuntos vallenatos, pero también a la inversa algunos animadores vallenatos se convirtieron en locutores de emisoras.
Cuando nacen los festivales vallenatos, se pensaba primero era en quien sería el animador o presentador. Recuerdo que hace 24 años en el Festival Samuel Martínez de la Loma el primero fue Huber Claro Quintero (Q.E.P. D.), luego se posesionó como vitalicio Juan Rincón Vanegas y por ahí han pasado muchos, especialmente Isaac León Durán.
Uno de los buenos presentadores fue Juan Carlos Rueda, quien estuvo con Alfredo Gutiérrez, Calixto Ochoa, Los Betos, los Hermanos Zuleta, estos luego institucionalizaron a “Lucho” Alandete más conocido como “Chachale”.
La mayor parte de la vida artística de Diomedes Díaz estuvo a su lado una institución en esto de las animaciones y presentaciones a quien llamaron en Valledupar la biblia del Vallenato Jaime Pérez Parody, presentador también vitalicio del Festival de la Leyenda Vallenata.
La camada tal vez más reciente de animadores y presentadores de conjuntos vallenatos ha estado conformada por Javier Fernández Maestre, Javier Oñate Alí, Oswaldo Rolong, Korak Pérez Villamizar, Cristian Montero y muchos otros que se me escapan ahora.
Lo triste es que los Animadores, Presentadores o Maestros de Ceremonias en los conjuntos vallenatos se encuentran en vía de extinción, porque ahora la moda es que los cantantes desempeñan también ese papel y al parecer los bailadores quieren más música y menos verbo.
Jorge Nain Ruiz
@JorgeNainRuiz
Sobre el autor
Jorge Nain Ruiz
Vallenateando
Jorge Nain Ruíz. Abogado. Especializado en derecho Administrativo, enamorado del folclor Vallenato, cantautor del mismo. Esta columna busca acercarnos a una visión didáctica sobre la cultura, el folclore y especialmente la música vallenata. Ponemos un granito de arena para que la música más hermosa del mundo pueda ser analizada, estudiada y comprendida.
0 Comentarios
Le puede interesar
Editorial: Tiempos para la confianza
Después de unas elecciones en las que el tema de la Paz ha sido el principal motivo de discusión, y de dos victorias consecutivas en ...
Vida y obra de Samuelito (2nda parte)
Continuamos la semblanza del Juglar de la Loma Samuel Martínez Muñoz, como lo prometimos en la columna anterior. “Samuelito” se ...
Una Semana Mayor funesta
La Semana Santa es, sin duda, la fiesta religiosa más importante aún en Colombia y especialmente para los católicos; ello alud...
Editorial: Investigación y deleite con la música vallenata
El tercer Encuentro Nacional de Investigadores de la Música Vallenata, auspiciado por la Universidad Popular del Cesar, finalizó la s...
A proteger el vallenato clásico
Con la expedición de la Resolución 1321 del 26 de Mayo del presente año, mediante la cual “se incluye la música vallenata tradici...